Podemos y Haw¨¢i

La primera vez que le pidieron la mano a Elisardo Bastiaga fue durante el concierto de Calamaro en el Bot¨¢nico de Madrid, concretamente cuando sonaba Cr¨ªmenes perfectos, que tambi¨¦n manda carallo, y dijo s¨ª dando tantos saltos de alegr¨ªa que la pe?a pens¨® que estaba feliz por haberle tocado crecer entre paranoia y dolor. Cuando acab¨® el concierto, su novia le fue a Calamaro a decirle que hab¨ªa pasado algo muy especial, y mientras ¨¦l miraba al suelo muerto de amor, la chica cont¨® que no s¨¦ qu¨¦ hostias de canci¨®n le hab¨ªa recordado a no s¨¦ qu¨¦ movida de la universidad, y que gracias, que por eso el concierto no lo olvidar¨ªa nunca m¨¢s.?

Bastiaga cort¨®. Al menos el compromiso de matrimonio, del que por supuesto ella no se acordaba, aunque luego trat¨® de hacer memoria y ya s¨ª, que pens¨® Bastiaga: ¡°Madre m¨ªa¡±. As¨ª que al concierto de Leiva y Ferreiro en San Vicente do Mar (O Grove) no fue mi amigo por prudencia, si bien conociendo los impulsos matrimoniales de su novia le cedi¨® su entrada al padre de ella. No se libr¨® del todo, porque en mitad de El equilibrio es imposible le escribi¨® para decirle que hab¨ªa que casarse, y a¨²n estaba escribiendo cuando Bastiaga puso el modo avi¨®n. Luego volvi¨® a entrar en Whatsapp, dijo que ¡°por supuesto¡± y al acabar el concierto ella se pon¨ªa a silbar No te preocupes por m¨ª cada vez que ¨¦l le mencionaba la boda.

¡ª Es como Novia a la fuga, pero buscando el cuerpo a cuerpo, le dije a Bastiaga.

¡ª Ya me hab¨ªa pasado algo muy parecido, dijo Bastiaga, que siempre le pasaba lo mismo que a ¨¦l mismo, pero m¨¢s: un pasado insondable.

Est¨¢bamos los dos en Villalustre, ¨¦l enganchado al iPad porque Podemos hab¨ªa hecho una nueva oferta al PSOE para formar Gobierno. Recibi¨® una llamada ¡°de Madrid¡± y tendr¨¢ que volver ¡°en el primer avi¨®n¡±, dijo mientras merendaba unas olivas con una camisa hawaiana. Elisardo Bastiaga era asesor de negociaciones para la formaci¨®n del Gobierno, influencer de 99 followers en Instagram y, sobre todo, un se?or que se tomaba la vida con calma. De esos que esperan a pedirte la mano en los bises, y si no hay bises, a joderse.

¡ª A m¨ª no me gusta mezclar el amor con la pol¨ªtica, no digamos ya con la m¨²sica, pero Podemos y PSOE viven en una canci¨®n que no saben bailar. Y cuando la bailan y se termina, hacen como que no pas¨®, avergonzados. ?Te suena? (pregunt¨® humill¨¢ndose, que no hac¨ªa falta humillarse). Yo el d¨ªa que me case ser¨¢ cuando pongamos de acuerdo a la izquierda de este pa¨ªs; f¨ªjate la confianza que tengo, que no tengo ni novia. Pero del mismo modo que cuando quer¨ªa fidelidad en mi pareja le propon¨ªa una relaci¨®n abierta, porque en el sexo pasa como con las drogas, que si no est¨¢ prohibido ya no nos apetece, as¨ª pienso de la pol¨ªtica, donde lo que entusiasma no es el compromiso ni la boda, sino la canci¨®n en la que piensas que todo va a ir bien antes de salir corriendo.

¡ª Qu¨¦ buen Mairena, pens¨¦, si tuviese delante un buen Machado.