Un detective recupera para Chipre un mosaico del siglo VI saqueado tras la invasi¨®n turca de 1974
Es una de las pocas obras que sobrevivi¨® al periodo iconoclasta en Bizancio y se encontraba en manos de un coleccionista en M¨®naco
Un mosaico bizantino del siglo VI, desaparecido de una iglesia del norte de Chipre durante la invasi¨®n turca de 1974, ha sido encontrado en M¨®naco, en casa de un coleccionista brit¨¢nico que ignoraba su origen. La pieza muestra el rostro de San Marcos y es una de las pocas obras de arte cristiano temprano que sobrevivi¨® el periodo iconoclasta de Bizancio, entre 726 y 843. Lo ha recuperado el holand¨¦s Arthur Brand, conocido detective especializado en arte robado, tras tres a?os de b¨²squeda. Una vez entregada a la embajada chipriota en los Pa¨ªses Bajos, la obra ha salido este domingo camino de un museo del sur del pa¨ªs que re¨²ne tesoros similares.
El mosaico de San Marcos, que lo muestra con barba y nimbo, adornaba el ¨¢bside de la iglesia de Panaya Kanakaria, situada al norte de la isla de Chipre, a unos 10 kil¨®metros de Nicosia, la capital. Los historiadores calculan que fue ejecutado hacia el siglo VI, y formaba parte de un conjunto de doce. En 1976 el templo fue saqueado por los ladrones, pero el Departamento de Antig¨¹edades de la Rep¨²blica de Chipre no lo supo oficialmente hasta 1979. ¡°Ha sido un labor de b¨²squeda de tres a?os, y he recibido ayuda del brit¨¢nico William Veres, un marchante de arte que tiene ahora problemas con la justicia [por supuesto tr¨¢fico de arte robado]. Pero en mi caso, sin ¨¦l, no habr¨ªa podido encontrar el mosaico¡±, asegura Arthur Brand, en conversaci¨®n telef¨®nica.
Estas obras forman parte del patrimonio cultural chipriota, y el rescatador holand¨¦s ha contado a su vez el apoyo de la Iglesia del pa¨ªs, y del Gobierno de Nicosia. Una vez localizado el de San Marcos en el sur de Europa, Brand, tambi¨¦n apodado el Indiana Jones del arte, por sus aventuras, lleg¨® hasta los due?os. ¡°Es una familia brit¨¢nica residente en M¨®naco que lo hab¨ªan heredado de su padre, el cual lo compr¨® en los a?os setenta sin saber que proced¨ªa de un robo¡±. Tras una larga conversaci¨®n, aceptaron retornarlo a Chipre ¡°a cambio de una suma simb¨®lica por haberlo conservado y restaurado durante estos a?os¡±, a?ade. Luego admite entre risas que suele pasar ¡°unos d¨ªas a solas con las obras que recupero¡±. ¡°Es una forma de disfrutar del esfuerzo y luego las dejo en manos de los due?os leg¨ªtimos, claro¡±.
Brand lleva d¨¦cadas empe?ado en la recuperaci¨®n de arte robado y es un buen conocedor de un mundo que incluye falsificadores y hampones. ¡°Los primeros aprovechan los robos para copiar obras y luego venderlas a los mafiosos. Estos ¨²ltimos pueden comprarlas a veces, sin saber que son un enga?o, aunque tambi¨¦n adquieren arte aut¨¦ntico. Es una moneda de cambio en sus c¨ªrculos y tambi¨¦n un salvoconducto si son detenidos por la polic¨ªa. Su devoluci¨®n puede contribuir a rebajar una pena¡±. En 2016, Brand encontr¨® el cuadro Adolescencia, de Dal¨ª, y tambi¨¦n La M¨²sica, de Tamara de Lempicka. Ambas telas hab¨ªan sido sacadas en 2009 a mano armada de Museo Scheringa del Realismo, situado al norte de ?msterdam. Le cost¨® seis a?os de negociaci¨®n ¡°en los ambientes adecuados, pero yo nunca cometo delitos, no pago ni hago intercambios¡±.
En 2015, resolvi¨® asimismo el enigma de los Caballos de Hitler, un conjunto escult¨®rico que decoraba la Canciller¨ªa de Berl¨ªn perdido tras la ca¨ªda del muro, en 1989. Una vez localizados, cuando una familia alemana trat¨® de venderlos con su intermediaci¨®n, ¨¦l dio aviso a la polic¨ªa y hubo ocho detenidos. Sin sede f¨ªsica para su empresa, y viajando sin parar, Brand reconoce que la peripecia del mosaico de San Marcos no es solo una m¨¢s de su larga b¨²squeda de arte robado. ¡°He aprendido que esta obra forma parte del alma de Chipre¡±.
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