Los libros invaden la noche de Buenos Aires
Miles de personas se acercan a la avenida Corrientes para escuchar a sus autores favoritos y buscar ofertas, en un a?o cr¨ªtico para el sector
Buenos Aires se enorgullece de ser la ciudad con m¨¢s librer¨ªas del mundo por habitante. En la arteria cultural de la capital argentina, la avenida Corrientes, se concentran cerca de una veintena en poco m¨¢s de 500 metros, donde pueden encontrarse libros nuevos y usados, saldos y rarezas. Por d¨¦cimo a?o consecutivo, la calle se cerr¨® al tr¨¢nsito para acoger la Noche de las Librer¨ªas y una multitud se acerc¨® hasta all¨ª para escuchar lecturas en vivo y debates, llevarse a casa un libro firmado y rebuscar en los puestos de ofertas. Para las librer¨ªas, la convocatoria ayud¨® a intentar cerrar los n¨²meros en un a?o cr¨ªtico por la ca¨ªda progresiva de ventas y el aumento de los costos.
La concurrencia parec¨ªa inferior que la de a?os previos, pero a¨²n as¨ª los asistentes se contaban por miles y las librer¨ªas estuvieron desbordadas hasta casi la medianoche. Mientras, en la calle se suced¨ªan numerosas actividades en simult¨¢neo. La escritora y periodista Mariana Enr¨ªquez, autora de uno de los mejores libros argentinos de 2016, Las cosas que perdimos en el fuego, dialog¨® con su colega Horacio Convertini sobre las historias de terror. Samanta Schweblin, reci¨¦n nominada al Man Booker Prize por su inquietante novela Distancia de rescate, fue rodeada de un enjambre de admiradores cuando termin¨® la mesa de debate que comparti¨® con Sergio Olgu¨ªn y Esther Cross. Escenas similares vivieron otros renombrados autores argentinos, como Claudia Pi?eiro y Eduardo Sacheri, que tambi¨¦n participaron de la velada.
Algunos escritores noveles aprovecharon la ocasi¨®n para montar peque?os puestos en la calle con sus obras autoeditadas, mientras que vendedores ambulantes de ropa, carteras y artesan¨ªas se mezclaban entre ellos. Los m¨¢s peque?os pod¨ªan participar en talleres de poes¨ªa, embarcarse en una b¨²squeda del tesoro entre los puestos de libros callejeros, participar de juegos de escritura o sentarse en plena calle para presenciar el show de m¨²sica e ilustraci¨®n en vivo de Isol y Dani Umpi. Otros buscaban entre los libros puestos a su altura en los comercios alguno nuevo que llevarse a casa, le¨ªan all¨ª mismo los que les acababan de comprar o, con cara de cansancio, preguntaban a sus padres cu¨¢ndo iban a irse de all¨ª.
"La Noche de las Librer¨ªas es una celebraci¨®n ¨²nica, un encuentro de la comunidad, que re¨²ne a vecinos, escritores y lectores de la ciudad; una noche para encontrarse con viejos y nuevos autores, con la tradici¨®n de las librer¨ªas porte?as y para redescubrir la magia de la lectura", afirm¨® a los medios el director general de Industrias Creativas, Diego Radivoy. "Con los cambios culturales que se est¨¢n dando fruto de las nuevas tecnolog¨ªas, encuentros como este tienen la m¨ªstica de cuidar la tradici¨®n, ayudan a mantener la magia y vitalidad de las librer¨ªas y el libro. De alguna manera, tiene una funci¨®n hist¨®rica", agreg¨®.
Los cambios culturales golpean a las industrias editoriales de todo el mundo y Argentina no es una excepci¨®n. La crisis econ¨®mica de 2016 tuvo un fuerte impacto en el sector, seg¨²n ldatos de la C¨¢mara Argentina del Libro citados por el diario P¨¢gina 12. El a?o pasado se produjeron cerca de 20 millones menos de ejemplares que en 2015 y las ventas de muchas editoriales cayeron m¨¢s de un 15%. "La situaci¨®n cr¨ªtica del mercado del libro y de las industrias culturales se ha ido profundizando. Estamos en una ca¨ªda permanente en la cual progresivamente decaen las ventas, al mismo tiempo que aumentan los costos", declara David De Vita, propietario de la librer¨ªa Adan BuenosAyres, que estuvo a punto de cerrar en 2016 y ahora se ha transformado en una cooperativa.
Esta librer¨ªa fue una de las participantes del "Gran Librazo Nacional" que buscaba llamar la atenci¨®n de la ciudadan¨ªa sobre la crisis del sector mediante el regalo de 30.000 libros en Buenos Aires y otras grandes ciudades del pa¨ªs, como C¨®rdoba, Rosario y Mendoza. La gran politizaci¨®n de la cultura argentina volvi¨® a quedar de manifiesto en esta acci¨®n de protesta, que criticaba al gobierno macrista por su "intencionalidad manifiesta de invisibilizar los problemas emergentes de la crisis econ¨®mica" argentina, como la ca¨ªda del consumo derivada de la inflaci¨®n, superior al 40% en 2016. Por ahora las librer¨ªas resisten en la avenida Corrientes, pero nadie sabe si la postal ser¨¢ la misma en unos a?os.
Babelia
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