?Y si el amor no lo puede todo?

De madrugada, en un restaurante ya cerrado y en penumbra, una pareja adulta se lanza a la disecci¨®n de una relaci¨®n amorosa, la suya, con la esperanza de encontrar un sentido a lo que les pasa. ?Y si solo el amor no lo puede todo? ?Qu¨¦ papel juega la admiraci¨®n, el paternalismo o el ¨¦xito? Luc¨ªa Carballal, madrile?a de 35 a?os y una de las voces m¨¢s sobresalientes de la dramaturgia espa?ola actual, pone el foco en un combate cara a cara entre un escritor de ¨¦xito y una novelista en ciernes en La resistencia, obra que surge de la beca en la primera convocatoria a autores contempor¨¢neos del Pav¨®n Teatro Kamikaze. La funci¨®n, protagonizada por Mar Sodupe y Francesc Garrido y dirigida por Israel Elejalde, se estrena en los Teatros del Canal este jueves hasta el pr¨®ximo d¨ªa 17 de febrero.

La vida literaria y el oficio de la escritura arropan la relaci¨®n de ese hombre y esa mujer, protagonistas de una pasi¨®n clandestina durante a?os, y que ahora repasan y se enfrentan a un retrato cargado de amor, pero tambi¨¦n de reproches y dolor. ¡°Quer¨ªa que los dos protagonistas tuvieran una profesi¨®n creativa, como la literatura, porque es un oficio donde es m¨¢s dif¨ªcil discernir entre lo privado y lo profesional. El novelista amplifica de alguna manera la obra al tener un foco p¨²blico¡±, asegura Carballal, autora de Los temporales o Una vida americana, durante un encuentro con el actor y director Israel Elejalde (Madrid, 1973) tras un ensayo en una sala del teatro. Elejalde ley¨® el texto ley¨® de un tir¨®n y la primera sensaci¨®n que tuvo fue que estaba ante una historia de terror, donde se asist¨ªa a un encuentro de profundo dolor. ¡±Su lectura me acongoj¨®, me arras¨®, me dej¨® herido. Hay algo macabro y, a la vez, profundamente humano en la obra. Uno va al teatro para esto, para encontrar esas cosas que uno ha so?ado que te pod¨ªan pasar o te han pasado por dentro y has esquivado¡±, explica Elejalde, que se enfrenta a su cuarta obra como director. ¡°Yo dirijo todas como si fueran la ¨²ltima. No s¨¦ si despu¨¦s de La resistencia dirigir¨¦ otra. Depende de si un texto me apela directamente¡±.

Carballal tuvo claro desde un principio que en su historia no cab¨ªan ni v¨ªctimas ni verdugos. Por ello, a lo largo de la funci¨®n uno se siente identificado con ambos personajes. A veces, ¨¦l parece un hombre paternalista, dif¨ªcil de sobrellevar, y otras veces sientes que es la v¨ªctima de ella, en el sentido de que le usa como excusa para no enfrentarse a sus propios retos. En el caso de ella, ves claro en ocasiones que tiene que salir de esa relaci¨®n en la que est¨¢ atrapada y otras en las que su vida no se entiende sin ¨¦l. ¡°El dolor de la funci¨®n surge tras comprobar el profundo amor que se tienen. Se adoran, pero surge el problema de la admiraci¨®n y eso es algo que no es voluntario. De la obra se desprende una potente pelea moral sobre el lugar que debe ocupar el amor sin m¨¢s¡±, explica Elejalde. Mucho han hablado autora y director sobre la admiraci¨®n como elemento importante en una relaci¨®n, no solo sentimental. ¡±No tengo respuesta y la obra tampoco la ofrece, porque para la mujer s¨ª hay una vinculaci¨®n entre amor y admiraci¨®n, algo que no le sucede a ¨¦l porque siente que su amor, indiscutible, es compatible con no admirar a su pareja profesionalmente¡±, a?ade Carballal.

La b¨²squeda de la felicidad y la independencia real de una mujer que no quiere ocupar los espacios del armario que su pareja le ofrece en esa habitaci¨®n ideal, el paternalismo masculino bajo la apariencia del amor o el paso del tiempo y la desaparici¨®n de la exultante belleza juvenil son otros de los temas que abarca esta brillante funci¨®n, en la que, sin tapujos, se afronta la valent¨ªa de rebelarse y cortar lazos, en medio de un bullicio externo de temas candentes como el feminismo y el machismo. Y el valor de las palabras, esas palabras que, como se dice en La resistencia, ¡°provocan comportamientos, pero no por eso debemos temerlas¡±. Por eso, durante los ensayos han tenido todos, actores, autora y director, muy presente que hay palabras que son como tirar un jarr¨®n contra el suelo. Cuando algo se rompe, es muy dif¨ªcil de pegar. La resistencia es una historia que no acaba. Lo que se acaba son las palabras.