Otra idea del tr¨¢nsito
Mil¨¢n recupera las habitaciones, laberintos y corredores de Lucio Fontana
Pocos artistas esconden en su biograf¨ªa un dato que justifique su rareza dentro de la historia de la pl¨¢stica de los ¨²ltimos 100 a?os. Richard Serra trabajaba en una acerer¨ªa antes de ser escultor y Louise Bourgeois en el negocio de restauraci¨®n de tapices de sus padres, especializ¨¢ndose en el dibujo de pies (¡°dibujar es como a?adir un nuevo hilo en la tela de ara?a¡±, dec¨ªa). Pintor y ceramista, el joven Lucio Fontana (Rosario, Argentina, 1899-Varese, Italia, 1968) ayudaba a su padre, un comercial italiano especializado en estatuaria funeraria, en la decoraci¨®n de mausoleos y cenotafios. All¨ª, a pie de tumba, Fontana debi¨® de fantasear sobre los espacios del m¨¢s all¨¢ y c¨®mo dar forma a una idea del tr¨¢nsito que situara la luz ¡ª una llama cegadora, una energ¨ªa que escapa¡ª en los intersticios de t¨²neles y cuevas artificiales. Lo prob¨® primero agujereando y rasgando la pintura, y con la misma actitud abord¨® sus esculturas primitivistas hechas de terracota esmaltada y bronce. Sus tajos (tagli) y perforaciones (buchi) practicadas en la superficie de la tela monocroma buscaban subrayar simult¨¢neamente el aspecto procesual de la obra de arte.
Artista expuesto a la personificaci¨®n del kitsch en sus diferentes etapas ¡ªel acad¨¦mico, el del art d¨¦co y el del revisionismo moderno del Novecento, del agrado de Mussolini¡ª, Fontana fue un antimoderno, un preling¨¹ista como Pasolini: siempre quiso reubicar la obra de arte en nuevos espacios donde poder apelar al p¨²blico. Se le considera el primer povera, con Alberto Burri y Piero Manzoni, y el precursor de los nouveaux r¨¦alistes. En sus inicios como artista, traslad¨® la dimensi¨®n teatral de la escultura a encargos para decorados en tiendas, iglesias y accesorios para sesiones fotogr¨¢ficas, una actitud que le alejar¨ªa definitivamente del arte pobre justo cuando el movimiento art¨ªstico, acu?ado un a?o antes por el cr¨ªtico Germano Celant, estaba en su apogeo.
Fontana muri¨® en 1968 como inventor del espacialismo, un arte intuitivo, antimat¨¦rico y liberado de conceptos. Hab¨ªa pasado una d¨¦cada desde su primera retrospectiva, que le encumbr¨® en su pa¨ªs de acogida ¡ªItalia¡ª y en Francia, donde expuso sus cer¨¢micas degradadas y lienzos acuchillados que ensombrecieron otras obras de mayor magnitud espacial, como sus poco conocidos y subestimados ambienti . De ah¨ª la importancia de la muestra en Hangar Bicocca. El centro art¨ªstico que la firma Pirelli posee en Mil¨¢n recupera una docena de environments creados en los a?os cincuenta y sesenta, algunos reeditados por primera vez a partir de instrucciones formales (estructuras, medidas, colores) que dej¨® el artista. Fontana consideraba sus ambienti como un todo. En ellos, pintura, escultura y arquitectura cobran una nueva (cuarta) dimensi¨®n en forma de corredores, laberintos y habitaciones que el p¨²blico debe contemplar y atravesar. Su primer environment, de 1948, Luz negra, es la base del movimiento spaziale, a partir del cual el espacio ser¨¢ ¡°la suma de tiempo, direcci¨®n, sonido y luz¡±.
La primera pieza del recorrido, estrenada en la IX Trienal de Milano de 1951, es un enorme arabesco de 100 metros de ne¨®n que cuelga del techo. Con ¨¦l, Fontana anuncia la vocaci¨®n del arte como ¡°una cuarta dimensi¨®n de la arquitectura¡±. En otra sala totalmente a oscuras, un conjunto de formas biom¨®rficas decoradas con colores fluorescentes parecen flotar sobre el p¨²blico inmersas en una luz ultravioleta. Hay una decena m¨¢s de cubos negros, instalados independientes unos de otros, donde el artista busca desestabilizar la percepci¨®n creando trayectorias en diagonal, curvas y figuras elongadas con manchas de colores ¨¢cidos (rosa caramelo, verde manzana) sobre pavimentos inestables y blandos que provocan una extra?a sensaci¨®n de viaje al m¨¢s all¨¢.
En una ¨²ltima caja, Fontana ¡°abre¡± las paredes pintadas de blanco vibrante estructuradas como un laberinto ¡ªuna catacumba¡ª a la manera que lo hac¨ªa en el lienzo (ambiente para la Documenta 4). Fue su epitafio, limpio, sin m¨¢s decoraci¨®n que su propia firma: un corte negro en el muro.
Ambienti/Environments. Lucio Fontana. Pirelli Hangar Bicocca. Mil¨¢n. Hasta el 25 de febrero de 2018.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.