Los otros tebeos que llegan al cine
Las novelas gr¨¢ficas adultas, alejadas del mundo de los superh¨¦roes, alimentan cada vez m¨¢s pel¨ªculas. 'Rosalie Blum' es el (pen)¨²ltimo ejemplo
Hay otro mundo en el c¨®mic m¨¢s all¨¢ de los superh¨¦roes. Y eso lo saben los lectores de las novelas gr¨¢ficas, acostumbrados a leer vi?etas dedicadas a biograf¨ªas, historia del d¨ªa a d¨ªa, la ciencia ficci¨®n, el drama o la vida misma de su autor. Poco a poco, el cine ha ido recolectando entre este g¨¦nero en crecimiento argumentos y personajes para pel¨ªculas completamente alejadas de seres voladores que salvan la Tierra. El ¨²ltimo ejemplo en la cartelera espa?ola es la francesa Rosalie Blum, con la que Julian Rappeneau ha adaptado los tres vol¨²menes que conforman la obra hom¨®nima de Camille Jourdy. En Francia, gracias a la fuerza editorial y cultural que all¨ª posee el mundo del c¨®mic, el cine lleva a?os realizando estas adaptaciones, e incluso una de ellas, La vida de Ad¨¦le,de Abdellatif Kechiche, gan¨® la Palma de Oro de Cannes. Y hay muchos m¨¢s ejemplos, gracias a que el material primigenio desborda inter¨¦s: en tiempos de sagas, secuelas y remakes, estas adaptaciones superan con mucho el nivel de calidad de sus correligionarias en pantalla. El mismo Rappeneau lo ve as¨ª, en una entrevista por correo electr¨®nico: "Una amiga m¨ªa me empuj¨® a leer Rosalie Blum y me pareci¨® formidable, muy original en su construcci¨®n. Vi la posibilidad de sacar de all¨ª una pel¨ªcula especial, en la que pudiese inyectar cosas personales, adoptando un tono entre misterio, emoci¨®n y humor".
Aqu¨ª prima la variedad. Un repaso a las adaptaciones de novelas gr¨¢ficas m¨¢s conocidas da como resultado un listado de filmes estupendos: Tamara Drewe, de Stephen Frears; Una historia de violencia, de David Cronenberg; Camino a Perdici¨®n, de Sam Mendes; Pollo con ciruelas, que llev¨® al cine su misma autora, Marjane Satrapi; Ghost World y El arte de estrangular, ambas de Terry Zwigoff; American Splendor, de Shari Springer Berman y Robert Pulcini; Lul¨², mujer desnuda, de?S¨®lveig Anspach; Oldboy, de Park Chan-wook, y por supuesto todo el universo del hombre que cambi¨® radicalmente la novela gr¨¢fica, Alan Moore, en Desde el infierno, V de Vendetta, La liga de los hombres extraordinarios, Batman: la broma asesina y Watchmen, el Quijote de este g¨¦nero. Otros escritores / dibujantes enganchones para el cine son el alem¨¢n Ralf K?ning, con su talento para lo c¨®mico-er¨®tico con El hombre deseado, Lis¨ªstrata o El cond¨®n asesino, o Frank Miller, maestro de la ultraviolencia, con Sin City, 300 o Elektra. Miller ha llegado a rizar el rizo, al dirigir ¨¦l mismo en el cine la adaptaci¨®n de The Spirit, obra de otro autor de culto, el pionero Will Eisner.
?Y la cosa no acaba aqu¨ª: en los pr¨®ximos meses se estrenar¨¢n m¨¢s: Valerian y la ciudad de los mil planetas (21 de julio), de Luc Besson; y Wilson (26 de mayo), de Craig Johnson, versi¨®n de la novela gr¨¢fica de Daniel Clowes, autor que ya ha sido llevado al cine con Ghost World y El arte de estrangular.
