La pel¨ªcula que retrata a la Generaci¨®n Cangrejo
Finaliza el rodaje de ¡®La Quinta Internacional¡¯, documental sobre la crisis en la juventud espa?ola
El portazo en los morros que ha arreado la crisis a los j¨®venes europeos ha sido proverbial. En Espa?a, a¨²n m¨¢s contundente, con un 49% de paro entre los menores de 25 a?os. De ah¨ª que a los millennials, sobre todo, los nacidos en los ochenta, se les conozca tambi¨¦n como generaci¨®n perdida, por no hablar de t¨¦rminos m¨¢s crudos, como generaci¨®n cangrejo.
La gravedad del balance muestra un fracaso colectivo sin paliativos. Y explicarlo por todos los medios, obligatorio. Joaqu¨ªn Estefan¨ªa, director del EL PA?S entre 1988 y 1993, ya lo ha hecho en su libro Abuelo, ?c¨®mo hab¨¦is permitido esto? (Planeta). Pero tambi¨¦n ahonda en el asunto ahora con La Quinta Internacional, una pel¨ªcula documental de la que ha hecho el guion y que ha rodado Gerardo Herrero.
Ahora queda una larga tarea de montaje para el estreno, previsto a principios del 2018. Como planteamiento de inicio, quisieron rodar el Inside job espa?ol. El documental que gan¨® un Oscar en 2011 retrataba las causas del desbarajuste que origin¨® la crisis global de 2008 en Estados Unidos. La Quinta Internacional aborda sus estragos y el riesgo de pobreza que aquel atraco financiero extendi¨® por todo el mundo. ¡°Esa pretensi¨®n dur¨® poco tiempo¡±, comenta Estefan¨ªa. ¡°A diferencia del documental americano, en Espa?a los grandes protagonistas de la econom¨ªa (banqueros, grandes empresarios, economistas acad¨¦micos y del sistema...), no quieren aparecer exponi¨¦ndose p¨²blicamente, con el riesgo adem¨¢s de ser repreguntados¡±.
En Espa?a los grandes protagonistas de la econom¨ªa (banqueros, grandes empresarios...), no quieren aparecer exponi¨¦ndose con el riesgo de ser repreguntados¡±, asegura Estefan¨ªa Joaqu¨ªn Estefan¨ªa
Sobre todo, cuando, como ocurre ahora, en muchos momentos son los principales sujetos de la indignaci¨®n popular, cree el periodista. ¡°Prefieren mantenerse invisibles. Pronto fuimos derivando nuestro inter¨¦s hacia las consecuencias de la gran recesi¨®n y llegamos a la conclusi¨®n de que nuestros principales protagonistas deb¨ªan ser los j¨®venes¡±, asegura.
El productor, Jos¨¦ Antonio Romero, convenci¨® a ambos, adem¨¢s, de que proced¨ªa hablar de las consecuencias de la crisis en ese ¨¢mbito de la poblaci¨®n. All¨¢ donde el espejo resulta a¨²n m¨¢s frustrante. El no futuro de unos j¨®venes a quienes cuesta abandonar el hogar paterno, ya que solo dos de cada 10 menores de 30 a?os viven en su propia casa. ¡°Lo otro corr¨ªa el riesgo de resultar muy trillado¡±, a?ade Herrero.
Uno de los puntos de partida del libro que ha escrito Estefan¨ªa es un art¨ªculo aparecido en The Independent en octubre de 2016. All¨ª se afirmaba que los nacidos en los ochenta pertenecen a una d¨¦cada que al cumplir la treintena sobreviven peor que sus predecesores. Es la primera generaci¨®n desde la posguerra en que ocurre esto, contaba el diario brit¨¢nico. ¡°Ya es un hecho. Para cambiar esta situaci¨®n, los representantes p¨²blicos, los pol¨ªticos, deben dejar de atender exclusivamente los intereses de sus mayores votantes potenciales (los de m¨¢s avanzada edad) y dar prioridad a los problemas de los j¨®venes: el paro, la precarizaci¨®n estructural, su protecci¨®n social... Para obligarles a ello, la juventud debe votar y participar m¨¢s. Y es lo que han hecho en los ¨²ltimos cinco a?os¡±, a?ade Estefan¨ªa.
Cabe alg¨²n motivo de esperanza para Gerardo Herrero. ¡°Perdida no est¨¢, se trata de una generaci¨®n muy preparada, llena de gente brillante. La mala gesti¨®n de los recursos econ¨®micos ha llevado a una peor calidad de vida, a una mayor dependencia de las familias, a un menor nivel de calidad en los servicios sociales, a una bajada de nivel en calidad cultural. Poseen m¨¢s conciencia ecol¨®gica y de defensa del medio ambiente. Para muchos de ellos resulta muy decepcionante no poder alcanzar m¨¢s nivel de calidad econ¨®mica¡±, agrega.
La Quinta Internacional es la primera experiencia en cine de Estefan¨ªa. ¡°No corren buenos tiempos para el periodismo tradicional. Estoy buscando otras formas de expresi¨®n complementaria: los libros son una de ellas, los guiones otra. Trato de aprender de la experiencia de Gerardo Herrero y de Jos¨¦ Antonio Romero. La idea original es m¨ªa, pero no tengo oficio para escribir un buen guion. Para m¨ª representa la suerte de aprender otro lenguaje, sobre todo por si me surge una segunda oportunidad¡±. Los viejos rockeros del oficio, ah¨ª siguen¡
Babelia
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