El presidente, los intelectuales y ¡®la mu?eca tetona¡¯
El periodista mexicano Diego Osorno presenta un nuevo documental sobre las relaciones entre cultura y poder en su pa¨ªs a partir de una foto kitsch de 1987
A Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez le llam¨® una noche para pedirle que hablara con su amigo Fidel Castro de un asunto que le preocupaba a Bill Clinton. De H¨¦ctor Aguilar Cam¨ªn a¨²n recuerda de memoria su n¨²mero de tel¨¦fono, y Elena Poniatowska cuenta que le llamaba a menudo, directamente, pero ella al escuchar su nombre al otro lado de la l¨ªnea dec¨ªa, ¡°s¨ª, y yo soy la Virgen de Guadalupe¡±. Y colgaba.?
Carlos Salinas de Gortari, presidente de M¨¦xico de 1988 a 1994, y un grupo de intelectuales son los protagonistas del nuevo corto documental del periodista Diego Enrique Osorno y Alexandro Aldrete. En apenas 30 minutos, y con un torbellino de an¨¦cdotas, testimonios y datos, La mu?eca tetona, indaga en las relaciones entre el poder pol¨ªtico y el mundo de la cultura en su pa¨ªs.?
Todo empieza con una foto en el sal¨®n de una casa de la capital en 1987. Nueve periodistas, promotores culturales y escritores: Elena Poniatowska, Margo Su, Iv¨¢n Restrepo, Carlos Monsiv¨¢is, Benjam¨ªn Wong, H¨¦ctor Aguilar Cam¨ªn, Miguel ?ngel Granados Chapa, Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez y Le¨®n Garc¨ªa Soler. Todos alrededor de un sill¨®n, arropando a Carlos Salinas, por entonces secretario de Presupuestos, y que un mes m¨¢s tarde se destapar¨ªa como candidato. En una esquina del sof¨¢, una extravagante figura de lana con unos pechos desproporcionados con el resto del cuerpo.?
La mu?eca estaba all¨ª, pero en el documental funciona como un Mcguffin, un truco para disparar la trama, y a la vez, como un elemento de extra?eza, un s¨ªmbolo de esa misma relaci¨®n extra?a entre cultura y poder pol¨ªtico. Como tambi¨¦n es un s¨ªmbolo Carlos Salinas, ¡°el presidente m¨¢s habilidoso y controvertido del M¨¦xico moderno¡±, seg¨²n Osorno, que present¨® la cinta esta semana en unos cines de la capital.?
El camino presidencial de Salinas arranc¨® con la sombra de un pucherazo y termin¨® marcado por el asesinato de su delf¨ªn pol¨ªtico. En medio, dio entrada a toda una nueva generaci¨®n de tecn¨®cratas formados, como ¨¦l mismo, en universidades estadounidenses. Fue el padrino de la gran privatizaci¨®n del Estado pri¨ªsta ¨Cbancos, minas, puertos, telefon¨ªa¨C y del tratado de libre comercio con EE UU y Canad¨¢. El hombre ¡°de la Perestroika mexicana¡±, como le llam¨® Gorbachov en un visita a Mosc¨², acabar¨ªa arrollado por una fuerte crisis pol¨ªtica y econ¨®mica, con su hermano encarcelado por corrupci¨®n y saliendo del pa¨ªs por la puerta de atr¨¢s para no volver durante a?os.?
La foto es el recuerdo de las reuniones que cada 15 d¨ªas aquel grupo de intelectuales manten¨ªan con un secretario de Estado, y una vez al a?o con el presidente. ¡°Eran reuniones no palaciegas, sino cr¨ªticas, pero a la vez muy cordiales y con respeto hacia el invitado¡±, explica Restrepo ante la c¨¢mara. Osorno reclut¨® para la pieza a ¡°todos los que a¨²n est¨¢n vivos ¨Cincluido Salinas¨C, salvo Garc¨ªa Soler y Aguilar Cam¨ªn, quien coment¨® que no se acordaba. En el caso de los que ya hab¨ªan fallecido, decid¨ª buscar a figuras del mundo intelectual de hoy que pudieran ser consideradas como expertos o incluso herederos, en cierta forma, de los protagonistas fallecidos de la foto¡±.?
Para Jaime Abello, presidente de la Fundaci¨®n Nuevo Periodismo Iberoamericano, fundada por Garc¨ªa M¨¢rquez, la propuesta del documental ¡°es interesante, porque visto en perspectiva, ning¨²n otro pa¨ªs cuenta con una institucionalidad cultural como M¨¦xico, un programa tan grande de becas, premios, apoyos a creadores¡±. El escritor Fabrizio Mej¨ªa, ¡°representante¡± de Carlos Monsiv¨¢is, quiz¨¢ el invitado a aquellas reuniones con una voz m¨¢s cr¨ªtica, sit¨²a esas relaciones en la l¨®gica del clientelismo: ¡°Era un sistema muy eficaz basado en construir clientelas, igual sirve un saco de cemento, que las ayudas en el medio cultural¡±.?
El documental tambi¨¦n lanza preguntas sobre el momento actual. Seg¨²n el director de la cinta, ¡°en esa ¨¦poca, el PRI buscaba legitimar su r¨¦gimen autoritario acer¨¢ndose a los intelectuales. Ahora Pe?a Nieto es un presidente que no sabe ni citar tres libros que haya le¨ªdo. El gobernador de Nuevo Le¨®n, se hace llamar El Bronco: desde el apodo est¨¢ apuntando a una postura anti intelectual. Creo que ahora estamos en un momento pol¨ªtico anti intelectual, pragm¨¢tico y b¨¢rbaro¡±.
Babelia
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