Todas estas pel¨ªculas tienen que luchar en su salto a la pantalla con que las obras que les inspiran ya han dejado muy marcado el f¨ªsico de los personajes, y algunas, como Watchmen, son famosas incluso por la arquitectura de las vi?etas en la p¨¢gina: la forma viene tan subrayada como el fondo. "Le¨ª una y otra vez el c¨®mic para poder empaparme de su esp¨ªritu; luego lo volv¨ª a cerrar para poder adaptarlo", asegura Rappeneau sobre Rosalie Blum. "Porque entonces hay que pensar en la adaptaci¨®n en t¨¦rminos cinematogr¨¢ficos. Sobre todo en cuanto a ritmo y construcci¨®n, porque una pel¨ªcula no puede ser contada como en un c¨®mic. Como con toda adaptaci¨®n, tuve que elegir ciertas opciones. Quitar cosas, conservar otras, tambi¨¦n inventar otras. Desde el punto de vista visual, no he querido reproducir las p¨¢ginas del c¨®mic de Camille Jourdy. Por ejemplo, no he rodado la pel¨ªcula en la ciudad que ella hab¨ªa dibujado, porque esta me inspiraba menos. Sin embargo, con mi equipo, intentamos plasmar en la pel¨ªcula la delicadeza que emana del grafismo de Camille. La directora de arte tambi¨¦n se divirti¨®, colocando en cada decorado un objeto tal como est¨¢ dibujado en el c¨®mic". ?Y qu¨¦ opina la adaptada? Camille Jourdy tambi¨¦n responde por correo electr¨®nico: "No ped¨ª nada en especial. El productor organiz¨® el encuentro con Julien Rappeneau y me gust¨® la manera en que me habl¨® del proyecto. Tuve la sensaci¨®n de que hab¨ªa comprendido los sentimientos y emociones que yo hab¨ªa querido plasmar en mi historia. Me parec¨ªa que est¨¢bamos en la misma onda, entonces decid¨ª confiar en ¨¦l. Creo que es dif¨ªcil colocar l¨ªmites en algo as¨ª".
En Espa?a, aunque pocos, tambi¨¦n ha habido directores interesados en convertir en pel¨ªculas con actores de carne y hueso a estupendas novelas gr¨¢ficas. ?scar Aibar llev¨® a la pantalla, Atolladero (1995), tebeo que ¨¦l mismo hab¨ªa escrito para que dibujara Miguel ?ngel Mart¨ªn. F¨¦lix Fern¨¢ndez de Castro hizo algo complicado: coger el c¨®mic autobiogr¨¢fico Mar¨ªa y yo (2010), de Miguel Gallardo, que cuenta la relaci¨®n entre su autor y su hija autista, y rodarlo como un documental, a?adiendo alguna animaci¨®n y primando la verdad de lo contado. Ad¨¢n Aliaga encar¨® en 2009 un t¨®tem del c¨®mic europeo, Estigmas, de los italianos Lorenzo Mattotti y Claudio Piersanti. "De aquella experiencia recuerdo que fue f¨¢cil conseguir los derechos, probablemente porque la novela gr¨¢fica no es tan popular como los tebeos de superh¨¦roes. Mi productor habitual, Juanjo Gim¨¦nez, y yo viajamos a Par¨ªs, nos reunimos con Mattotti y descubrimos que ¨¦l quiso hacer una pel¨ªcula con la idea original, y que al no poder levantar la producci¨®n realiz¨® el c¨®mic", recuerda Aliaga. El mismo Aliaga se acerc¨® de forma tangencial a otro hito, en este caso del c¨®mic sudamericano, El eternauta, del guionista H¨¦ctor Germ¨¢n Oesterheld y el dibujante Francisco Solano L¨®pez, con el documental La mujer del eternauta (2011), sobre la vida de Elsa Oesterheld, tras la desaparici¨®n de su marido durante la dictadura argentina. "Es un retrato sobre la ausencia, pero es cierto que una de las premisas fue poder mostrar algo del tebeo, aunque sea en apuntes est¨¦ticos".
Los adaptadores al cine suelen ser lectores prol¨ªficos de c¨®mics. Rappeneau desgrana: "Siempre me ha gustado el c¨®mic. De ni?o, era fan de Tint¨ªn y de los c¨®mics de Goscinny. M¨¢s tarde, descubr¨ª que hab¨ªa una muy amplia variedad de c¨®mics. Me han marcado las obras de Alan Moore y los japoneses Urasawa y Taniguchi. Hoy, cuando leo c¨®mics, son sobre todo novelas gr¨¢ficas". A Jourdy le marcaron dos tebeos con protagonista femenina que han tenido correspondencia cinematogr¨¢fica: "A la cabeza me vienen Tamara Drewe y Lul¨², mujer desnuda". Y Aliaga incluso sonde¨® la posibilidad de adaptar dos des sus novelas gr¨¢ficas favoritas: "Dogs & Water, de Ander Nilsen, y Essex Country Trilogy, de Jeff Lemire, aunque ambas ya ten¨ªan los derechos vendidos para Estados Unidos". A¨²n quedan muchos universos por descubrir en esas p¨¢ginas. Aliaga remacha: "Son obras libres, originales, especiales, de autor, que conectan con cineastas de parecidos gustos y, por supuesto, un p¨²blico que quiere otras cosas".
Babelia
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