Leopoldo Abad¨ªa: ¡°Ser tonto es lo mejor; est¨¢ tirado. Por eso hay tantos¡±

En el patio de una peque?a empresa familiar en La Bonanova, esa Barcelona de pinos, mansiones y gente como Dios manda. Por cierto, a don Leopoldo Dios le manda mucho. Es afable, divertido y de derechas. Don Leopoldo, queremos decir.

Usted acu?¨® el concepto de ¡°la cultura del no me da la gana (NMDLG)¡±. ?Qu¨¦ es eso?

A m¨ª siempre me ha gustado hacer las cosas a mi aire. Mi canci¨®n favorita es My way (a mi manera). Pero hoy no se puede decir casi nada porque todo est¨¢ mal visto. Un d¨ªa, en una conferencia, me refer¨ª a los negros literarios. Se levant¨® uno y me dijo: ¡°No ofenda a los de otras razas¡±. Pens¨¦: "?T¨² eres tonto de nacimiento o de despu¨¦s?¡±. Y se levant¨® otro, que era negro, y dijo: ¡°Pues yo no me he sentido ofendido". C¨®mico.

Los biempensantes y los pol¨ªticamente correctos est¨¢n ganando¡­

S¨ª, pero yo soy un mani¨¢tico de la libertad. Es lo mejor que nos ha dado Dios. Eso s¨ª, en el uso de tu libertad puedes ser un hijo de mala madre.

Esa libertad exige pagar peajes. El qu¨¦ dir¨¢n, las envidias¡­

A m¨ª el qu¨¦ dir¨¢n me importa tres pitos.

Tiene usted un blog titulado El jard¨ªn de los sensatos. Lo llam¨® as¨ª como reducto, claro, porque hay infinidad de insensatos sueltos, ?no?

Toneladas. De derechas, de izquierdas, de la CUP y de Santa Mar¨ªa de Garo?a.

?Entonces esto se hunde?

No. Nunca se hunde nada. Siempre salimos adelante. Y adem¨¢s es la hora de los sensatos.

No lo tengo yo tan claro.

?Que s¨ª! Los sensatos ganaremos la guerra. Lo que pasa es que a veces parece que hay dos espa?as: la de los sensatos y la de esos se?ores de la tele que van vestidos de oscuro y ponen cara seria y hablan y saben de todo, y lo dicen para que la gente no les entienda. Son tontos.

Es que es m¨¢s f¨¢cil ser insensato que sensato, ?no?

?Clarooooo! Ser tonto es lo mejor. Est¨¢ tirado. Por eso hay tantos. Pero al final son tontos que han aprendido a ganarse la vida. Con lo cual, igual no son tan tontos.

?Tienen que ver con la picaresca espa?ola?

Claro. La literatura de la picaresca es maravillosa porque sus autores no inventaban. Sal¨ªan a la calle y solo ten¨ªan que copiar.

Escribi¨® el libro Abuelos al borde de un ataque de nietos. ?La rebeli¨®n de los abuelos? ?Est¨¢n ustedes cabreados?

Yo es que tengo 50 nietos. Y viene el primer biznieto. Somos una familia de 76. El patriarca Jacob se fue a Egipto con toda su familia. Eran 75. Y va y sale en la Biblia. ?Pero si en la Biblia tendr¨ªa que salir yo! Cuando naci¨® el primer nieto, mi mujer le dijo a nuestro hijo: ¡°Como supongo que vendr¨¢n m¨¢s, quiero que sep¨¢is que ni vuestro padre ni yo nos ocuparemos nunca de los nietos. ?Qu¨¦ quer¨¦is iros a esquiar? Os vais. ?Qu¨¦ quer¨¦is ir a cenar? Vais. Y busc¨¢is un canguro. Con nosotros no cont¨¦is nunca. Para casos de emergencia, siempre¡±.

Es usted del Opus Dei, y si es del Opus es que va a misa todos los d¨ªas. Oiga, ?qu¨¦ le dice uno a Dios todos los d¨ªas sin repetirse?

Pues yo le digo sobre todo ¡°Dios, qu¨¦ sue?o tan horroroso tengo, voy a intentar no dormirme, pero ¨¦chame una mano¡±.

?Por qu¨¦ Dios permite seg¨²n qu¨¦ cosas?

?Ah! Misterio. Nosotros tenemos una hija que a los seis a?os tuvo una par¨¢lisis y se qued¨® en silla de ruedas. Digerir eso cuesta.

?Se rebel¨® contra su Dios en aquel momento?

Yo no, pero no me extra?a que la gente se rebele. Yo le dije a Dios: ¡°?Joder, qu¨¦ encargo me has dado!¡±. Tambi¨¦n le podr¨ªa haber dicho: ¡°?Co?o, ?por qu¨¦?!¡±.

Guerras, accidentes, tragedias¡­ ?no le pide cuentas a Dios?

?Claro! Como Santa Teresa, que una vez fue donde Dios a pedirle cuentas por algo y ¨¦l le contest¨®: ¡°?As¨ª trato a mis amigos!¡±. Y ella le respondi¨®: ¡°?Por eso tienes tan pocos!¡±.

Usted es un economista que no es economista. No pasa nada, hay masters que no son masters¡­

Mira, en septiembre del 63 yo llevaba un a?o dando clase en el IESE y nos enviaron a cinco profesores a Harvard. Sab¨ªamos ingl¨¦s justo para manejarnos. Nos hablaron de una cosa llamada masters. Y lo trajimos. Yo no es que sepa lo que es un master. ?Es que fabriqu¨¦ el master! Y cuando leo las declaraciones del pobre mozo este, que le preguntan si recuerda haber ido a clase y dice ¡°Pues no me acuerdo¡­¡±, es que me da la risa.

Dijo usted que estar¨ªa encantado de compartir nicho con Franco, Jos¨¦ Antonio, Mola y Sanjurjo, pero tambi¨¦n con Carrillo y La Pasionaria. Oiga, le pega usted a todos los palos¡­

Es rid¨ªculo que un presidente llegue y diga ¡°me voy a cargar el Valle de los Ca¨ªdos¡±. Sostener que nuestro problema es Franco es pensar que somos idiotas. Dije aquello porque, una vez muertos, todos somos iguales. Si a m¨ª me enterraran con Franco y con Carrillo, me partir¨ªa de risa con los dos.