Un ¡®caravaggio¡¯ sublime de su etapa m¨¢s canalla
El Thyssen desvela los secretos de ¡®Santa Catalina de Alejandr¨ªa¡¯, una de las obras cumbres del pintor realizada en Roma durante sus a?os m¨¢s pendencieros y sangrientos
Fillide Melandroni era una joven y bell¨ªsima prostituta de unos 17 a?os cuando Caravaggio la convirti¨® en Santa Catalina de Alejandr¨ªa (hacia 1598-1599) por encargo de su primer mecenas, el cardenal Francesco Maria del Monte, para el Palacio Barberini de Roma. Ella es tambi¨¦n la decapitadora de Judit y Holofernes pintada por las mismas fechas. Considerada como una de las joyas m¨¢s importantes de la colecci¨®n Thyssen y una de las obras m¨¢s relevantes de la etapa romana de Michelangelo Merisi, Santa Catalina de Alejandr¨ªa?supone la transici¨®n del artista al barroco, el salto del lirismo inicial a sus piezas m¨¢s monumentales.
Su mirada directa al espectador, su carnalidad y su deslumbrante belleza quedan ahora desnudos a la vista del p¨²blico despu¨¦s del proceso de restauraci¨®n y limpieza realizado durante nueve meses por el equipo de especialistas del Museo Thyssen en una operaci¨®n financiada por Asisa, que ha supuesto unos 150.000 euros. El ¨®leo (173 x 133 cent¨ªmetros) protagoniza una peque?a muestra titulada Descubriendo a Caravaggio en la sala 11 de la pinacoteca junto a las im¨¢genes radiogr¨¢ficas y de infrarrojos que detallan c¨®mo fue pintada por el artista, incluidos sus muchos arrepentimientos o cambios de idea sobre la marcha. El delicado montaje realizado por Juan Pablo Rodr¨ªguez Frade incluye un v¨ªdeo en el que se detalla el trabajo del equipo de restauraci¨®n del museo y los descubrimientos m¨¢s interesantes sobre esta pintura. La exposici¨®n se podr¨¢ ver hasta el 26 de mayo. Despu¨¦s la obra volver¨¢ a su emplazamiento habitual.
Guillermo Solana, director art¨ªstico del Thyssen, ha se?alado este lunes que Santa Catalina, poeta y fil¨®sofa, fue una m¨¢rtir muy popular a la que, por vez primera, Caravaggio coloca la aureola de santidad en toda su carrera. Ser¨ªa para compensar la verdadera personalidad de la modelo, una cortesana que tuvo relaciones con Ranuccio Tomassoni, el hombre al que Caravaggio dej¨® sin vida despu¨¦s de cortarle el pene con su espada y del que algunos estudios se?alan que pudo ser el proxeneta de la chica. ¡°M¨¢s que la pintura de una santa¡±, opina Solana, ¡°es el ensayo del retrato de una modelo. Es algo similar a lo que Vel¨¢zquez hace con Las meninas, tambi¨¦n un experimento de retrato de un grupo familiar¡±. Esta obra es para Solana un retrato de madurez de Caravaggio, una obra maestra de las m¨¢s importantes de las alrededor de 40 obras que se conservan. En Espa?a solo hay cuatro caravaggios en colecciones p¨²blicas: en el Prado, en el Palacio Real, en el Museo de la Abad¨ªa de Montserrat y en el Thyssen de Madrid.
Ubaldo Serrano, director del Departamento de Conservaci¨®n-Restauraci¨®n del Thyssen, explica que el trabajo fundamental sobre el cuadro ha consistido en levantar las muchas capas de barniz que ocultaban importantes detalles de la pintura original. Lo primero que destaca es que se comprueba que Caravaggio no dibujaba previamente, salvo alg¨²n detalle. Temperamental como era, acomet¨ªa directamente su trabajo sobre el lienzo y no tardaba demasiado en su ejecuci¨®n. En este caso hay numerosos pentimenti o arrepentimientos. El m¨¢s visible descubierto gracias a la alta tecnolog¨ªa es que el vestido de la modelo fue primero pintado en rojo. Luego, puede que por idea del cardenal Francesco Maria del Monte, pagador de la obra, el vestido se torn¨® en color berenjena o azul pardo adornado con ricos bordados. Las manos de la modelo y sus dedos cambian de posici¨®n varias veces hasta tomar la forma definitiva. La espada que sujeta la santa y la rueda de clavos sobre la que ser¨ªa sacrificada, aparecen con diferentes cargas de humo en las reflectograf¨ªas infrarrojas.
