Miguel R¨ªos: ¡°Nunca he sido moderno¡±
El rockero ib¨¦rico vuelve a el Teatro Real con 'Symphonic R¨ªos' a los 74 a?os y confirma la sospecha de que es adicto al escenario.
Fuera hace fuego, pero en el lobby del Eurobuilding, un hotelazo de toda la vida al que han querido en vano dar un toque hipster, el ¨ªdolo se aplica un fularillo negro al cuello y un t¨¦ roibos al gaznate con el fin de templar la voz averiada en v¨ªsperas de gran concierto. Tener a Miguel R¨ªos a medio metro es como ponerle cara y carne a tu adolescencia. Ah¨ª est¨¢, tantos a?os despu¨¦s, el rey del escenario de tantas noches de verano. La vida no pasa en vano para nadie, pero el perfil p¨¦treo y la pelambrera de caracoles son casi los mismos. Algunos le creyeron cuando jur¨® que se retiraba en 2010 con la gira Bye, bye R¨ªos. Ilusos.
Ens¨¦?eme la coleta, por favor. Le debe de llegar por las corvas.
Es verdad, no me la he cortado. Yo tn¨ªa que haber escrito Los viejos rockeros siempre vuelven. No dejan de ofrecerme caramelos y, claro, ni puedo ni s¨¦ negarme.
?El escenario es como una novia a quien no se puede dejar?
Nunca lo hab¨ªa visto como una novia, porque el rock and roll es m¨¢s machista que todo eso. Pero s¨ª, es como una adicci¨®n. De repente te das cuenta de que has estado abducido por una de esas sectas que te impiden abandonar.
?Se cree uno Dios ah¨ª arriba?
Se puede. Sobre todo cuando has hecho una canci¨®ncon algo ¨ªntimo y oyes a diez mil t¨ªos cant¨¢ndola. Hay quien se vuelve tonto, y es duro salir de esa tonter¨ªa.
?Lo dice por experiencia?
He tenido altibajos. Soy el m¨¢s inestable de mi quinta. Yo hacia cosas distintas y pillaba a la gente con el pie cambiado. Siempre he sido consciente de mis limitaciones. Como cuando Sprinsteen te pone en tu sitio, el cabronazo .
?Son m¨¢s peligrosos los picos altos o los bajos de la noria?
Los de arriba, el aire de la azotea es letal, porque siempre te puedes tirar al vac¨ªo. De abajo, tiendes a subir, sobre todo si eres estoico y vienes de un sitio donde estas predestinado a perder.
Se dice un ni?o herido por la belleza de la Alhambra. ?Se puede ser melanc¨®lico a los 10 a?os?
S¨ª. Granada tiene unos atardeceres peligrosos, conmueven tanto que paralizan. Y un t¨ªo no puede estar mirando, sino corriendo
.?Qu¨¦ es hoy ser moderno?
Ni idea. Yo nunca he sido ni querido ser moderno, lo que siempre quise es ser de otro lado
.?Extranjero en casa?
De alg¨²n lugar donde sue?as que encuadrar¨ªas. Y es una quimera. Viv¨ª una temporada en EE UU y enseguida le ves el truco. Siempre he estado yendo a alg¨²n sitio.
El 'on the road' de toda la vida.
S¨ª, el 'en tr¨¢nsito' de Serrat. Pero con las se?as de identidad sabidas. A m¨ª me han jodido siempre como clase los ricos, por ejemplo.
Si es usted millonario.
Bueno, soy rico comparado con el mileurista, pero comparado con los ricos de verdad soy un pichiniqui, como le dec¨ªan en Granada a alguien que se cree lo que no es. He intentado no cambiar conscientemente de acera.
Eso suena a otra cosa.
Mira, me compr¨¦ un Mini y le pint¨¦ el s¨ªmbolo de la paz. Le lleg¨® el recado a mi madre de que era de la otra acera y tuve que ir a neg¨¢rselo, porque a ella, que me quer¨ªa a morir, le o¨ª decirme: ¡°Ni?o, antes muerto que maric¨®n¡±.
Ese machismo del que hablaba, ?lo hemos mamado en casa?
Mi madre era m¨¢s machista de lo que yo nunca. Mi padre entraba y le pon¨ªa las zapatillas. Tenemos algunas esquirlas del pasado muy adheridas. Y ya no es que no se pueda ser machista. Hay que ser feminista proactivo. Las chicas han estado tiempo en la retaguardia peleando, est¨¢n afiladas,y me parece de puta madre.
Sabina dio la espant¨¢. Si ¨¦l es Curro Romero, ?Usted es Anto?ete?
Sabina es Dios. Se puede ir, y en vez de decirle hijo de puta, ni le reclaman la entrada. ?Anto?ete, yo? Por mis prendas recientes, no lo niego. Era un S¨¦neca, el t¨ªo.
Con casi 60 a?os de carrera debe de tener una 'egoteca' ¨¦pica.
No, pero, tengo una secretaria que ha empezado a archivar cosas y, hombre, imagino que mi hija har¨¢ algo cuando est¨¦ palmao.
?'Palmao'? ?No da mal fario?
S¨ª. Hab¨ªa dos cosas que no pod¨ªamos decir. 'Palmolive', porque era cuando no te pagaban. Y 'Colgate', cuando no hab¨ªa concierto.
La alegr¨ªa del himno.
Aunque solo fuera por su celeb¨¦rrima traducci¨®n del 'Himno de la Alegr¨ªa', el rockero ib¨¦rico Miguel R¨ªos (Granada, 1944) ser¨ªa un cl¨¢sico vivo. Uno de esos juglares cuyas letras nos sabemos sin saberlo. El 6 de julio presenta 'Symphonic R¨ªos' en el Teatro Real,
Babelia
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