Los cantos de los Llanos de Colombia y Venezuela, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco
Esta tradici¨®n musical est¨¢ en "peligro por los avances de la industrializaci¨®n" en un territorio de 50.000 kil¨®metros cuadrados
Los cantos de trabajo que se escuchan en Los Llanos orientales de Colombia y en Venezuela han sido reconocidos como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Los ganaderos de estas regiones unen con su m¨²sica a capela lo que separan las fronteras pol¨ªticas. El arpa, la bandola llanera y las maracas, entre otros muchos instrumentos, marcan el ritmo de una tradici¨®n sobre la que, el organismo de la ONU, alerta "se ciernen numerosas amenazas debido a la honda transformaci¨®n socioecon¨®mica y demogr¨¢fica de la sociedad llanera".
? ?Alegr¨ªa!: Cantos de trabajo de Los
— UNESCO en espa?ol (@UNESCO_es) December 6, 2017
Llanos de #Colombia y #Venezuela, inscritos en Lista de salvaguardia
urgente del #patrimonioinmaterial #12COM
?? https://t.co/FCCEs4u1Hf pic.twitter.com/CXs8UzuBwk
Para evitar el declive de este canto y salvaguardar una manifestaci¨®n cultura que se remonta al siglo XVI, la Unesco le propone a los llaneros y a las autoridades colombianas y venezolanas crear encuentros entre maestros y j¨®venes para seguir transmitiendo, en palabras del Cholo Valderrama, uno de los grandes exponentes colombianos, "las ense?anzas que me dieron mis padres".
Al contrario de las advertencias que la Unesco hizo en 2015 sobre los peligros que acechaban al vallenato caribe?o, los cantos llaneros no adolecen de las mismas enfermedades que provoca la fusi¨®n con el pop y el reguet¨®n. El griter¨ªo de los ganaderos se est¨¢ perdiendo en regiones que, en el caso de Colombia, intentan salir del aislamiento por a?os de guerra y de olvido del Estado. "Estos cantos constituyen testimonio del devenir hist¨®rico de las comunidades y territorios en los que se inserta, resistiendo la p¨¦rdida de conocimientos y memorias colectivas que implicar¨ªan el desarrollismo o la mecanizaci¨®n", ha explicado Mar¨ªa Ismenia Toledo, antrop¨®loga experta en patrimonio cultural inmaterial, a la agencia AFP.
Para tratar de ganarle la batalla a la m¨¢quina, este fin de semana se celebra en Villavicencio, capital del Meta, y entrada a los llanos colombianos el VI Festival Llanero. Una fiesta popular que intenta revitalizarse con cocineros de prestigio como la chef Leonor Espinosa, una de las mejores de Am¨¦rica Latina, una programaci¨®n musical que mezcla cantantes del g¨¦nero con proyecci¨®n internacional y los que a¨²n siguen contando las historias del ganado en sus peque?os pueblos.
El festival de Villavicencio incluye tambi¨¦n el orde?o de la vaca ma?osa, la monta del potro cerrero, atrapada de gallinas y enlazada de becerro. Las pr¨¢cticas del campo que se acompa?an con esta m¨²sica tradicional.
"Los cantos tienen notas largas y versos espaciados tanto en el arreo como en el orde?o", ha relatado Bettsimar D¨ªaz, hija del ic¨®nico m¨²sico del folclore venezolano Sim¨®n D¨ªaz (1928-2014), autor de la canci¨®n Caballo Viejo a AFP. "En el orde?o, los versos tienen un tono apegado a lo emocional que le sirven al orde?ador para desahogar sus penas y conseguir el apoyo de la vaca que se relaja. En el arreo, en cambio, el canto se llena de llamadas de atenci¨®n a los animales para que no se pierdan y puedan seguir en grupo".
"El llano me genera paz y tranquilidad, me desconecta del mundo exterior", dec¨ªa Valderrama en una entrevista con Caracol Radio, resumiendo en una frase las caracter¨ªsticas de esta tierra que entre ambos pa¨ªses ocupa m¨¢s de 50.000 kil¨®metros cuadrados. Y que se baila en pareja zapateando y escobillando el griter¨ªo de los vaqueros que aun perviven entre Colombia y Venezuela.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.