La negaci¨®n de la negaci¨®n
Uwe Timm indaga en las razones por las que tantas personas pasaron del socialismo ut¨®pico al Holocausto y logra una de las mejores novelas alemanas de los ¨²ltimos a?os
A lo largo de las d¨¦cadas de 1930 y 1940, un pu?ado de cient¨ªficos alemanes concibi¨® la posibilidad de intervenir en el orden social mediante la selecci¨®n y manipulaci¨®n de seres humanos; los practicantes de la eugenesia se beneficiaron de las fantas¨ªas raciales de los pol¨ªticos nacionalsocialistas y su control de las poblaciones: con el apoyo expl¨ªcito de Adolf Hitler, los eugenistas alemanes esterilizaron forzosamente a 275.000 personas, asesinaron a miles de enfermos mentales y personas con discapacidad, practicaron cientos de experimentos con prisioneros y ofrecieron la legitimaci¨®n pseudocient¨ªfica para el exterminio de seis millones de jud¨ªos y casi un mill¨®n de miembros de la etnia roman¨ª. No hubo hiato alguno en el tr¨¢nsito entre la experimentaci¨®n y el asesinato selectivo: a partir de 1940, los responsables de la investigaci¨®n eugen¨¦sica en la prisi¨®n de Brandeburgo se hicieron cargo tambi¨¦n de su c¨¢mara de gas, por ejemplo.
La nueva novela del escritor alem¨¢n Uwe Timm (Hamburgo, 1940) revisita el proyecto eugen¨¦sico con el pretexto de la investigaci¨®n policiaca. Michael Hansen, un joven oficial de inteligencia estadounidense nacido en Alemania, regresa al pa¨ªs con las tropas de ocupaci¨®n y recibe el encargo de entrevistar extensivamente a un disc¨ªpulo de Alfred Ploetz, el m¨¦dico que sent¨® las bases de la ¡°higiene racial¡± alemana. Wagner (el disc¨ªpulo) tiene una historia para contar y esta es, en primer lugar, la de c¨®mo un pu?ado de j¨®venes socialistas y pacifistas acabaron convirti¨¦ndose en v¨ªctimas, pero tambi¨¦n en victimarios; en segundo lugar, es la historia de c¨®mo muchas de las utop¨ªas del siglo pasado devinieron distop¨ªas, y sus adherentes, asesinos.
La literatura de Timm (autor de casi dos docenas de libros y uno de los escritores alemanes m¨¢s importantes de las ¨²ltimas d¨¦cadas) se erige sobre la certeza de que, como dice en Icaria, el siglo XX est¨¢ recorrido por lo innombrable, pero tambi¨¦n sobre la convicci¨®n de que eso innombrable debe ser nombrado. Ploetz fue un personaje real: nacido en Swinem¨¹nde en 1860, en su juventud ley¨® intensivamente a Ernst Haeckel y a Charles Darwin, fund¨® sociedades secretas de orientaci¨®n socialista y ut¨®pica y estudi¨® econom¨ªa pol¨ªtica y medicina. En 1895 public¨® unos Fundamentos para una higiene racial y en 1904 cre¨® la revista Archivo de la Biolog¨ªa Racial y Social, pero su momento lleg¨® en 1933, cuando las autoridades nacionalsocialistas lo escogieron como parte de un comit¨¦ de expertos que deb¨ªa asesorar al Gobierno en materia de eugenesia y pol¨ªtica racial; sus ideas al respecto eran conocidas desde la publicaci¨®n de su obra m¨¢s importante, La fuerza de nuestra raza (1895): la sociedad deb¨ªa estar en condiciones de controlar la reproducci¨®n de sus miembros y el n¨²mero de su descendencia, los nacidos con discapacidad f¨ªsica o mental ten¨ªan que ser ¡°eliminados¡± y deb¨ªa impedirse la reproducci¨®n de los sujetos ¡°sin valor¡± y/o que constituyeran una carga; los jud¨ªos, individualistas y ajenos a la idea de patria, deb¨ªan ser sometidos.
Mientras Hansen se abre paso con el Ej¨¦rcito estadounidense a trav¨¦s de las ruinas de las ciudades alemanas en abril de 1945 (lo que ofrece a Timm la oportunidad de narrar un paisaje que conoci¨® bien), al tiempo que su protagonista se enamora, se desenamora, penetra en la historia, Icaria se pregunta c¨®mo pudieron pasar Ploetz y las personas como ¨¦l del socialismo ut¨®pico y el proyecto de una sociedad igualitaria sin propiedad privada ni guerras a la contribuci¨®n en el Holocausto. La respuesta, parece decir la novela, radica en el fracaso de los proyectos ut¨®picos de convivencia que tuvieron lugar en los a?os inmediatamente anteriores a la emergencia del fascismo, pero tambi¨¦n en el tipo de pensamiento totalitario que anidaba en las grandes utop¨ªas, por ejemplo en el libro de ?tienne Cabet Viaje a Icaria (1840) que Ploetz y sus compa?eros escogieron en su juventud como libro de cabecera y manual de instrucciones.
Arnhelm Neus¨¹ss defini¨® la utop¨ªa como ¡°la negaci¨®n de la negaci¨®n¡±, por parte de la realidad existente, de que algo mejor sea posible. Max Horkheimer, por su parte, le atribuy¨® una doble condici¨®n, la de ser ¡°la cr¨ªtica de lo que es¡± y ¡°la descripci¨®n de lo que debe ser¡±. Timm no renuncia a la necesidad de ¡°un orden social justo y ¡®verdadero¡±, que es lo propio de la utop¨ªa seg¨²n Horkheimer; pero tampoco desconoce que los sue?os terminan convirti¨¦ndose, inevitablemente, en pesadillas. Cuando muri¨® en 1940, ya definitivamente alejado del socialismo pacifista de su juventud, pero no del proyecto ut¨®pico de una transformaci¨®n radical de la sociedad, Alfred Ploetz pod¨ªa disfrutar de ver c¨®mo sus ideas acerca de la ¡°optimizaci¨®n¡± del sujeto como herramienta de la mejora social hab¨ªan devenido pol¨ªtica de Estado. La derrota militar del nacionalsocialismo s¨®lo produjo un ligero desplazamiento, y lo que antes era potestad del Estado (esa ¡°optimizaci¨®n¡±), ahora es el ¨¢mbito de acci¨®n de las tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n y las grandes empresas. No s¨®lo por esto, Icaria es un libro necesario, adem¨¢s de una de las mejores novelas alemanas de los ¨²ltimos a?os.
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Autor:?Uwe Timm.
Editorial:?Alianza Editorial (2018).
Formato: versi¨®n Kindle y tapa blanda (400 p¨¢ginas).
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