De aquellos polvos
Gaddis pone de manifiesto la capacidad cr¨ªtica de la literatura como contrapoder en 'La carrera por el segundo lugar'
Considerado uno de los novelistas estadounidenses m¨¢s importantes del siglo XX, autor de una obra en la que el lector se adentra con iguales cantidades de fascinaci¨®n y hartazgo, William Gaddis record¨®, al recibir el National Book Award (1994), que cierto juez estado?uni?dense orden¨® que quemaran sus papeles tras su muerte porque ¡°dijo que no era asunto de nadie c¨®mo hab¨ªa llegado hasta ah¨ª, y yo siento lo mismo¡±, aunque tambi¨¦n admiti¨® que ¡°ahora las universidades tienen inter¨¦s en comprar eso que llaman los archivos, as¨ª que [los escritores] empezamos a guardar cualquier basura que salga de la m¨¢quina de escribir. ?Alguna de esas basuras incluso puede acabar aqu¨ª!¡±.
Autor de Los reconocimientos (1955) y Jota Erre (1975), entre otros, Gaddis no pod¨ªa escribir ¡°basura¡±, por supuesto; pero parece poco probable que hubiese aprobado la publicaci¨®n de La carrera por el segundo lugar, la selecci¨®n de materiales provenientes de su archivo realizada en 2002 por el profesor estadounidense Joseph Tabbi porque, como ¨¦ste recuerda en su introducci¨®n, ¡°siempre se neg¨® a dar explicaciones sobre sus libros¡±. Gaddis puede estar tranquilo, sin embargo: ninguno de los materiales seleccionados (art¨ªcu?los para la prensa, guiones de cortometrajes educativos y promocionales, la ¨²nica pieza deliberadamente autobiogr¨¢fica que escribi¨® el autor, res¨²menes de proyectos, discursos, etc¨¦tera) ofrece explicaci¨®n alguna sobre sus libros. A cambio, su selecci¨®n pone de manifiesto algunas de las caracter¨ªsticas m¨¢s relevantes del estilo de la ficci¨®n del autor de G¨®tico carpintero (1985), como el barroquismo de la forma y una cierta inclinaci¨®n por la s¨¢tira y el tratamiento grotesco de personajes y di¨¢logo, aunque tampoco es particularmente ¨²til como primer acercamiento a su obra, una impresi¨®n que se vuelve m¨¢s pronunciada all¨ª donde el escritor regresa sobre sus libros, recupera personajes como Jota Erre, en una gran pieza de s¨¢tira gubernamental, o vuelve sobre su inter¨¦s por la pianola que juega un papel destacado en Los reconocimientos. ?Gaddis no es apropiado para los lectores con prisas: pero quiz¨¢s la publicaci¨®n de estos materiales se haya demorado en demas¨ªa.
No muy ¨²til como introducci¨®n a la obra de Gaddis, el inter¨¦s de La carrera por el segundo lugar se deriva de dos aspectos de la selecci¨®n: la naturaleza de las reflexiones reunidas en ella (sobre la extraordinaria Erewhon, de Samuel Butler, la idea de autor, las condiciones materiales de vida de los escritores en el capitalismo norteamericano de la segunda mitad del siglo XX, la demanda de sinceridad en la literatura de ese pa¨ªs o la deshumanizaci¨®n y la automatizaci¨®n de la producci¨®n art¨ªstica) y la atenci¨®n puesta en ella a la pol¨ªtica estadounidense: al recordarnos que los lodos de la Administraci¨®n de Trump y su uso de la mentira pol¨ªtica vienen de unos ¡°polvos¡± que ya estaban en el aire en la d¨¦cada de 1980 bajo la forma del regreso del fundamentalismo religioso a la vida pol¨ªtica, el fracaso del sistema y el incremento del nacionalismo, la concesi¨®n de las herramientas legislativas al beneficio privado y la depreciaci¨®n del sistema p¨²blico de educaci¨®n, Gaddis no s¨®lo se revela como un extraordinario observador de su tiempo, sino que tambi¨¦n pone de manifiesto la capacidad cr¨ªtica de la literatura concebida como contrapoder, como conciencia cr¨ªtica de las democracias que, como la suya y la nuestra, flirtean en ocasiones con el suicidio sin detenerse a pensar en ello.
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Autor: William Gaddis. Traducci¨®n de Mariano Peyrou.
Editorial: Sexto P¨¬so (2017).
Formato: tapa blanda (248 p¨¢ginas).
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