John Oliver: ¡°Nunca trat¨¦ a Trump como un chiste¡±

La campa?a de promoci¨®n de la cuarta temporada de Last Week Tonight ayuda a entender hasta qu¨¦ punto la victoria del presidente Donald Trump intoxica la realidad medi¨¢tica en Estados Unidos. Se ve al presentador John Oliver escondido tras una mesa, levantando la cabeza asustado y el r¨®tulo dice que en tiempos de miedo hay que llamar a una persona temerosa. El c¨®mico brit¨¢nico (Birmingham, 1977) admite que le horroriza lo que ve, y no solo por lo que pasa en su pa¨ªs de adopci¨®n. ¡°Todo es surrealista¡±, afirma, ¡°soy inmigrante con muchos lujos y aun as¨ª no tengo motivos para estar tranquilo¡±.

La atenci¨®n se centra tanto en las consecuencias de las pol¨ªticas de Trump que nadie se para ya a analizar lo que pas¨® durante la contienda electoral. Es dif¨ªcil negar que la ret¨®rica del magnate result¨® m¨¢s efectiva que el esfuerzo de los c¨®micos que se dedican a la s¨¢tira pol¨ªtica por ridiculizarlo. ¡°Cierto¡±, admite Oliver, ¡°pero no estamos tratando de hacer la misma cosa. ?l no quiere ser divertido, y esa es la desafortunada consecuencia de las cosas que dice a la ligera. Es insultante¡±.

Oliver dice que se tom¨® siempre muy en serio a Trump: ¡°Por eso me horrorizan las cosas que dice¡±. Cuenta que tuvo claro que ganar¨ªa la elecciones tras el Super Martes de marzo, cuando los aspirantes de los partidos se disputaron el respaldo de sus bases de cara a la candidatura. Eso fue hace un a?o. ¡°Gustara o no, ah¨ª se convirti¨® en una fuerza pol¨ªtica mayor¡±, recuerda en una charla con periodistas en la sede de HBO en Nueva York. Por eso hasta ese momento pr¨¢cticamente no hab¨ªa prestado atenci¨®n en su programa a las elecciones.

El domingo previo a los comicios del 8 de noviembre dedic¨® su espacio a contar a los estadounidense qu¨¦ pasar¨ªa si ganaba Trump. ¡°Nunca lo trat¨¦ como un chiste¡±, precisa, por eso ha tratado de diseccionar sus propuestas, como la construcci¨®n del muro en la frontera con M¨¦xico: ¡°Es una idea est¨²pida¡±. Con el magnate ya en la Casa Blanca, la intenci¨®n de Oliver es defender el territorio en el que se desenvuelve su programa y mostrar a los espectadores cuestiones que no abordan los medios.

La nueva temporada de Last Week Tonight arranc¨® oficialmente el pasado domingo en la HBO en EE UU. En Espa?a se puede ver en la plataforma online de HBO en versi¨®n original los martes y en versi¨®n subtitulada los jueves, y subtitulada tambi¨¦n en Movistar Xtra los jueves (18.30 y bajo demanda). Oliver admite que Trump estar¨¢ ¡°tangencialmente vinculado¡± a cualquier historia que se trate durante este a?o, porque es el presidente de EE UU. ¡°Pero no ser¨¢ el protagonista¡±, puntualiza. El problema es que el magnate republicano no es el ¨²nico que est¨¢ contaminando el clima pol¨ªtico y social con su mensaje populista. El ejemplo m¨¢s pr¨®ximo es el Brexit.

El p¨²blico estadounidense suele tener una visi¨®n bastante miope del mundo. Por eso, Oliver va a concentrarse esta temporada en lo que est¨¢ pasando tambi¨¦n en Europa. ¡°Nada sucede de manera aislada¡±, advierte. Aunque cuando se echa las manos a la cabeza es al ver lo cerca que estuvo la extrema derecha de ganar en Austria. ¡°No lo hicieron pero un pelo y eso realmente asusta¡±, se?ala. Y tambi¨¦n le gustar¨ªa hacer algo sobre los campos de detenci¨®n en Australia. ¡°Horrible¡±, lamenta.

Aunque se considera un c¨®mico, se ve con la obligaci¨®n moral de ser lo m¨¢s riguroso posible al abordar historias reales que despu¨¦s ali?a con un buena dosis de humor. Por eso, rechaza que se achaque a los comediantes responsabilidad alguna en la proliferaci¨®n de noticias falsas a trav¨¦s de las redes sociales. ¡°La motivaci¨®n es completamente distinta¡±, argumenta, ¡°las fake news buscan agregar a gente pasando informaci¨®n que no est¨¢ verificada¡±.

¡°Si agarras una de esas historias y te remontas al origen, descubres que est¨¢ construida sobre pura porquer¨ªa¡±, se?ala. ¡°Son agentes del caos que escriben ficci¨®n y que enga?an al sistema para difundirlas¡±. Las bromas, a?ade Oliver, pierden su fuerza y sentido cuando se basan en mentiras. S¨ª reconoce, en una defensa f¨¦rrea de la labor del periodismo, que en la histeria medi¨¢tica creada por el fen¨®meno Trump, conviene dar un paso atr¨¢s antes de soltar cualquier noticia.

Los medios, insiste, deben hacer lo posible por preservar su respeto ante la avalancha de propaganda que hace circular la Casa Blanca. La labor de filtro de los medios, dice, ¡°va a ser m¨¢s importante que nunca¡±. ¡°No se les puede dejar que digan cosas que est¨¢n demostradas que son falsas¡±, afirma con rotundidad. Oliver denuncia que con esta estrategia la administraci¨®n Trump est¨¢ tratando de devaluar la funci¨®n de la prensa en una democracia.