Vacaciones
El mundo es como entrar en una enorme librer¨ªa. Es inabarcable. El mundo es un sombrero de ala ancha incomprensible
Ahora los espa?oles afortunados se ir¨¢n de vacaciones, pues llega el verano. Unos se ir¨¢n a las playas, otros a las grandes urbes, otros al pueblo. Necesitar¨ªa vivir 300 a?os para poder visitar las decenas de ciudades de la tierra y las decenas de playas y de monta?as que valen la pena ser contemplados. Si eliges Atenas, no eliges Valpara¨ªso. Si eliges Buenos Aires, no eliges San Petersburgo, si eliges Roma, no eliges Estocolmo. El mundo es como entrar en una enorme librer¨ªa. Es inabarcable. El mundo es un sombrero de ala ancha incomprensible. Yo me angustio en las librer¨ªas, y en las bibliotecas, y me angustio ante el globo terr¨¢queo. Hay cientos de pueblos de Extremadura, de Arag¨®n, de Castilla-La Mancha, de Galicia que no conozco. Me dicen que hay lugares desconocidos en Portugal que son tan bellos que te rompen el alma. Tentado estoy de no moverme ya nunca m¨¢s de mi habitaci¨®n, y as¨ª no sufrir de tanta inmensidad no pisada. Para conocer un pa¨ªs necesitas vivir en ¨¦l una vida entera. Tal vez ni viviendo una vida entera, tal vez seis vidas, una en cada siglo. Los pa¨ªses cambian m¨¢s que los seres humanos. Me sorprendo a m¨ª mismo, en conversaciones p¨²blicas o privadas, hablando y emitiendo juicios sobre pa¨ªses en los que he estado poco tiempo. Necesitar¨ªa vivir no 300 sino 600 a?os. De esos 600, gastar¨ªa 400 a?os en Italia, 150 a?os en Estados Unidos y 50 a?os en Rusia. Tal vez 25 en Rusia y si acaso los otros 25 en China, por ejemplo. Vivimos pocos a?os. No nos da tiempo de ver c¨®mo los pa¨ªses caminan tambi¨¦n sobre la vida, como si fuesen gigantes asustados. Nos iremos de vacaciones este verano intentando ver algo, eso queremos: ver algo. Tal vez al final me convierta en experto en aeropuertos y en habitaciones de hotel. No conozco Polonia. No conozco Australia. No conozco Sud¨¢frica. ?Es justo que muera sin ver docenas de ciudades que hubieran cambiado mi vida? ?Qu¨¦ es el turismo? ?Qu¨¦ son las vacaciones? Son el tiempo que nos regalan para visitar la grandeza de este planeta. No podemos invertir la vida entera en el conocimiento del mundo. De modo que al final me he hecho adicto a Google Maps. Muy adicto. All¨ª, en la pantalla del ordenador, sale el globo terr¨¢queo. Veo Chad, Uzbekist¨¢n, Yemen, Birmania, Camboya. Veo el mar de Bering, el mar de Labrador, el mar de Tasmania o la isla Isabela. Veo la isla de ?msterdam, que est¨¢ deshabitada, en medio del oc¨¦ano ?ndico, all¨ª, abandonada, como un mendigo del universo. Nunca ir¨¦ a esos sitios. Nadie ha conocido la tierra, tal vez Magallanes, ¨¦l la vio desnuda, ¨¦l la vio tal como hab¨ªa sido durante milenios. Magallanes, ¨¦l vio lo que ya nadie podr¨¢ ver jam¨¢s. Ni siquiera conozco el barrio en el que vivo, pues salgo poco. Para eso se inventaron las vacaciones, para recordarnos que nos vamos de este mundo sin ver el mundo. A veces entro en una agencia de viajes y a la pregunta ¡°?Ad¨®nde desea viajar, se?or?¡±, contesto ¡°A cualquier sitio¡±.
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