Exposici¨®n en Par¨ªs
Esta etapa romana de Caravaggio es tambi¨¦n la protagonista de una de las exposiciones m¨¢s importantes de la temporada parisina: Caravaggio en Roma: amigos y enemigos, una muestra de nueve obras que se puede ver hasta el 28 de enero en el Museo Jacquemart-Andr¨¦. Un montaje muy teatral sirve para confrontar la obra del pendenciero artista con otros maestros como Orazio Gentileschi, Bartolomeo Cavarozzi, Annibal Carrache o Jos¨¦ de Ribera. En el recorrido por once habitaciones se muestran obras tan conocidas como San Juan Bautista (Joven con cordero), Judit y Holofernes, las dos Magdalenas en ¨¦xtasis cuya atribuci¨®n siempre est¨¢ en discusi¨®n o el Ecce homo, que firm¨® alrededor de 1605 y que para muchos representa sus propios tormentos personales.
En estos tiempos en los que la correcci¨®n pol¨ªtica y las dudas sobre los comportamientos privados est¨¢n teniendo repercusi¨®n en algunos ¨¢mbitos art¨ªsticos, se puede decir que la poco ejemplar vida de Caravaggio no ha afectado al inter¨¦s por su obra. Guillermo Solana compara al artista milan¨¦s con los Bacon o Freud del Londres de los setenta o al Jean-Michel Basquiat del Nueva York de los ochenta. ¡°Son artistas que vivieron la bohemia en los m¨¢rgenes y no procede un enjuiciamiento a posteriori. La vida de Caravaggio estuvo envuelta en sangre, pero yo creo que en los museos no se exponen las vidas privadas, sino las obras maestras y estas no tienen por qu¨¦ estar contaminadas de las actitudes personales¡±.
Tampoco cree Solana que las denuncias de machismo pudieran afectar a Picasso, por ejemplo. ¡°A la vista est¨¢ que no le est¨¢ afectando. Si lees una biograf¨ªa suya o de Gauguin, puede no parecerte bien, pero solo puedes pensar que no son un ejemplo a seguir. Como artistas no procede el cuestionamiento¡±.
Carmen Thyssen: ¡°Habr¨¢ acuerdo porque Espa?a se lo merece¡±
El pr¨®ximo d¨ªa 31 de diciembre se cumple el plazo dado por Carmen Thyssen al Gobierno espa?ol sobre la permanencia de su colecci¨®n personal de 429 obras depositadas de manera gratuita desde 2002. Esas obras se exponen junto a las adquiridas por el Estado espa?ol al bar¨®n Heinrich Thyssen-Bornemisza en 1993, en una operaci¨®n por la que se pagaron 350 millones de d¨®lares a cambio de 775 obras maestras que datan de los siglos XIII y XIV hasta las ¨²ltimas d¨¦cadas del XX. El plazo dado por la baronesa se cumpli¨® en julio pero un encuentro secreto con la vicepresidenta Carmen Calvo, el pasado 18 de junio, logr¨® un nuevo respiro temporal que ahora se agota. Durante la presentaci¨®n de la restaurada obra de Caravaggio, Cervera asegur¨® que no pod¨ªa adelantar nada pero que habr¨ªa acuerdo ¡°porque Espa?a se lo merece¡±. Venta, alquiler o dep¨®sito son las tres f¨®rmulas que se manejan. ¡°Mis abogados negocian con el ministerio y pronto sabremos algo¡±, se limit¨® a decir. El bufete de letrados que representa sus intereses es MA Abogados, propiedad de dos antiguos ministros del gobierno de Aznar, ?ngel Acebes y Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila.
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