La voz de Montserrat Caball¨¦ reina en el emotivo funeral de la soprano

La inconfundible voz de Montserrat Caball¨¦ se ha impuesto esta ma?ana en su ¨²ltimo adi¨®s, en el funeral que se ha celebrado en el Tanatorio de Les Corts. Una ceremonia religiosa -misa completa- en la? que familiares, amigos, pol¨ªticos y personalidades del mundo de la cultura han despedido a la soprano barcelonesa, fallecida el s¨¢bado a los 85 a?os en el hospital de Sant Pau de Barcelona.

Un largo aplauso de casi dos minutos y unos cuantos bravos fueron el ¨²ltimo adi¨®s de todos los que pudieron entrar en la sala. En primera fila, la Reina Sof¨ªa -incondicional admiradora de Caball¨¦ y con quien ten¨ªa una buena relaci¨®n-, el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, y junto a ¨¦l, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, que antes del inicio de la ceremonia estuvieron departiendo unos instantes. Tambi¨¦n ha asistido al funeral el ministro de Cultura Jos¨¦ Guirao, y el presidente del PP, Pablo Casado, que rindi¨® homenaje "a la mejor embajadora de la cultura de Catalu?a y Espa?a". Junto a este ¨²ltimo entr¨®? Xavier Garc¨ªa Albiol, presidente del partido en Catalu?a.?Tambi¨¦n asisti¨® la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

?Un oficio del que ha sido protagonista la propia soprano en las cuatro intervenciones musicales que se han escuchado: el Ave Mar¨ªa, de Franz Schubert, el aria Lascia ch'io pianga de Friedrich H?ndel, a dos voces cantada con Montserrat Mart¨ª, su hija; O mio babbino caro, un aria de Giacomo Puccini y, como despedida,? uno de los actos m¨¢s conocidos de la ¨®pera La forza del destino, de Verdi. Unos fragmentos que ella tantas veces hab¨ªa interpretado por todo el mundo y que fueron elegidos para marcar una ceremonia religiosa? concelebrada por varios sacerdotes, entre ellos el padre Apeles, amigo de los Mart¨ª-Caball¨¦.

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Solo hubo una intervenci¨®n de la familia, la de su sobrina, Montse Caball¨¦,? persona de m¨¢xima confianza de la soprano. Por expreso deseo de la familia, que declin¨® instalar la capilla ardiente en el Liceo, la ceremonia fue sencilla pero abierta a todo el que quiso dar su ¨²ltimo adi¨®s a la artista. Muchos lo hicieron en la tarde del domingo, en el tanatorio, a d¨®nde se acercaron algunos pol¨ªticos, como el ministro Jos¨¦ Guirao y el delgado de Cultura del consistorio, Joan Subirats. La ausencia de alg¨²n representante de la Generalitat ese d¨ªa caus¨® cierto malestar en el entorno de la soprano. Como al tenor Josep Carreras tambi¨¦n le ha sorprendido hoy el hecho de que toda la ceremonia de la misa se hiciera en castellano, sin ning¨²n pasaje o intervenci¨®n en catal¨¢n: "El funeral ha sido entra?able, aunque he echado en falta, sin querer entrar en pol¨¦mica, que hubiera habido algo en catal¨¢n". Y ha a?adido: "Pero qu¨¦ le haremos, las cosas son como son. Esto me imagino que es el deseo de la familia y por lo tanto no hay nada que decir; al contrario, admirar lo que han hecho por ella".?

Mientras los representantes pol¨ªticos estaban a la derecha de la sala,? tambi¨¦n la consejera de Cultura de la Generalitat, Laura Borr¨¤s, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, ex ministro del PP, y su hermano Alberto, jefe de filas del partido popular en el Ayuntamiento de Barcelona; Miquel Iceta, l¨ªder del PSC; In¨¦s Arrimadas, presidenta de Ciudadanos en la Asamblea catalana, Carlos Girauta, portavoz parlamentario del partido y la delegada del Gobierno en Catalunya, Teresa Cunillera; el mundo de la cultura y la m¨²sica? se situ¨® a la izquierda del oratorio. Entre ellos, un muy emocionado Carreras, amigo personal de Caball¨¦ y con quien comparti¨® tantos escenarios, los tenores Jaume Aragall y Josep Bros, el bar¨ªtono Joan Pons, Antoni Ros-Marb¨¤ -el director de orquesta que tantas veces acompa?¨® a Caball¨¦- , Joan Matabosch, director del Teatro Real de Madrid, y Jordi Savall. En las primeras filas estaba la plana mayor del Liceo, el presidente de La Fundaci¨®n, Salvador Alemany, el director general, Valent¨ª Oviedo, y la directora art¨ªstica, Christina Scheppelmann, junto con Josep Pons, director de la Orquesta del Liceo. Entre el p¨²blico se ve¨ªa al cantante italiano Albano Carrisi y al periodista Luis del Olmo.

Pero una gran parte de las personas que han asistido al funeral de la soprano catalana eran incondicionales suyos, su p¨²blico del Liceo, tal como comentaban antes de entrar en el oratorio y como escrib¨ªan en el libro de condolencias al salir. El ¨²ltimo adi¨®s de esos incondicionales se hizo al pie del coche f¨²nebre que la trasladaba al cementerio de Sant Andreu, donde est¨¢n enterrados sus padres.

La cantante muri¨® a los 85 a?os tras convertirse en una de las sopranos m¨¢s universales del siglo XX, d¨¢ndose a conocer en 1956 en la ?pera de Basilea y despu¨¦s en la de Bremen, antes de debutar en el Liceu barcelon¨¦s y saltar a la fama internacional en el Carnegie Hall de Nueva York (Estados Unidos). Adem¨¢s de recorrer los grandes templos de la l¨ªrica internacional durante una carrera de 40 a?os, Caball¨¦ cant¨® con Freddie Mercury, Vangelis, Barbra Streisand y Frank Sinatra.