¡®La buena vida¡¯ de Trueba sigue ahora con ¡®Casi 40¡¯
El cineasta recupera los protagonistas de su primer filme dos d¨¦cadas m¨¢s tarde
![Fernando Ramallo, David Trueba y Luc¨ªa Jim¨¦nez, en la presentaci¨®n en M¨¢laga de 'Casi 40'.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/O37XVD6PSGGNVYPEH6ZEZDBXFU.jpg?auth=25cfb8933b3a3c766959b689342ac893b5c3d26796b7ec4c9e38784cb300428f&width=414)
![Gregorio Belinch¨®n](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2Faf2fcf40-0f04-4e09-8ac6-2a289ec0a84f.png?auth=6065fc9ace6725c5b61e5b39c1d687f87c6f74c2d39400bb4e40f566b1ca52c2&width=100&height=100&smart=true)
¡°No te pongas nost¨¢lgico¡±, le espeta el personaje de Luc¨ªa Jim¨¦nez al de Fernando Ramallo en Casi 40, la nueva pel¨ªcula de David Trueba (Madrid, 1969). Han pasado m¨¢s de dos d¨¦cadas de La buena vida, su debut como director. Y ahora Trueba recupera a su pareja protagonista. Eso s¨ª, sin melancol¨ªas. El autor de la frase se defiende: ¡°La clave est¨¢ en escribir para los personajes, no para ti, aunque es cierto que en el personaje de Luc¨ªa hay muchos detalles cercanos a m¨ª. Ni la pel¨ªcula ni yo somos nost¨¢lgicos, si por nostalgia entiendes la edulcoraci¨®n del pasado. Casi 40 es sencillamente un largometraje en el que charlan dos personajes que en el pasado mantuvieron una relaci¨®n, y que cada uno posee una visi¨®n distinta de aquel amor. Aunque desde el tiempo presente. El pasado te marca, te aporta experiencias, pero no puede tener tanto peso como el presente. Y en mi cine cuando un personaje roza esa tentaci¨®n recibe una bofetada de realismo-presentismo¡±.
La vida ha pasado. Luc¨ªa ¡ªactriz y personaje comparten nombre¡ª y Trist¨¢n dejaron de verse. Ella abandon¨® una prometedora carrera musical, con alg¨²n gran ¨¦xito. Tiene dos hijos, es feliz en su emparejamiento con un exfutbolista. Trist¨¢n ha dado m¨¢s tumbos en su existencia. Ahora vende cosm¨¦tica ecol¨®gica. Y descubre una ayuda p¨²blica para dar conciertos en locales peque?os y librer¨ªas: perfecto para reencontrarse con Luc¨ªa e involucrarla en una peque?a resurrecci¨®n musical a trav¨¦s de una gira por Castilla y Le¨®n y Extremadura. As¨ª arranca Casi 40, que se present¨® ayer en el festival de cine de M¨¢laga antes de su estreno comercial el 29 de junio.
Casi 40 no nace por tanto de una a?oranza, sino de un af¨¢n. ¡°La pel¨ªcula tiene que ser vista sin presuponer que el p¨²blico haya visto La buena vida. Debe arrancar de cero. Por eso, no nace para resucitar a los personajes, sino que el motor fue una charla con Fernando y Luc¨ªa en la que me contaron cu¨¢nto tiempo llevaban sin rodar una pel¨ªcula. Yo soy una persona reacia al conformismo, creo en el hacer m¨¢s que en la queja. Apuesto por el hagamos algo. Y nos lanzamos a ello¡±.
Otra sentencia que se escucha desde la pantalla: ¡°Las cr¨ªticas a veces no tienen que ver con lo que haces, sino con quien eres¡±. ?Un alegato de defensa? ¡°En muchas ocasiones sientes que hay una personalizaci¨®n en el texto. Puede que sea irremediable, y por supuesto es tan aplicable a mi trabajo como al de los otros¡±.
Trist¨¢n era, seg¨²n define Luc¨ªa, ¡°el ni?o m¨¢s brillante del mundo¡±. ¡°Supongo que en el personaje¡±, cuenta Trueba, ¡°se concitan las expectativas no cumplidas, y el que no las tenga es porque se habr¨¢ marcado unas expectativas miserables¡±.
En Casi 40 suenan ecos de Salir de casa (2016), el documental que Trueba rod¨® con el m¨²sico Francisco Nixon en una gira. ¡°No lo hab¨ªa pensado tanto por ah¨ª como en su conexi¨®n con Tierra de campos [su ¨²ltima novela], porque este libro ha sido el proyecto al que m¨¢s tiempo he dedicado. Algunos de mis trabajos en estos a?os han sido como exploraciones. Otros, derivaciones. Y Casi 40 viene de esa misma cepa¡±.
Suicidio f¨ªlmico
Hay todo un universo Trueba con ecos en Casi 40, en m¨²sica, librer¨ªas, personajes, reflexiones... ¡°No soy qui¨¦n para llevarle la contraria al p¨²blico cuando las descubre, aunque no sean las m¨ªas. Y eso es muy divertido¡±. ?No es un castigo para Luc¨ªa casarla con un jugador del Real Madrid? ¡°A priori, s¨ª. Luego conoces algunos y son majos. En realidad, sirve para conformar esa imagen de ¡®Ay, dios m¨ªo, c¨®mo nos ha podido pasar esto¡¯. La pel¨ªcula habla tambi¨¦n de las tentaciones de comodidad que te lanza la vida, porque la estabilidad y el equilibrio se logran a costa del margen de aventura, de hacer lo que quer¨ªas. Para el personaje de Ramallo esa pareja suena a conservadurismo y es una pregunta pertinente: a qu¨¦ has renunciado por obtener otras cosas en tu trayectoria¡±.
![Luc¨ªa Jim¨¦nez y Fernando Ramallo, en 'La buena vida'.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/N2HZKQBFHEJZIP4GQ6VXKHB2PY.jpg?auth=209e2d39fc87824e1b1d62a5c678669c3090577e5cf6050d1bee3e34536c1ce7&width=414)
Con canciones enteras en el metraje y conversaciones afrancesadas en un viaje, ?esta es la pel¨ªcula de David Trueba m¨¢s parecida a las de Jon¨¢s Trueba (su sobrino)? ¡°Lo he pensado en alg¨²n momento [risas]. Bah, son cosas accidentales. Yo tambi¨¦n he hecho cine con cierta vocaci¨®n de suicidio, como Madrid, 1987¡±.
La ¨²ltima frase de Casi 40 para echar en cara a Trueba. ¡°El primer amor es ¨¦pico¡±. El acusado responde: ¡°Es que no es como los dem¨¢s, conforma el amor el resto de tu vida. Para m¨ª ese primer amor trasciende al amor¡±.
Un acto de insumisi¨®n contra las teles
David Trueba se siente "enjaulado" en la industria del cine espa?ol, muy pastoreada por "las tres ventanillas ¨²nicas a las que recurrir": las televisiones privadas. "Me rebelo contra una cierta injusticia que se vive en la industria con la dictadura de las modas: ahora se tiene que rodar con estos actores, ahora estos no valen... Las televisiones marcan formas y contenidos, pidi¨¦ndote cambios en lo que quieres hacer", reflexiona el cineasta. "Siempre he sido discreto aunque insumiso. Y como prefiero hacer antes que explicar por qu¨¦ no hago, me lanzo a filmar Casi 40".
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