Documentales no aptos para siestas

El sol se cuela entre una mara?a de troncos. Una mariposa se desprende de la cris¨¢lida batiendo las alas. Una rapaz acomoda en el pico de su polluelo una rama y cabecea, le da golpecitos, indic¨¢ndole c¨®mo edificar el nido. Un lobo con las fauces abiertas espanta a los carro?eros que le disputan la presa, mientras, expuesto a la dentellada, uno de sus lobeznos le arrebata el conejo y sale corriendo con ¨¦l. ¡°Bienvenidos al lugar donde comienza la vida¡±, interpela el narrador, mientras ense?a un bosque. Este s¨¢bado a las 18.00 se estrena en La 2 de TVE el primero de los 26 cap¨ªtulos de Planeta Selva, un documental dirigido por Juan Antonio Rodr¨ªguez de Llano que recorre forestas de Gran Canaria a Costa Rica, Sud¨¢frica o Borneo y exhibe, con una imagen nitid¨ªsima en calidad 4K, detalles ins¨®litos y escenas del d¨ªa a d¨ªa, de la vida y la muerte de la fauna.

¡°Es una demostraci¨®n de que podemos hacerlo igual de bien que los mejores, de que nada hay que envidiarle a productoras mundiales¡±, presume Juan Manuel Hidalgo, director de La 2. Durante dos a?os y medio, un equipo de ocho personas rod¨® con drones y c¨¢maras de alta velocidad por 24 localizaciones distintas para obtener las 13 horas de material editado. Part¨ªan de un guion, sab¨ªan qu¨¦ historia quer¨ªan contar, pero los c¨¢maras, formados tambi¨¦n como naturalistas, estaban alerta para modificar la planificaci¨®n sobre la marcha, seg¨²n lo que ocurriera en cada instante. No es ese el proceder, por ejemplo, de BBC, que persigue durante semanas una secuencia concreta para encajarla en su montaje final.

Cuenta Rodr¨ªguez Llano que todo el equipo pas¨® en alg¨²n punto por el hospital: ¨¢caros, garrapatas, inflamaci¨®n del h¨ªgado. Al director de fotograf¨ªa, un grupo de monos le sorprendi¨® en el veh¨ªculo trajinando con el equipo y, cuando trat¨® de imped¨ªrselo, uno le amenaz¨® y ¨¦l perdi¨® pie y, con el golpe de la ca¨ªda, el conocimiento. Cada cap¨ªtulo dura media hora y ¡ªcon m¨²sica de Iv¨¢n Palomares¡ª desentra?a los h¨¢bitos particulares de la fauna y flora de cada lugar que pisan, de la taiga boreal a la dehesa extreme?a. Salvo el primero y el ¨²ltimo.

Abren la serie con una presentaci¨®n que justifica c¨®mo el ¨¢rbol es el ¨®nfalo de todo lo vivo y, como cierre, reflexionan sobre ecolog¨ªa y conservaci¨®n. ¡°Simplemente asomarse a la ventanilla del avi¨®n da miedo: la capacidad predadora del hombre. En Madagascar, todo lo que no es zona protegida est¨¢ arrasado. A veces, para plantar arrozales, soja o aceite de palma. Otras a cambio de nada. Si el turismo natural les empieza a dar de comer tal vez cambie¡±, elucida Rodr¨ªguez Llano. En los lugares que han visitado, a lo largo del ¨²ltimo decenio la deforestaci¨®n ha acabado con 13 millones de hect¨¢reas, el equivalente a la superficie de Grecia. Discovery Italia ya se ha hecho con los derechos de emisi¨®n de Planeta Selva , que ya en origen tuvo versi¨®n espa?ola e inglesa, y, pr¨®ximamente, se cerrar¨¢n los acuerdos de venta para Francia, Alemania, China y Korea. ¡°Merece la pena apostar por la calidad, es lo que hace una producci¨®n rentable¡±, sentencia Hidalgo.

Documentales y ecologismo

Enrique Segovia Bernardo de Quer¨®s, de WWF Espa?a, asesor¨® durante todo el proceso a los hacedores del documental, que llevan desde los 70 grabando naturaleza. Explica que las dos principales amenazas al medio ambiente derivan de c¨®mo producimos energ¨ªa y alimento. De la primera hay noci¨®n y empieza a controlarse, de la segunda, no tanto. Naciones enteras conquistan terreno salvaje para cultivos agr¨ªcolas intensivos, para vender la materia prima a las potencias occidentales: soja y aceite de palma son los casos m¨¢s sangrantes hoy. No es solo un mal de pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo. "En Espa?a ya ocurri¨®. Plantamos vid y olivo como si tuvi¨¦ramos que suministrar de aceite y dar de beber vino al mundo entero", aduce Segovia. Pero el peor riesgo local actualmente no es la frontera agr¨ªcola sino el abandono del medio rural, los incendios que por dejadez devastan verano a verano los bosques. La soluci¨®n del turismo natural, como apunta Javier Valenzuela, de la Fundaci¨®n Patrimonio Natural de Castilla y Le¨®n, colaboradores tambi¨¦n de Planeta Selva, es igualmente aplicable: en 2016 m¨¢s de 3 millones de turistas visitaron los parques naturales de dicha comunidad aut¨®noma