?A qu¨¦ suena Dinamarca?
El festival La Mar de M¨²sicas de Cartagena ofrece una muestra de los sonidos del pa¨ªs n¨®rdico

Ni siquiera Aqua y su pesad¨ªsima Barbie Girl?consiguieron posicionar a Dinamarca en el mapa sonoro internacional. Cuando Thorbj?rn Radisch de Bisse pregunta qu¨¦ bandas danesas conoce el periodista, apenas logra balbucear The Raveonettes, M?, Iceage y Trentem?ller. Radisch es uno de los m¨²sicos del pa¨ªs n¨®rdico que, junto a Den Sorte Skole, WhoMadeWho, Eiv?r, Affenginn, Wangel y The KutiMangoes, atienden a EL PA?S en el soleado patio del centro cultural Alice de Copenhague, celebrando que act¨²an del 20 al 28 de este mes en el Festival La Mar de M¨²sicas.
Ser¨ªa temerario afirmar que pertenecen todos a una misma escena pero s¨ª comparten cierta actitud cr¨ªtica con la imagen perfecta de su pa¨ªs id¨ªlico, rubio y sonriente. Una sociedad envuelta en sostenibilidad y dise?o, que asciende cada a?o hasta lo m¨¢s alto del Informe Mundial de la Felicidad de la ONU. Martin H?jland, del d¨²o electr¨®nico Den Sorte Skole, opina: ¡°Somos muy afortunados pero el precio que pagamos por tener un gran sistema del bienestar es que nuestro arte ni arriesga ni es relevante, todo el mundo aqu¨ª es muy complaciente y la m¨²sica es suave y f¨¢cil de digerir¡±.
Kim Nyberg de Affenginn, con rastas y pies descalzos, se muestra m¨¢s optimista: ¡°Poco a poco, aumenta nuestra capacidad de rebasar fronteras, tanto captando p¨²blico como influencias¡±, y apunta que ¡°en el caso de la m¨²sica tradicional, la clave es cambiar el folclore purista por la tradici¨®n viva¡±. Nyberg es de origen sueco y su brass-band de inspiraci¨®n balc¨¢nica navega por el folk con letras en un lenguaje inventado que denomina street latin.
Lorca y la estela espa?ola
?Qu¨¦ saben los m¨²sicos daneses reunidos para este reportaje de la m¨²sica espa?ola? "Me gusta mucho Ojos de Brujo", se?ala Kim Nyberg, mientras el resto cita al dj barcelon¨¦s John Talabot.
Al menos, Michael Blicher conoce bien Andaluc¨ªa, donde ¡ªal igual que tantos daneses¡ª pasa largas temporadas la l¨ªder de su grupo favorito, las leyendas del rock sicod¨¦lico The Savage Rose, que estar¨¢n el 25 de julio en Cartagena. Annisette Koppel, de 79 a?os, ¨²nica superviviente de la formaci¨®n original, mantiene intacto su compromiso con el rock y las causas sociales, y lleva su directo a c¨¢rceles y campos de refugiados. Responde desde su retiro en el Mediterr¨¢neo: "En 1970 rechazamos un contrato de RCA porque exig¨ªa tocar en Vietnam para los soldados americanos". La estela espa?ola en The Savage Rose se hace evidente en la adaptaci¨®n de la Nana del caballo grande (Bodas de sangre) de Lorca que hicieron para el disco En vugge af Stahl, las canciones de la Guerra Civil recogidas en su Ild og Frihed o en "los temas de Universal Daughter" que grabaron "en una monta?a a 70 kil¨®metros de Madrid".
La vocalista y compositora Eiv?r P¨¢lsd¨®ttir es un buen ejemplo de c¨®mo exportar el sonido dan¨¦s. Procedente de las islas Feroe, ha colocado sus canciones ¨¦picas en series y videojuegos en todo el mundo. ¡°Lo mejor de aparecer en una producci¨®n como Juego de tronos o The Last Kingdom es que tu tema adquiere otra perspectiva y una nueva voz, a?adiendo emoci¨®n a las escenas. Y lo mismo con videojuegos como God of War, ?es alucinante!¡±. Es una mujer exitosa en un sector todav¨ªa dominado por hombres: ¡°Cuando empec¨¦, con 12 a?os, no hab¨ªa chicas pero ahora hay cada vez m¨¢s y eso me encanta¡±.
Su paisano fero¨¦s Kasper Ejlerskov, miembro de Wangel, describe el archipi¨¦lago de islas volc¨¢nicas del Atl¨¢ntico Norte como ¡°un lugar inspirador que, gracias a la navegaci¨®n, se ha enriquecido con influencias preciosas de m¨²ltiples estilos que quiz¨¢ no han penetrado de la misma manera en Dinamarca¡±. Las melod¨ªas hipn¨®ticas y voz profunda del cantante Peter Wangel, se encuentran en las ant¨ªpodas del ritmo bail¨®n de The KutiMangoes, que ¨¦l nombra como su grupo dan¨¦s favorito ante la sorpresa de su l¨ªder, Michael Blicher, sentado a su vera.
The KutiMangoes personifican al dedillo la etiqueta de m¨²sica global, con un ¨¢lbum titulado Made in Africa grabado en Burkina Faso y Mali, que les llev¨® a los Danish Grammy Awards y se completa con la pel¨ªcula Bamako Play, ganadora del premio a mejor documental de g¨¦nero en el Festival de Nueva York. Blicher, saxofonista de la formaci¨®n, considera que la apertura al exterior es forzosa: ¡°Somos un pa¨ªs peque?o, no como Cuba o Brasil donde la cultura es tan grande que no necesitas buscar fuera¡±. ¡°Aqu¨ª decoramos nuestras casas para no salir de ellas, pero en el sur de Europa la gente est¨¢ en la calle abierta a descubrir nuevas bandas¡±, a?ade.
Se suman al debate sobre la idiosincrasia del mel¨®mano ib¨¦rico Martin H?jland (Den Sorte Skole) y Thorbj?rn Radisch (Bisse), el primero para sentenciar que ¡°en Espa?a si pagan aunque sea ocho euros por ver un espect¨¢culo se callan y disfrutan del concierto, no como aqu¨ª¡± y el segundo sugiriendo que ¡°los espa?oles son obedientes, como los franceses o los italianos, mientras que los daneses somos m¨¢s de cuestionar a las autoridades¡±. Ambos se muestran emocionados por participar en la XXIV edici¨®n de La Mar de M¨²sicas junto a Rub¨¦n Blades, Morcheeba, Gregory Porter, The Human League, Salvador Sobral o la banda de un solo ¨¦xito Inner Circle (en efecto, los de A La La Long).
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