M¨¢s Operaci¨®n que Triunfo

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¡®Operaci¨®n triunfo¡¯ regresa liderando con casi 2,7 millones de espectadores

Por qu¨¦ el pop espa?ol se equivoc¨® al boicotear ¡®Operaci¨®n Triunfo¡¯

Operaci¨®n Triunfo vuelve a TVE con un ba?o fr¨ªo de nostalgia y un Risto de mentira

Operaci¨®n triunfo ha vuelto. "El mayor espect¨¢culo de la televisi¨®n", seg¨²n su presentador, Roberto Leal. Una nueva hornada de triunfitos ya est¨¢ en proceso. 16 a?os y un d¨ªa despu¨¦s de que conoci¨¦ramos a Rosa, Bisbal, Bustamante, Chenoa y Juan Camus volvemos a escuchar eso de "cruza la pasarela". Tenemos nueva Gisela con canci¨®n Disney, tenemos nuevo presentador, nueva directora de la Academia, incluso nuevo Risto Mejide (o intento de Risto) en el jurado. Una noche de emociones en?Operaci¨®n triunfo que termin¨® tarde, y eso que La 1 hab¨ªa protegido el estreno de su gran esperanza para el oto?o quitando Hora punta. Pero ni por esas.

Lo primero que se pudo constatar es la juventud del casting. Varios concursantes con solo 18 a?os (?ten¨ªan apenas tres a?os cuando Espa?a vibr¨® con el Europe's living a celebration!) y el mayor de todos, de 31. Un grupo muy joven y, en su mayor¨ªa, muy inexperto. Y con muchos nervios sobre el escenario, y desafines abundantes, canciones fuera de tono... Digamos que muchos gatitos murieron durante el transcurso de esta gala. Terrible para los o¨ªdos. Pero ojo, se supone que la gracia en este programa es que los chicos pasan por una academia para aprender a cantar. Lo suyo es que empiecen desde abajo. Habr¨¢ que ver la evoluci¨®n que puedan tener. Y este a?o, la operaci¨®n del t¨ªtulo es m¨¢s necesaria que nunca.

Otra constataci¨®n en esta primera noche de programa fue que las decisiones del jurado ya estaban tomadas de antemano. Se hab¨ªa venido con los deberes hechos claramente. ?Que alguien desafina sin parar? No pasa nada, hab¨ªamos visto ensayos y pruebas previas y esto no es nada, entra en la academia. ?Que te atreves a cantar por Bowie y tienes una de las voces m¨¢s personales del programa? Te dejamos a la espera. Pues vale. Una gala que era una pantomima y que termin¨® de la forma m¨¢s anticlim¨¢tica posible, anunciando el ¨²ltimo clasificado despu¨¦s de tener al p¨²blico viendo durante 10 minutos c¨®mo los triunfitos llegaban a su nuevo hogar y eran recibidos por Noem¨ª Galera, la directora de la academia.

Por no hablar de los problemas de sonido que afectaron incluso a los aspirantes. Cosas del directo posiblemente, pero se esperaba algo mejor t¨¦cnicamente. Result¨® todo demasiado "gala 0", y ni las presentaciones de los concursantes ni la larga duraci¨®n del programa (tres horas y media) ni la falta de soltura de Roberto Leal (habr¨¢ que darle tiempo) ayudaron a solventarlo.

La fiesta estaba en otro lado: en Twitter y redes similares. Como ocurre con Eurovisi¨®n cada a?o, lo mejor de la noche estaba en mensajes de 140 caracteres comentando lo que ocurr¨ªa en una peque?a pantalla en la que se escucharon frases como "soy un diamante en bruto" o "tengo mucho carisma, igual no soy la mejor voz pero, jolines, hay que tener de todo". La repercusi¨®n social, m¨¢s all¨¢ de audiencias y cuotas de pantalla, ha sido bestial. De nuevo, habr¨¢ que ver si aguanta el tir¨®n las pr¨®ximas semanas.

Solo ha sido la primera gala. Operaci¨®n triunfo es muy largo ¡ª?es esto una amenaza?, pensar¨¢n muchos¡ª. Y, de momento, hay m¨¢s operaci¨®n que triunfo. Veremos c¨®mo termina el asunto.