Ben Affleck: un director competente, un actor inane
Sus m¨¦ritos como creador me los ensombrece tener que soportar al int¨¦rprete en un plano s¨ª y en el siguiente tambi¨¦n
VIVIR DE NOCHE
Direcci¨®n: Ben Affleck.
Int¨¦rpretes: Ben Affleck, Sienna Miller, Zoe Saldana, Brendan Gleeson.
G¨¦nero: thriller. EE UU, 2016.
Duraci¨®n: 129 minutos.
Despu¨¦s de quedar sobrecogido por lo que contaba Eastwood de forma magistral en Mystic River, tuve curiosidad por descubrir el material literario adaptaba, la tremebunda historia de aquel indefenso cr¨ªo al que secuestraron y violaron los lobos, uno con placa y otro con sotana. Ignoraba que iba a crearme otra gozosa adicci¨®n. El autor se llamaba Dennis Lehane. De este escritor me gusta hasta su careto. Solo me hice un l¨ªo con su novela Shutter Island, al igual que con la turbia pel¨ªcula de Scorsese. Pero valoro mucho la negrura, la dureza y la humanidad que empapa a sus detectives Patrick Kenzie y Angela Gennaro. Aprecio su imaginaci¨®n, su toque en los di¨¢logos, su oficio, en los guiones que escribi¨® para las irremplazables series The Wire y Boardwalk Empire. Y ante todo, ha creado una voluminosa obra maestra titulada Cualquier otro d¨ªa, que tambi¨¦n es el arranque de la saga sobre la familia Coughlin¡±. Contin¨²a con Vivir de noche y la reci¨¦n publicada Ese mundo desaparecido, que imagino voy a devorar en un par de noches. Lehane, como Coetzee, Carr¨¨re, Echenoz, Chirbes (bendito sea, descanse en paz), Ellroy o John Connolly pertenecen a ese grupo de escritores que me provocan anhelo cuando me entero de que van a publicar un nuevo libro.
Ben Affleck escribe, produce, dirige y protagoniza la adaptaci¨®n de Vivir de noche. No se corta un pelo en su deseo de autor¨ªa absoluta. ?l, como Welles en Ciudadano Kane. Tendr¨¢ justificadas razones para ello ya que la apreciable Argo fue bendecida con varios oscars, incluido el muy excesivo a la mejor pel¨ªcula del a?o, y esos honores deben de aumentar considerablemente la audacia.
Affleck, como en las anteriores pel¨ªculas que ha dirigido, Adi¨®s peque?a, adi¨®s, The Town. Ciudad de ladrones y Argo vuelve a demostrar en Vivir de noche que est¨¢ capacitado para narrar historias con la c¨¢mara, crear una ambientaci¨®n primorosa, dirigir actores de verdad (Brendan Gleeson y Chris Cooper est¨¢n cre¨ªbles y complejos, pero tambi¨¦n pregunto: ?recuerdan una sola pel¨ªcula en la que no est¨¦n mod¨¦licos?), comprende el universo de Dennis Lehane, hace una pel¨ªcula visible y audible, aunque nada memorable. Pero sus m¨¦ritos como creador me los ensombrece tener que soportar al Ben Affleck actor en un plano s¨ª y en el siguiente tambi¨¦n. No me transmite nada, es actor de un solo gesto, de una soser¨ªa alarmante, plano, sin magnetismo, sin registros. Y no importa si el personaje al que interpreta es Batman, si los efectos especiales, las volteretas por los aires y el gesto permanentemente ce?udo sirven para ocultar mil carencias interpretativas. Pero si Affleck se empe?a en otorgar matices a sus personajes y expresar variados sentimientos, sus limitaciones son notorias e irritantes. Ben Affleck no provoca ni fr¨ªo ni calor, es el hieratismo involuntario, es la nada.
En Cualquier otro d¨ªa, Lehane nos hablaba pasajeramente del hijo peque?o de la familia Coughlin. La protagoniza el mayor, alguien empe?ado en ser fiel a sus c¨®digos morales en medio de una ciudad muy chunga, el Boston de comienzos del siglo XX, amenazada por anarquistas clandestinos que no recurren a la dial¨¦ctica sino al bombazo y el tiro en la nuca, dominada por un ambiente en el que la corrupci¨®n no es la excepci¨®n, sino la regla, y en la que el patriarca de la familia Coughlin, honorable jefe de la polic¨ªa, es una de las piezas m¨¢s poderosas del fango institucional.
En Vivir de noche aquel chaval se ha convertido en un hombre descre¨ªdo y de rictus amargo, experto en supervivencia despu¨¦s de haber conocido el horror combatiendo en la Primera Guerra Mundial, dispuesto vocacionalmente a ejercer de delincuente para ganarse la vida pero neg¨¢ndose a integrarse en los clanes gansteriles, irland¨¦s e italiano, que le dan a elegir entre trabajar para ellos o volarle los sesos, dotado con una capacidad suicida para enco?arse con la mujer m¨¢s peligrosa.
Observando el universo, los personajes y y las situaciones de esta pel¨ªcula no puedo dejar de pensar en la serie Boardwalk Empire. Y la serie de televisi¨®n sale ganando por KO. Tambi¨¦n quiero imaginar que Scorsese dirige alguna vez (pronto, que ya es mayor) Cualquier otro d¨ªa. Por so?ar que no quede.
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