Muere Alain Milhaud, el productor franc¨¦s que moderniz¨® el pop espa?ol

Alain Milhaud, de 87 a?os, falleci¨® ayer martes en un hospital de Madrid, v¨ªctima de un tumor cerebral. Como productor, Milhaud se esforz¨® en la internacionalizaci¨®n de la m¨²sica pop espa?ola, acertando plenamente con Los Bravos. Hombre inquieto, fund¨® una empresa propia, la Compa?¨ªa Fonogr¨¢fica Espa?ola, al¨ªas CFE. En las ¨²ltimas d¨¦cadas, supervisaba la gesti¨®n del repertorio musical de Boccaccio Ediciones.

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La generaci¨®n perdida

De estrella del pop a conserje de noche

Hijo de un alto funcionario de organismos internacionales, Alain naci¨® en Ginebra en 1930. Su familia permaneci¨® en Suiza durante la Segunda Guerra Mundial, lo que le permiti¨® estudiar en el conservatorio sin sobresaltos. Demostr¨® tener iniciativa: organiz¨® un festival de m¨²sica cl¨¢sica que se desarrollaba en diversos castillos del Valle del Loira y tambi¨¦n ejerci¨® como director de orquesta, unas labores de coordinaci¨®n que le ser¨ªan muy ¨²tiles para su futuro trabajo en otras m¨²sicas. Contaba que su primera visita a un estudio de grabaci¨®n le hizo ver que all¨ª hab¨ªa un mundo por explorar: exist¨ªa una enorme distancia entre lo que escuchaban los instrumentistas y lo que pasaba a la cinta magn¨¦tica al otro lado de la pecera.

Casado con la catalana Montserrat Tr¨ªas en 1957, al poco se instal¨® en Barcelona. En una Espa?a que se abr¨ªa al consumo de bienes culturales, descubri¨® que hab¨ªa oportunidades en la m¨²sica popular: se incorpor¨® a Belter, sello est¨¦ticamente no muy exigente pero s¨ª muy activo en el campo de la canci¨®n espa?ola, que aspiraba a montar un estudio profesional; como asesor, Milhaud recorri¨® Europa visitando estudios, para ponerse al d¨ªa en la tecnolog¨ªa de captaci¨®n del sonido. Posteriormente, se traslad¨® a Madrid, llamado por Columbia, la m¨¢s veterana de las discogr¨¢ficas espa?olas.

En 1966, Milhaud conoci¨® a un grupo formado por miembros de los madrile?os Sonor y de los mallorquines Mike & the Runaways. Ten¨ªan un repertorio llamativo, gracias a un cantautor asturiano de voluntad reivindicativa, Manolo D¨ªaz, que tambi¨¦n les bautiz¨® como Los Bravos. Se dieron a conocer gracias al apoyo del locutor Tom¨¢s Mart¨ªn Blanco y la Cadena SER. Sin complejos, tras un concierto de presentaci¨®n en el madrile?o Teatro de la Zarzuela, Milhaud plane¨® un lanzamiento internacional; se recurri¨® a la Decca brit¨¢nica, que pidi¨® material Made in England. As¨ª surgi¨® el tema Black is black: el disco, grabado con m¨²sicos londinenses y el arreglador Ivor Raymonde, fue un enorme ¨¦xito en todo el mundo, aunque en Francia triunf¨® la versi¨®n de Johnny Hallyday, Noir c¡¯est noir.

La carrera global de Los Bravos se atasc¨® por las idiosincrasias de su frontman, el berlin¨¦s Mike Kennedy, aunque en 1968 volver¨ªan a las listas de medio mundo con Bring a litte lovin, pieza cedida por los australianos Easybeats. El grupo cambi¨® regularmente de sonido y de formaci¨®n, mientras Kennedy grababa como solista a partir de 1969.

Con la bendici¨®n de un hombre poderoso del negocio discogr¨¢fico franc¨¦s, Eddie Barclay, Milhaud mont¨® una compa?¨ªa propia e intent¨® repetir la jugada con grupos que cantaban en ingl¨¦s, Canarios y Pop-Tops. Estos ¨²ltimos tuvieron recorrido internacional con Mamy Blue (1971), grabada en varios idiomas. Tambi¨¦n el Get on your knees, de Canarios, se convirti¨® en un cl¨¢sico en el circuito del soul bailable.

Bien situado entre los dos pa¨ªses, visitante habitual del MIDEM de Cannes, Mihhaud olfateaba al instante las canciones con posibilidades comerciales y se apresuraba a adaptarlas al espa?ol: una de ellas fue A los que hiri¨® el amor, que interpret¨® Pedro Ruy-Blas, vocalista que reemplaz¨® a Teddy Bautista en Canarios durante su servicio militar. En otros casos, detectaba el ¨¦xito en potencia y ¨Csi estaba libre de derechos- editaba la grabaci¨®n original, como ocurri¨® con Venus, de los holandeses Shocking Blue.

Ya entrados los setenta, apost¨® por el acercamiento del rock al flamenco con El garrot¨ªn, donde el cantaor Manuel Molina colaboraba con los rockeros sevillanos de Smash. Se public¨® en el sello Boccaccio, fruto de su asociaci¨®n con el empresario Oriol Reg¨¢s, donde tambi¨¦n produjo discos esenciales de Mar¨ªa del Mar Bonet y del grupo de fusi¨®n Iceberg. Aport¨® su sabidur¨ªa a los estrenos de cantautores ambiciosos, como el madrile?o Hilario Camacho y el gallego Bibiano.

En el estudio, Alain Milhaud era un jefe exigente, incluso temido. ?l se disculpaba alegando sus problemas con el castellano: a veces le costaba explicarse y optaba por las expresiones m¨¢s breves y tajantes. Al mismo tiempo, se mostraba escrupuloso en el aspecto econ¨®mico. De hecho, vendi¨® su Compa?¨ªa Fonogr¨¢fica Espa?ola cuando encontr¨® dif¨ªcil compaginar las funciones de disquero y productor,

En realidad, nunca abandon¨® la m¨²sica: volvi¨® ocasionalmente a los estudios, para elaborar proyectos visionarios que tardaron d¨¦cadas en publicarse (Flamenco challenge, del colectivo Iberia, que inclu¨ªa desde Ginesa Ortega a Joan Albert Amarg¨®s) o que no llegaron a salir, como un audaz intento de reaparici¨®n de Mike Kennedy con participaci¨®n de Phil Trim, el vocalista de Pop-Tops.