El contenido de ficci¨®n es el rey

Cuando se han cumplido dos d¨¦cadas de la famosa profec¨ªa que Bill Gates lanz¨® sobre Internet, ¡°el contenido es el rey¡±, el panorama de la televisi¨®n digital es una prueba viviente de que ten¨ªa raz¨®n. La presentaci¨®n esta semana de una importante inversi¨®n en contenidos propios de Movistar, el anuncio de Apple de entrar en este mercado, y los resultados anuales de Netflix, el rey de la televisi¨®n global, dan una idea de que el futuro de la televisi¨®n va a ser solo para el que tenga algo nuevo, propio y original que contar.

Apple quiere empezar a producir pel¨ªculas y series, seg¨²n public¨® hace 10 d¨ªas el diario The Wall Street Journal. La compa?¨ªa empezar¨¢ a lanzar sus propios v¨ªdeos a trav¨¦s de su servicio de suscripci¨®n en streaming (v¨ªdeo por Internet) Apple Music hacia finales de este a?o, seg¨²n el diario estadounidense, que informa de que la empresa ha mantenido conversaciones con ¡°productores veteranos¡± tanto de televisi¨®n como de cine. La compa?¨ªa adquiri¨® en julio la serie Carpool Karaoke, con millones de fans y donde el c¨®mico y presentador James Corden lleva en coche a alg¨²n divo de la m¨²sica y canta con ¨¦l durante el trayecto. Todo el movimiento parece en realidad realizado para ofrecer contenidos adicionales a los usuarios de Apple Music.

Movistar, el operador de cable m¨¢s grande de Espa?a, anunciaba esta semana un esfuerzo en producci¨®n propia de 100 millones de euros al a?o en los pr¨®ximos a?os. Catorce series propias de las que La peste intentar¨¢ ser el buque insignia. El presidente de Telef¨®nica, Luis Miguel Gilp¨¦rez, dijo que la empresa quiere ser ¡°un hub de creaci¨®n de contenidos¡±. Es la consecuencia del desembarco de Netflix, HBO y Amazon Prime Video en Espa?a. El espectador ya no tiene por qu¨¦ comprar paquetes de canales. Comprar¨¢ lo que le divierta y lo ver¨¢ directamente en la aplicaci¨®n de la productora. A un click, el contenido de Telef¨®nica. A otro click, el de Netflix.

La disrupci¨®n del mercado de televisi¨®n en Espa?a que evidencia la ambici¨®n de Movistar es una reproducci¨®n de lo que han hecho estas plataformas en Estados Unidos. Los canales tradicionales NBC, CBS y ABC y los de cable producen m¨¢s series que nunca. Entre los canales b¨¢sicos de cable ten¨ªan unas 25 series hace una d¨¦cada. Esa cifra ha crecido un 400% y cada uno estudia la manera de dar ese contenido por Internet y saltarse a los operadores.

Poco a poco, el sue?o de Reed Hastings, el CEO de Netflix, de que la televisi¨®n no ser¨¢n canales sino aplicaciones que el espectador abre y cierra en su pantalla como en un m¨®vil, se est¨¢ haciendo realidad. Solo la calidad del producto y quiz¨¢ el precio y la facilidad de uso van a decidir qui¨¦n gana. Para los creadores y los espectadores, es una edad de oro. Para el negocio tradicional de la televisi¨®n, son tiempos de zozobra.

Netflix est¨¢ dominando este nuevo mercado de una forma que pocos preve¨ªan al principio de esta d¨¦cada. El servicio de streaming de Netflix acaba de cumplir 10 a?os. En la presentaci¨®n de resultados de este a?o, el pasado mi¨¦rcoles, anunci¨® que ya tiene 93,8 millones de suscriptores. Se puede ver en 190 pa¨ªses, con programas en 20 idiomas. El a?o pasado ingres¨® 8.300 millones de d¨®lares (7.757 millones de euros) y sin embargo solo presenta un beneficio de 174 millones.

Cualquier presentaci¨®n de temporada de cualquier televisi¨®n del mundo palidece ante las cifras de la compa?¨ªa de Los Gatos (California). En 2012, cuando decidi¨® invertir m¨¢s de 100 millones de d¨®lares en la producci¨®n de House of Cards para pasmo de la industria, Netflix ten¨ªa cuatro programas propios. En 2016 ten¨ªa 126 programas propios entre series, documentales y pel¨ªculas, seg¨²n cifras de The Hollywood Reporter. Este a?o prev¨¦n 42 estrenos. Gasta casi 6.000 millones al a?o en contenido. Quieren crecer lo m¨¢s posible antes de aumentar sus m¨¢rgenes de beneficio.

Romper las reglas

En la competencia, Time Warner (que incluye los estudios Warner Brothers, el canal HBO, Cartoon Network, TNT y otros) anunci¨® en 2015 que planeaba aumentar su inversi¨®n en contenido propio en los pr¨®ximos a?os hasta llegar a m¨¢s de 17.500 millones al a?o, un 30% m¨¢s de lo que gastaba en 2014.

En estos cinco a?os, Netflix ha pasado de romper las reglas del mercado de la televisi¨®n, con su plataforma por Internet, a romper tambi¨¦n las reglas de Hollywood, con una producci¨®n de contenido con la que es dif¨ªcil competir. Las grandes productoras empiezan a recelar de Netflix, que se ha hecho grande gracias a pagar muy bien por su contenido y ahora les est¨¢ haciendo la competencia con series y pel¨ªculas propias y un acceso instant¨¢neo a un p¨²blico que el cine o los canales tradicionales no pueden ni so?ar.

La profec¨ªa de Gates ya es una realidad en el mundo de la televisi¨®n. En este momento, el contenido es el rey. El que no tenga algo propio, original y de calidad que ense?ar, y a ser posible su propia plataforma de streaming, est¨¢ fuera de juego. En la carrera por ofrecer la mejor televisi¨®n HBO, Amazon Studios y especialmente Netflix, est¨¢n llevando la producci¨®n de televisi¨®n a l¨ªmites desconocidos: legiones de guionistas, directores de primera fila y estrellas de Hollywood. Gracias a esta competici¨®n, el p¨²blico est¨¢ disfrutando de series que cuestan m¨¢s de 9 millones de euros la hora, como Juego de tronos en HBO. En una entrevista con The Economist, el CEO de Netflix, Reed Hastings, se preguntaba: ¡°?C¨®mo ser¨¢ la televisi¨®n de 19 millones de d¨®lares la hora?¡±. El p¨²blico no puede esperar a averiguarlo. Mientras, el mundo de la televisi¨®n tiembla.