El Gobierno da la puntilla a la nuclear al excluirla de las ayudas del nuevo mercado de capacidad

El Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico lanz¨® el mi¨¦rcoles a consulta p¨²blica la esperada orden por la que se crea un mecanismo o mercado de capacidad por el que las instalaciones el¨¦ctricas recibir¨¢n una retribuci¨®n a cambio de estar disponibles cuando el sistema el¨¦ctrico atraviese situaciones cr¨ªticas, como ocurri¨® la semana pasada por las bajas temperaturas y la casi ausencia de renovables. Seg¨²n el texto, tendr¨¢n derecho a optar a este servicio los generadores de electricidad (incluso las plantas en proyecto), el almacenamiento, los consumidores, las comercializadoras y la nueva figura del agregador, a trav¨¦s de tres tipos de subastas: principales, transitorias y de ajuste. Sin embargo, para sorpresa del sector, el ministerio ha excluido de la medida, de forma subrepticia, a la energ¨ªa nuclear.

La sorpresa ha sido doble, teniendo en cuenta que lo que se va a subastar es potencia firme (la que garantiza que la instalaci¨®n estar¨¢ disponible en momentos de estr¨¦s del sistema) y que la nuclear es la energ¨ªa m¨¢s firme, tras los ciclos combinados de gas, con casi un 100% de las horas disponible salvo los periodos de recarga del combustible.

Fuentes empresariales entienden que se haya dejado fuera a las plantas de carb¨®n, ya que la Uni¨®n Europea, para autorizar este mecanismo ¡ªque lleva impl¨ªcita una ayuda de Estado¡ª exige que se respeten los objetivos de descarbonizaci¨®n. Las pocas centrales t¨¦rmicas de este tipo que quedan en Espa?a no podr¨¢n acudir a las subastas de capacidad, ya que la orden veta expresamente a las que emitan m¨¢s de 550 gramos de CO? por kilovatio hora (KWh).

En el caso de la nuclear, la orden la expulsa de una manera indirecta (no se la cita), porque adem¨¢s de la disponibilidad se impone un coeficiente de flexibilidad que este tipo de plantas no tiene. Seg¨²n el texto, ¡°la convocatoria de la subasta de capacidad incluir¨¢ un umbral de flexibilidad que las instalaciones de producci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica no renovable que participen deben de superar, en funci¨®n de su propio coeficiente de flexibilidad¡±. A su vez, se define el coeficiente de flexibilidad ¡°como el cociente entre la energ¨ªa movilizada a trav¨¦s de los mercados de balance y la energ¨ªa efectivamente producida¡±. En otras palabras, las centrales nucleares no dan servicios de balance, que las obligar¨ªa a subir y bajar la producci¨®n, algo que no pueden. Estas instalaciones, a diferencia de los ciclos combinados, solo casan en los mercados diario e intradiario. El Gobierno asegura en la propuesta que esta flexibilidad es necesaria ¡°para contribuir a la mayor integraci¨®n de renovables en el sistema el¨¦ctrico¡±.

Dada la situaci¨®n en la que se encuentra el parque nuclear espa?ol, con un calendario de cierre ordenado hasta 2035 y con una nueva tasa de gesti¨®n de los residuos radiactivos y el desmantelamiento que Endesa e Iberdrola (las propietarias mayoritarias de estas centrales) se preparan para llevar a los tribunales. Aunque las siete nucleares que a¨²n funcionan no registran p¨¦rdidas, carecen, sin embargo, del margen suficiente para invertir en la extensi¨®n de su vida ¨²til, en el caso de que as¨ª lo decidiesen.

El calendario, un memorando de 2018 firmado entre las el¨¦ctricas y la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa, que depende de Transici¨®n), no es de obligado cumplimiento. El Gobierno, se?alan fuentes del mercado, ha apostado por ciclos combinados de gas, a los que ha dado visibilidad para el futuro con las ayudas que vienen reclamando desde hace a?os, y ha preferido darles el dinero que se niega a las nucleares. Todo ello, a pesar de que estas centrales de gas son emisoras de CO? y las nucleares no.

Decisi¨®n discriminatoria

Todo apunta a que la medida supone una discriminaci¨®n entre tecnolog¨ªas ante la que Endesa e Iberdrola alegar¨¢n en contra con toda seguridad en la consulta p¨²blica abierta hasta el 29 de enero y no se descarta que la lleven finalmente a los tribunales. No habr¨ªa sido discriminatoria, a?aden las mismas fuentes, si el citado coeficiente de flexibilidad afectara a todas las energ¨ªas, pero deja expresamente fuera a las renovables porque, de lo contrario, habr¨ªa perjudicado especialmente a la e¨®lica, que apenas tiene dicha flexibilidad.

Se da la circunstancia de que en la propuesta de orden similar que el ministerio propuso a mediados de 2021 (que fue paralizada a ra¨ªz de la crisis energ¨¦tica y las fuertes subidas de precios) no figuraba la exclusi¨®n de las nucleares que ahora se recoge en el texto sometido a audiencia.

A falta de un desarrollo reglamentario, las el¨¦ctricas, a trav¨¦s de la asociaci¨®n sectorial Aelec, manifestaron el mi¨¦rcoles su satisfacci¨®n por el paso adelante que supondr¨¢ la orden ministerial, que despeja el futuro de los ciclos combinados, lo que beneficia a Naturgy. El Gobierno pretende que las primeras subastas se celebren antes del pr¨®ximo verano, aunque el texto debe recibir a¨²n el visto bueno de la Comisi¨®n Europea. Las subastas ser¨¢n a sobre cerrado, no mediante el sistema del reloj, como las de las renovables, lo que garantizar¨¢ que no se salde a precio cero.

La subasta principal ser¨¢ a cinco a?os (hasta que no pase ese plazo no estar¨¢n obligadas a la disponibilidad) y para cubrir ese periodo se celebrar¨¢, de forma simult¨¢nea, una subasta transitoria, que al sexto a?o desaparecer¨¢ y quedar¨¢ solo la principal, que ser¨¢ m¨¢s competitiva. En ella podr¨¢n participar instalaciones existentes y nuevos proyectos de renovables, almacenamiento o demanda que vayan a prestar servicio a partir de la fecha que fije la convocatoria. Por ¨²ltimo, se celebrar¨¢n subastas de ajuste a corto plazo (para 12 meses), que deber¨¢n ofrecer menos capacidad firme que las principales, con las que convivir¨¢n.

Tambi¨¦n quedar¨¢n excluidas, en este caso porque ya reciben otras ayudas hist¨®ricas, las plantas del Recore (renovables, cogeneraci¨®n y residuos) con derecho a retribuci¨®n espec¨ªfica y los ciclos combinados que perciben los antiguos pagos por capacidad, que suman una potencia de 4.000 MW. Dado que el objetivo de estas ayudas y las del nuevo mecanismo de capacidad es cubrir los costes fijos de las instalaciones, en ambos casos ya se cumple.