?Qu¨¦ puedes hacer?
Si alguien puede permitirse el lujo de atreverse a hacer algo son ¡®Los Simpson¡¯
¡°Algo que comenz¨® hace d¨¦cadas y fue aplaudido y era inofensivo, ahora es pol¨ªticamente incorrecto. ?Qu¨¦ puedes hacer?¡±, dice Lisa en el pen¨²ltimo episodio de Los Simpson emitido en EE UU, el decimoquinto de la temporada 29. Es una referencia nada velada al documental The Problem With Apu, en el que el c¨®mico estadounidense Hari Kondabolu, fan de la serie, habla de c¨®mo este personaje es poco m¨¢s que un estereotipo racista.
Uno de los motivos por los que Los Simpson han podido mantenerse en antena durante casi tres d¨¦cadas es que, al tratarse de dibujos animados, los personajes no crecen y no tienen por qu¨¦ cambiar. Por ejemplo, Homer siempre tiene la misma edad y por eso ha protagonizado episodios de juventud en los a?os 70, en los 80 e incluso en los 90, con banda de grunge incluida. Y a nadie le preocupa el canon.
Pero esto tambi¨¦n puede ser un inconveniente. Por ejemplo y como admite Lisa, Apu es pr¨¢cticamente el mismo que en los primeros episodios, a pesar de que la sociedad s¨ª ha cambiado. Es cierto que este personaje no es una excepci¨®n en una serie que se r¨ªe de todo, pero, como apunta el propio Kondabulu, quiz¨¢s los guionistas podr¨ªan esforzarse por seguir ri¨¦ndose del poder y no tanto de un inmigrante.
Incluso aunque no estemos de acuerdo con esta idea, la respuesta de la serie es bland¨ªsima: ¡°?Qu¨¦ puedes hacer?¡±. Esta pusilanimidad molesta especialmente porque son Los Simpson. La serie seguir¨¢ dando dinero d¨¦cadas despu¨¦s de que la cancelen, cosa que espero que no ocurra hasta despu¨¦s de mi muerte. Si alguien puede hacer lo que quiera son ellos. Podr¨ªan defender a su personaje y burlarse de las cr¨ªticas o, al contrario, reflejar los cambios sociales en sus chistes y guiones.
Y ese quiz¨¢s sea el problema de Los Simpson. Que ya no se arriesgan como lo habr¨ªan hecho hace unas cuantas temporadas y prefieren encogerse de hombros. Encima se esconden detr¨¢s de Lisa, alguien que no dudar¨ªa en tomar partido ni aunque supiera que iba a perder la batalla.
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