Fundaci¨®n Norman Foster: la ciudad como problema y soluci¨®n
El arquitecto inaugura su centro en Madrid con un foro sobre los retos urbanos: de la desigualdad a la falta de inversi¨®n en infraestructuras o el final del trabajo
Los c¨¢lculos auguran que entre 2014 y 2020 el n¨²mero de residentes urbanos crecer¨¢ en China en 155 millones. Es como si surgiera, una vez al mes durante seis a?os, una metr¨®poli con una poblaci¨®n equivalente a la de Madrid. En vista de datos como este no cabe cuestionar, para Norman Foster, que el de las ciudades es uno de los grandes temas de nuestro tiempo. El arquitecto m¨¢s global ha dedicado este jueves un foro internacional a la b¨²squeda de soluciones para esos problemas. Un evento celebrado en el Teatro Real que marca la puesta en marcha de su fundaci¨®n, instalada en un palacete del centro burgu¨¦s de Madrid.
El encuentro comenz¨® a una hora inusualmente temprana; las colas de estudiantes convocados a los debates bajo el t¨ªtulo Future is Now (el futuro ya est¨¢ aqu¨ª) serpenteaban por la plaza de Oriente ya a las 7.45 como a las puertas del concierto de una estrella del pop. Unas 1.700 personas, con nutrida representaci¨®n extranjera y muchos conocidos miembros de la vida social y cultural, escuchaban una hora m¨¢s tarde a la alcaldesa Manuela Carmena en su discurso inaugural tratar a Foster, que ayer cumpli¨® 82 a?os, como a ¡°un ciudadano madrile?o¡±. ¡°Me gusta tu fundaci¨®n, pero sobre todo me f¨ªo de ti¡±, a?adi¨® en ingl¨¦s, ¨²nico idioma empleado sobre el escenario para una audiencia que atendi¨® al evento sin traducci¨®n. A los pol¨ªticos, urbanistas, arquitectos, artistas, economistas e historiadores participantes pidi¨® despu¨¦s la regidora ¡°soluciones para el acuciante problema de la desigualdad en las ciudades¡±.
Las cinco horas de discusiones, entrevistas y discursos que siguieron no lograron, obviamente, dar con la panacea a tan grave problema. Pero al menos sirvieron para tratar desde amplias perspectivas los retos del futuro urbano. El arquitecto chileno Alejandro Aravena, premio Pritzker 2016, destacaba la diversidad de procedencias profesionales de los participantes. Ese acercamiento ¡°hol¨ªstico¡±, que busca el todo a trav¨¦s de la suma de las partes, es una de las aspiraciones de Norman Foster para su fundaci¨®n, como dej¨® claro en el primer debate de la ma?ana, en el que coincidi¨® con Michael Bloomberg, empresario y exalcalde de Nueva York, en que el gran reto de la educaci¨®n es lograr una ense?anza ¡°no compartimentada en guetos profesionales¡± en la que el arte se d¨¦ la mano con la ciencia.
En esa aspiraci¨®n estuvieron de acuerdo los ponentes. Tambi¨¦n en que las ciudades, cuanto m¨¢s densas y compactas, mejor. ¡°El hormig¨®n es m¨¢s verde que la hierba¡±, sentenci¨® el profesor Luis Fern¨¢ndez-Galiano, uno de los dos espa?oles, junto a la dise?adora Patricia Urquiola, invitados a hablar. Foster ense?¨® un gr¨¢fico para demostrarlo: las emisiones contaminantes de una ciudad como Houston, con su desarrollo urbano horizontal y su dependencia del coche, son mucho mayores que las provocadas por el urbanismo europeo de Madrid, que, a su vez, resulta menos sostenible que Nueva York. Su expansi¨®n fue cortada por el agua que rodea a Manhattan, lo cual alent¨® la concentraci¨®n de la poblaci¨®n.
El espacio entre los edificios y el uso que las infraestructuras y la planificaci¨®n urbana permiten hacer de ¨¦l fueron dos de los temas fuerza del foro, en el que EL PA?S ha participado como medio asociado. ¡°El problema es que el desarrollo no se ha producido en el ¨²ltimo medio siglo espoleado por un af¨¢n de inversi¨®n en infraestructuras sino por el aumento del consumo gracias a la galopante deuda privada, que provoc¨® la ¨²ltima crisis global¡±, advirti¨® la economista Mariana Mazzucatto.
El encuentro sirvi¨® tambi¨¦n para comprobar que las ciudades son un laboratorio en el que caben muchos de los problemas que enfrenta la Humanidad: el calentamiento global, el ocaso del coche privado, la uberizaci¨®n de la econom¨ªa y sus efectos en los gremios tradicionales, la irrupci¨®n de la inteligencia artificial o el fin del trabajo humano tal como lo hab¨ªamos conocido.
¡®Tecnoesc¨¦pticos¡¯
De fondo, arreci¨® el debate sobre si la tecnolog¨ªa contribuir¨¢ a resolver todos estos problemas o har¨¢ m¨¢s bien por empeorarlos. La chispa entre tecnoesc¨¦pticos y tecnooptimistas salt¨® despu¨¦s de que Jonathan Ive, todopoderoso jefe de dise?o de Apple, dijese que lo que le motiva a levantarse cada ma?ana es la idea de ¡°hacer herramientas para la gente¡±. ¡°Tras la est¨²pida propaganda de Silicon Valley se esconde una verdad: ellos no hacen herramientas para la gente, buscan gente para consumir sus herramientas¡±, exclam¨® el historiador Niall Ferguson, que se atribuy¨® el papel de ¡°villano¡± y arranc¨® los mayores aplausos. ¡°Nos dicen que la resistencia al progreso es in¨²til y que todo ser¨¢ maravilloso, pero el futuro tecnol¨®gico no ser¨¢ tan reluciente como lo pintan¡±. A ese pensamiento se opuso Nicholas Negroponte, del MIT Media Lab, quien defendi¨® la bondad intr¨ªnseca de los coches sin conductor y se dijo incapaz de ver nada malo ¡°en un futuro en el que podremos aprender franc¨¦s tomando una pastilla¡±.
Una conversaci¨®n entre dos artistas, Cornelia Parker y Olafur Eliasson, ha cerrado el foro antes de las palabras de clausura de lord Foster, que fue despedido con un prolongado aplauso. Mientras, a su lado, su esposa Elena Ochoa se congratulaba por la ¡°intensidad¡± de la ma?ana y por la respuesta del p¨²blico. ¡°En especial¡±, dijo, ¡°la de los estudiantes de 32 universidades¡±, que madrugaron para escuchar reflexiones sobre un futuro que es, sobre todo, suyo.
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