Un baile colectivo con la fuerza del grupo

Tradicionalmente, los Ballets de Montecarlo reservan para la primavera sus estrenos m¨¢s notorios. El pasado jueves, 25 de abril, la compa?¨ªa monegasca puso en la amplia escena del Forum Grimaldi dos obras de gran formato y muy distintas, tanto en su est¨¦tica como en sus prop¨®sitos art¨ªsticos; el programa estar¨¢ en cartel hasta el domingo, 28. El gran estreno de clausura y cierre se lo reserv¨® para s¨ª mismo Jean Christophe Maillot, director de la compa?¨ªa de danza del principado, y abri¨® la velada la pieza comisionada al madrile?o Goyo Montero, titulada Atman, con m¨²sica electroac¨²stica del canadiense Owen Belton, nacido en Vancouver y colaborador habitual de la muy destacada core¨®grafa Crystal Pite. No es habitual comprometer en las dos obras de la noche a pr¨¢cticamente toda la plantilla de la agrupaci¨®n, pues eso, funcionalmente, representa un trabajo enorme de coordinaci¨®n y encaje. Montero, con 30 bailarines, y Maillot en Core meu con 40 artistas bajo el son sobrecogedor y envolvente en directo, muy r¨ªtmico, de Antonio Castrignan¨° y su conjunto Taranta Sounds.

Mientras el propio Montero firma luces y vestuario de su creaci¨®n, para su pieza, Maillot ha contratado al dise?ador de vestuario y artista pl¨¢stico espa?ol Salvador Mateo And¨²jar (ganador del Premio Nacional de J¨®venes Creadores de 1994), colaborador durante mucho tiempo de Pedro Moreno, Yvonne Blake y Jes¨²s de Pozo. Inspir¨¢ndose en el Mediterr¨¢neo, Maillot y Mateo And¨²jar dejan fluir una intensa gama de azules a Klein, pero matizados por el gris y otros tonos junto al blanco. Es un trabajo coral, arm¨®nico, no apto para puristas y que se puede resumir como de gran belleza. Es verdad que Maillot hace gui?os sutiles y muy inteligentes a Maurice B¨¦jart, dotando a las evoluciones de citaciones griegas, pero el resultado es de una din¨¢mica muy actual, dejando que la energ¨ªa de sus bailarines haga el resto. Al final, el p¨²blico culmin¨® en pie, coreando, bailando y a las palmas con las tarantas de Castrignan¨°, un m¨²sico que suma a su particular una decisiva renovaci¨®n de esas canciones tradicionales, empac¨¢ndolas de modernidad, pero sin perder nada de su esencia y su fuerza l¨ªrica.

Ambas piezas, Atman y Core meu vienen de experiencias precedentes, de experimentos formales que han permitido a los creadores ampliar el formato y pulir la idea inicial. Montero trabaj¨® con el mismo m¨²sico y con un grupo de 50 bailarines j¨®venes de compa?¨ªas sostenedoras del concurso de Lausana, y luego repiti¨® la experiencia con el Ballet de Pek¨ªn. Owen ha ampliado la m¨²sica para Montecarlo, con una combinaci¨®n de instrumentos convencionales y electr¨®nicos. Maillot, por su parte, en 2017 ya hab¨ªa buscado la implicaci¨®n del p¨²blico siempre con el soporte de las tarantas de Salento. Ahora el resultado se hace mucho m¨¢s espectacular y comunicativo.