¡°No hay nada que me aterrorice m¨¢s que una cena familiar¡±

Puede que el cine de M. Night Shyamalan (Mah¨¦, India, 1970), director de El sexto sentido o El bosque, naciera en un supermercado. En realidad, a la vuelta de ese supermercado, cuando su padre, que no ten¨ªa aspecto de h¨¦roe, que era, dice, ¡°gordito y bajito¡±, se atrevi¨® a hacer frente a un m¨¢s que posible ladr¨®n. El director era un cr¨ªo. Recuerda que la puerta de casa estaba abierta y que los Shyamalan se temieron lo peor. Al final, fue todo una falsa alarma. ¡°Lo m¨¢s probable es que fuese cosa del felpudo, una estupidez¡±, se?ala. La clase de estupidez que puede convertirte en director de un cine de terror que transforma lo cotidiano en pesadilla. ¡°Nada hay m¨¢s terror¨ªfico que una cena familiar¡±, a?ade el propio Shyamalan.

Se ha dejado crecer el pelo. Sonr¨ªe a menudo. Parece haber recuperado lo que fuera que perdi¨® en la d¨¦cada en la que compuso El incidente y After Earth, la pel¨ªcula que, seg¨²n su protagonista (Will Smith), casi acaba con su carrera. ?Por qu¨¦? Ha dejado de trabajar para los dem¨¢s. ¡°Desde que hipotequ¨¦ mi casa, me siento m¨¢s libre¡±. Desde su suite en el Meli¨¤ de Sitges (Barcelona), en cuyo auditorio ayer se proyectaron 20 minutos de su pr¨®xima cinta, Glass, Shyamalan admite que le gusta ser su propio jefe, imponerse sus l¨ªmites. El filme marca el cierre de la trilog¨ªa superheroica que arranc¨® en 2000 ¡ª¡°un a?o en que me consideraban un nerd por hacer una pel¨ªcula de superh¨¦roes¡±¡ª con El protegido, y continu¨®, en 2016, con M¨²ltiple, donde una psiquiatra intenta lidiar con las 24 personalidades de Kevin Wendell Crumb (James McAvoy), un supervillano conocido como La Horda.

Quiere ser raro. ¡°Me encantar¨ªa hacer algo como lo que Charles Burns hizo en Agujero negro¡±, subraya. ¡°Crec¨ª leyendo Spiderman y Linterna Verde. Le hice a mi madre comprarme un anillo y fing¨ªa que pod¨ªa transformarme¡±. Luego creci¨® y se cruzaron en su camino Hitchcock ¡ªa¨²n mantiene el cameo en cada uno de sus filmes y los personajes que interpreta tienen cada vez m¨¢s l¨ªneas y son ¡°m¨¢s absurdos¡±¡ª y Lynch. ¡°Siempre que estoy escribiendo, tengo cerca Terciopelo azul. La veo para inspirarme¡±.

Su vuelta al cine de superh¨¦roes era cuesti¨®n de tiempo. Samuel L. Jackson lo sab¨ªa. Por eso, cada vez que se cruzaba con ¨¦l en un rodaje, en Los ?ngeles, le preguntaba ¡°para cu¨¢ndo la secuela de El protegido¡±. ¡°?l ha nacido para interpretar a Mr. Glass¡±, el villano que da nombre a su nueva pel¨ªcula. Un cruce de mundos de ficci¨®n en el que David Dunn, es decir, Bruce Willis, tiene que v¨¦rselas con Glass y con La Horda, y en el que la figura del psiquiatra vuelve a ser clave.

¡°Mi mujer es psic¨®loga, no s¨¦, mis personajes necesitan sentirse comprendidos y mi cine tiene mucho de eso. Esta es una pel¨ªcula sobre qui¨¦nes creemos que somos y qui¨¦nes somos en realidad¡±. Podr¨ªa decirse que las m¨²ltiples personalidades de su ¨²ltima creaci¨®n tendr¨ªan algo que ver con la posibilidad infinita de vidas que puede experimentar un creador a trav¨¦s de sus obras y no se estar¨ªa errando el disparo. ¡°Me gusta pensar que hay un sentido del destino, que formamos parte de algo mayor y cada una de las decisiones que tomamos nos dirige en una u otra direcci¨®n¡±.

La cinta, que se estrenar¨¢ el 18 de enero, no da margen al cine ¡°blandengue¡± que hizo en otro momento. ¡°Primero fui un tipo retorcido, pero luego me convert¨ª en padre y me volv¨ª un sentimental: soy la clase de tipo que llora cada d¨ªa. Ahora que mis tres hijas son mayores, lo que quiero es asustarlas, as¨ª que mi cine vuelve a ser retorcido, y me encanta que lo sea¡±, apunta. No se siente esclavo del final sorpresa, por m¨¢s que sea justo lo que espera el espectador cuando va a ver sus pel¨ªculas. Dice que, en el caso de encontrarse su cine en alg¨²n tipo de c¨¢rcel, ¡°es una que me he construido yo mismo, y en la que estoy s¨²per c¨®modo¡±. ?Tiene planes de conectar alguna de sus otras pel¨ªculas y crear as¨ª un peque?o universo Shyamalan? ¡°No, sent¨ª la tentaci¨®n de incorporar personajes de La visita en una parte de Glass, pero la esquiv¨¦. Creo que ser¨ªa ir demasiado lejos¡±.