Lars von Trier: ¡°Puede que mi p¨²blico haya envejecido para algunas secuencias violentas¡±
Lars von Trier quita importancia a las cr¨ªticas y deserciones por su dura pel¨ªcula ¡®La casa que Jack construy¨®¡¯. ¡°Soy un artista y por tanto un provocador¡±, afirma
El alcoholismo le ha pasado factura. ?l mismo lo reconoci¨® hace un mes, en una entrevista colgada en YouTube en donde aparec¨ªa con su aspecto actual, pelo largo y barba cana. En persona llama mucho m¨¢s la atenci¨®n el temblor de sus manos y sus balbuceos. Necesita una mano para agarrar un botell¨ªn de agua y la otra para subirlo y bajarlo. Por eso, ahora chirr¨ªa el 'fuck' que lleva tatuado en los nudillos de su mano derecha. A sus 62 a?os reci¨¦n cumplidos, el dan¨¦s Lars von Trier parece el padre del cineasta que hace siete a?os fuera expulsado de Cannes y declarado persona non grata, tras la turbulenta rueda de prensa de Melancol¨ªa. All¨ª dijo: "Entiendo a Hitler. No puede decirse que sea un tipo estupendo... pero me cae simp¨¢tico. No estoy a favor de la Segunda Guerra Mundial, y estoy a favor de los jud¨ªos... aunque no demasiado, porque Israel nos suele joder bastante". ?l mismo d¨ªas despu¨¦s asegur¨® que se no entendi¨® el tono de sus frases, que su padre era jud¨ªo, aunque el da?o ya estaba hecho. "En mi pa¨ªs apenas tuvo eco, porque entendieron el contexto", dice en este Cannes ante un grupo de periodistas europeos.
En este Cannes ha vuelto a levantar polvareda con su thriller La casa que Jack construy¨®, protagonizado por un asesino en serie y con secuencias gore que provoc¨® la salida de la proyecci¨®n de gala del lunes de un reguero de asistentes -imposible su c¨¢lculo- de los 2.300 que caben en el teatro Lumi¨¨re. "Yo soy un artista, y por tanto un provocador", asegura. "Me preocupar¨ªa m¨¢s que nadie se hubiera movido. Pero es cierto que como son butacas abatibles, cada vez que alguien se levantaba se o¨ªa un?bum, y hubo un momento que parec¨ªa un hurac¨¢n". ?No le llam¨® la atenci¨®n? "Creo que hay mucha m¨¢s violencia en otras pel¨ªculas y en el mundo actual. Puede que mi p¨²blico haya envejecido y sea m¨¢s remiso a algunas secuencias".
En la pel¨ªcula, Matt Dillon, que encarna al asesino, suelta un "?Por qu¨¦ la culpa es siempre de los hombres?" mientras dialoga con alguien que el espectador sospecha es el diablo. "S¨ª, tambi¨¦n dice que las mujeres son est¨²pidas. Pero es que en la ¨¦poca en la que transcurre la acci¨®n, hace d¨¦cadas, se pensaba as¨ª. Igual se opina en la historia de los polic¨ªas. ?Que si soy un mis¨®gino? Mire, mis pel¨ªculas siempre han contado, hasta ahora, con protagonistas femeninas. Mi madre era una feminista radical... y puede que me haya vengado as¨ª de ella en pantalla". El comentario lo subraya con una sonrisa para dejar claro que ha vuelto el viejo Von Trier, el ir¨®nico. "El guion lo escrib¨ª hace a?os. Si llego a hacerlo ahora, me hubiera pensado dos veces ese di¨¢logo". Y prosigue con su explicaci¨®n: "El protagonista es un psicokiller, as¨ª que haga lo haga ser¨¢ malo. A m¨ª me sorprende c¨®mo la gente y los medios de comunicaci¨®n se enamoran de esos personajes. Yo conozco mejor a los psic¨®patas, gente que solo sienten culpa al infringir sus propias reglas y que tiende a destruir sus habilidades. Les aseguro que el guion era m¨¢s divertido de lo que se ve en pantalla. Sospecho que no he acertado en el rodaje".
Pero La casa que construy¨® Jack en realidad habla sobre la obsesi¨®n del artista, y sobre qu¨¦ es arte y ah¨ª, Von Trier, el provocador, puede que se autorrefleje con obvias referencias, como el metraje que aparece de sus pel¨ªculas ("No ten¨ªamos dinero para pagar derechos a otros") y reflexiones sobre el arquitecto nazi Albert Speer: "Speer era nazi, pero algunos de sus edificios y dise?os me parecen fant¨¢sticos". ?Se siente perdonado por Cannes? "Es que yo no considero que hiciera algo malo. Desde luego me expliqu¨¦ fatal en aquella rueda de prensa. Como saben, al que yo cre¨ªa mi padre era jud¨ªo, y mi madre antes de morir me cont¨® que mi padre real era alem¨¢n y jud¨ªo. As¨ª que de repente devine en alem¨¢n y jud¨ªo, y en Dinamarca a los alemanes se les satiriza como nazis... Yo soy todas esas cosas". Tartamudea, y entra directo en otra pol¨¦mica. "Lo llamativo es que los nazis construyeron un sistema muy inteligente, basado en los discursos y el carisma de Hitler. Me parece singular que no se basaran en ninguna religi¨®n, al contrario que el resto de las dictaduras".
Von Trier -el von se lo a?adieron en la escuela de cine sus compa?eros por su chuler¨ªa- se confiesa muy cansado tras el ¨²ltimo rodaje: "El arte lleva al l¨ªmite a sus creadores. Puedo incluso apoyar que matar a 61 personas, como mi protagonista, pueda ser entendido por ¨¦l como arte, porque, ?qui¨¦n define qu¨¦ es arte? Yo no soy capaz". El cineasta anunci¨® hace a?os que se retiraba: "No puedo. Hacer pel¨ªculas es la ¨²nica manera que conozco de relajarme. Acabo de salir de una depresi¨®n y del alcoholismo, aunque aqu¨ª en Cannes he abandonado algunos d¨ªas mis pastillas de la ansiedad y cometido alg¨²n pecado venial. Necesito trabajar. Y en Zentropa [su productora] ten¨ªamos que ingresar dinero. Por eso decidimos dejar de lado la idea inicial de que fuera una serie de televisi¨®n. Bueno, tambi¨¦n porque yo no s¨¦ trabajar con otros guionistas y directores". ?Le preocupa que alguien le malinterprete a usted o a su obra? "No". Pero cuando lee las cr¨ªticas... "No leo. Pero si la gente ve mis pel¨ªculas con ese concepto de m¨ª, yo creo que al final pensar¨¢n que no son la obra del t¨ªpico nazi".
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