Un incendio arrasa en Per¨² un complejo arqueol¨®gico de 4.000 a?os

"El mural era extraordinario: una escena de un venado en una red, el testimonio m¨¢s antiguo de pintura de ese tipo en Latinoam¨¦rica", coment¨® el arque¨®logo Walter Alva a EL PA?S, horas despu¨¦s de que la Huaca Ventarr¨®n, un sitio arqueol¨®gico de 4.300 a?os de antig¨¹edad fuera arrasado la tarde del domingo por un incendio iniciado en la empresa azucarera Pomalca, en la regi¨®n Lambayeque, al norte del pa¨ªs.

Los sitios sagrados prehisp¨¢nicos, o huacas, son construcciones piramidales de adobe muy visitadas por los turistas nacionales y extranjeros, por ello despu¨¦s de las fuertes lluvias que afectaron cuatro regiones del norte entre enero y marzo, las autoridades de Cultura compraron nuevos techos para protegerlas.

Alva, director del museo Tumbas Reales de Sip¨¢n, el m¨¢s visitado de Per¨² y ubicado en la misma regi¨®n, explic¨® que los techos comprados "son de un material inadecuado pues son inflamables, en el incendio se prendieron como cera". ?Todos los centros arqueol¨®gicos del norte est¨¢n usando ese material? "Usted lo ha dicho", respondi¨® el experto.

El arque¨®logo indic¨® que, adem¨¢s del mural ¨Cde 12 metros cuadrados y 4.000 a?os¨C tambi¨¦n ha resultado afectado un relieve de 4.300 a?os de antig¨¹edad. "Ese tiempo es el periodo arcaico, de pueblos sin cer¨¢mica, cuando surgen los primeros templos, y las representaciones son de animales. Hab¨ªa un culto al fuego", agreg¨® el arque¨®logo.

"El da?o es producto del abandono en que estaba el sitio. No se han destinado recursos, no ha tenido ninguna persona responsable del lugar hace dos a?os", a?adi¨® Alva. La unidad Ejecutora Naylamp, una dependencia del Gobierno Regional de Lambayeque, es responsable de Huaca Ventarr¨®n.

Su hijo, Ignacio Alva, estuvo a cargo de las excavaciones y puesta en valor de Huaca Ventarr¨®n, que abri¨® al p¨²blico en 2014, pero fue apartado del cargo hace un a?o con el argumento de que no hab¨ªa recursos, coment¨® Walter Alva a este diario.

Alva denunci¨® formalmente que el sitio arqueol¨®gico qued¨® en abandono tras la salida de su hijo, pero no recibi¨® respuesta.

Ignacio Alva asegur¨® que hubo un gran descuido de la empresa azucarera Pomalca, pues "sus trabajadores prendieron fuego en direcci¨®n a favor del viento, en sus campos colindantes con la Huaca Ventarr¨®n".

Pero tambi¨¦n destac¨® la responsabilidad del sector Cultura, al haber comprado un techo de una resina sumamente inflamable, cuando el proveedor hab¨ªa especificado lo contrario. Son adem¨¢s techos muy pesados, que estaban da?ando los soportes y la estructura; el complejo est¨¢ cubierto por holl¨ªn y la resina pl¨¢stica derretida", a?adi¨® el exdirector de Huaca Ventarr¨®n.

"Se ha perdido el origen de la civilizaci¨®n del norte de Per¨², la joya y la cuna de nuestra identidad, debido al material (del techo) mal empleado y a que el sitio solo estaba a cargo de un vigilante y un boletero con sueldo m¨ªnimo", declar¨® Alva.

La ma?ana del lunes, el ministro de Cultura, Salvador del Solar, lleg¨® al complejo incendiado, junto con especialistas en conservaci¨®n. Un comunicado de dicha entidad inform¨® el domingo de que un fiscal acudi¨® al sitio donde ocurri¨® la tragedia.

"La primera impresi¨®n es que hay un alto grado de recuperabilidad de los murales, la estructura s¨ª necesita una revisi¨®n, hay limpieza que hacer, pero se ve estable, vamos a cubrirlo nuevamente para protegerlo del sol y de la lluvia", anunci¨® Del Solar.

El director del museo Tumbas Reales dijo que las empresas azucareras tienen la mala pr¨¢ctica de limpiar sus campos con fuego. "Cortan los tallos de las plantas de ca?a de az¨²car, que es lo que usan, y el resto, las hojas, les prenden fuego", explic¨®.

El arque¨®logo Elmo Le¨®n explic¨® a este diario que el mural ilustra una cacer¨ªa en red "pero adem¨¢s muestra el entorno de los bosques en aquella regi¨®n, que eran m¨¢s verdes de lo que son hoy, consecuencia de la desertificaci¨®n antropog¨¦nica que hoy se traduce en el calentamiento global".