Tratado del baile contra la crispaci¨®n social
El grupo Novedades Carminha publica 'Ultraligero', un ecl¨¦ctico disco donde se reivindica la m¨²sica ligera y el hedonismo pop
Hay premisas que suenan a declaraci¨®n de guerra, pero tambi¨¦n a puro cachondeo. ¡°Nos dijimos: ¡®Vamos a hacer un disco de baile y vamos a asaltar la puta divisi¨®n del pop espa?ol¡±, asegura con una risotada Carlos Pereiro Carlangas, cantante de Novedades Carminha. En este caso, esta premisa ilustra tambi¨¦n el esp¨ªritu macarra de un grupo que disfruta rompiendo moldes en el indie espa?ol. El resultado es Ultraligero, el ¨¢lbum m¨¢s ecl¨¦ctico de Novedades Carminha y todo un documento de hedonismo pop. ¡°Es nuestra reivindicaci¨®n de la m¨²sica ligera por bandera¡±, a?ade el bajista, Adri¨¢n D¨ªaz B¨®veda Jarri.
Los cuatro miembros de la banda charlan sobre su nuevo disco en el interior del Caf¨¦ Pav¨®n, en el barrio madrile?o de La Latina. Seg¨²n cuentan, Ultraligero se empez¨® a gestar justo cuando terminaron el anterior ¨¢lbum, Campeones del mundo, donde ya dieron un giro a su primigenio estilo guitarrero. ¡°La evoluci¨®n forma parte de nuestra forma de pasarlo bien¡±, comenta Carlangas. La diversi¨®n es un elemento caracter¨ªstico en la m¨²sica de Novedades Carminha desde que publicaron hace justo una d¨¦cada su primer disco, Te vas con cualquiera, grabado en un s¨®tano de la Plaza de Cascorro, muy cerca del Pav¨®n. Todos son gallegos, pero fue en Madrid donde coincidieron y formaron el grupo.
Aquel debut estaba compuesto por 15 canciones de no m¨¢s de dos minutos y medio elaboradas con guitarras aceleradas y letras irreverentes en un claro exponente del punk espa?ol. Pero, sobre todo, fue la carta de presentaci¨®n de una formaci¨®n que, con canciones como No uso cond¨®n, ?chame gel, Ensalada de ostias o Dame de beber,?se postulaba en la escena espa?ola con un descaro inusual, recordando a Siniestro Total. ¡°Entonces, ten¨ªamos muchas ganas de coger las guitarras, pasarlo bien y e ir a tomar unas cervezas. Seguimos con las mismas ganas. La esencia primaria no ha cambiado. Sigue siendo juntarse cuatro colegas y pasarlo de puta madre. Solo que ahora nos lo pasamos bien con otras cosas distintas que antes¡±, explica Carlangas.
Ahora lo pasan bien bailando y haciendo bailar. Ultraligero mezcla con el mismo descaro de siempre g¨¦neros como el rock, el pop, el funky, el hip-hop, la cumbia o el folclore gallego. ¡°Nos gusta mucho escuchar m¨²sica africana, sudafricana¡ M¨²sica de ra¨ªz, que tiene mucho que ver con el movimiento y con el baile. Ese fue el eje del disco¡±, dice el baterista, Xavi G. Pereiro. Sobre este eje, fueron conoci¨¦ndose adelantos que han tenido una gran acogida en el p¨²blico como Te quiero igual o A Santiago voy, un cl¨¢sico popular gallego que enraiz¨® en los oyentes de los sesenta gracias a la interpretaci¨®n de Los Tamara y al que ellos meten el autotune, y la colaboraci¨®n del d¨²o Esteban y Manuel, rompedores en su gusto por los ritmos latinos. ¡°Es un temazo¡±, dice Jarri. ¡°A Santiago Voy representa muy guay lo que somos ahora. Mis viejos me comentaban que, cuando esta canci¨®n sonaba en sus tiempos, era m¨²sica de verbena, incluso se entend¨ªa que era de paletos. No vend¨ªa intelectualidad, pero s¨ª emocionalmente calaba mucho a la gente con su letra. Pero de paletos nada. No veas c¨®mo est¨¢n arregladas las canciones de Los Tamara¡±, afirma Pereiro. ¡°Nuestras abuelas creen que es el primer ritmo bonito que hemos hecho¡±, a?ade Jarri entre risas.
Dicen que se siguen viendo como una banda de rock and roll, pero con una gran apertura de miras, tal y como hicieron antes referentes personales como The Clash o Mano Negra. ¡°Se convirtieron en algo m¨¢s que un grupo de rock¡±, asegura Jarri. ¡°Y como Manu Chao en solitario, que fue capaz de meter en la batidora un mont¨®n de propuestas y llevarlas a estadios¡±, apunta Carlangas, quien concluye: ¡°El baile es una de las grandes cosas que unifican a una sociedad¡±.
En este sentido, Ultraligero es un tratado de unificaci¨®n, sin perder la cr¨ªtica mordaz ¡ªcomo cuando se meten con los nacionalistas espa?oles en Obsesionada¡ª ni su particular romanticismo gamberro. ¡°Somos chulitos por fuera y blanditos por dentro. O como dir¨ªan Def Con Dos: ¡®Duro y a la enc¨ªa¡¯. Pero a la vez hay una carga emocional dentro¡±, explica Carlangas. ¡°Queremos que el momentito de escuchar Novedades Carminha sea un momento de puta madre, que te haga olvidar el actual clima de crispaci¨®n¡±, a?ade y aprovecha para recordar que la actual generaci¨®n no tiene los mismos prop¨®sitos art¨ªsticos que sus mayores: ¡°Si los indies de los noventa miraban a Jesus and Mary Chains, que es un band¨®n acojonante, nosotros miramos a lo popular. Somos la generaci¨®n siguiente a Los Planetas. Tiene que haber un relevo generacional en el pop¡±.
Un relevo que, si bien es cierto que ya existe, parece claro que pasa por otro tipo de sonoridades, como se puede ver por el ¨¦xito de Rosal¨ªa ¡ª¡°Nos gusta por su p¨¦rdida del prejuicio¡±¡ª o C. Tangana. Ritmos que incitan m¨¢s a mover el cuerpo, como tambi¨¦n propone el grupo gallego. ¡°Nuestro eslogan es: ¡®No es nuestra revoluci¨®n si no se puede bailar¡±, sostiene Pereiro. Parece que la revoluci¨®n ya ha comenzado, tal y como suelta Carlangas en otra premisa propia de Novedades Carminha: ¡°Venimos del punk, as¨ª que lo queremos todo y lo queremos ya¡±. Y todo pasa -c¨®mo no- por el baile.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.