Amor sin clases en la India

Que en apenas un mes hayan llegado a la cartelera espa?ola dos pel¨ªculas indias con patrones sociales, tonales y art¨ªsticos semejantes no parece casualidad.

Desde el punto de vista del pa¨ªs asi¨¢tico, una nueva generaci¨®n de cineastas, algunos de ellos forjados en Occidente, est¨¢ intentando desmontar arraigadas convenciones sociales respecto del amor, el matrimonio y la acerada estratificaci¨®n de las clases. Ritesh Batra, director de Tu fotograf¨ªa, de familia de clase media y nacido en 1979, estudi¨® en su pa¨ªs, fue becado en EE UU, gan¨® dinero como economista y renunci¨® a su profesi¨®n por su antiguo sue?o de hacer cine. Y Rohena Gera, de familia de clase alta, nacida en 1973 y formada en la universidad estadounidense de Stanford, hab¨ªa comenzado escribiendo melodramas sin fuste para otros realizadores en su pa¨ªs, pero cuando se ha decidido a dar el salto a la direcci¨®n ha abandonado el habitual grosor festivo y popular de Bollywood para ser punzante en su afilada cr¨ªtica. Primero, con un documental sobre las habituales presiones de los padres respecto de los casamientos de los hijos, What¡¯s Love Got To Do With It? (2013), y despu¨¦s con una notable ficci¨®n, Se?or, presentada en la Semana de la Cr¨ªtica de Cannes 2018.

Mientras, desde el punto de vista espa?ol, tambi¨¦n parece evidente el inter¨¦s por el exotismo de un pa¨ªs y una sociedad muy alejada de la nuestra, pero que al mismo tiempo exporta un muy particular modo interior de circular por la existencia, que lleva a no pocos giros vivenciales m¨¢s o menos impostados.

Las biograf¨ªas de ambos autores no son balad¨ªes: sus respectivas pel¨ªculas, Tu fotograf¨ªa y Se?or, parecen una meridiana respuesta a lo vivido en una tierra de enormes desigualdades econ¨®micas y de g¨¦nero, de dificultosa (por no decir imposible) mezcla de culturas, de castas y de clases sociales. Una potencia econ¨®mica y cient¨ªfica llena de pobres y de maltratos a la mujer, de ¨¦lites y de campesinos analfabetos. Y ah¨ª entra precisamente Se?or, con una historia de amor entre un adinerado miembro de la ¨¦lite de Bombay y su sirvienta (hablar de empleada de hogar aqu¨ª ser¨ªa risible), procedente de una familia campesina a la que env¨ªa dinero con regularidad.

Un proceso sentimental que la directora narra con sosiego y verosimilitud, delicadeza y turbaci¨®n, y en el que ella pasa de ser un mueble m¨¢s del piso de lujo del joven arquitecto a configurarse como apoyo afectivo de rotunda sencillez. Y aunque a Gera, procedente del guion, se le note en alg¨²n momento que su puesta en escena es m¨¢s esforzada que expresiva en lo art¨ªstico, la pel¨ªcula logra emocionar desde una sutileza calmada que, adem¨¢s, destaca en su doble composici¨®n de actitudes en cada una de las franjas sociales: los que disfrutan o simplemente se conforman con lo que tienen, y los dispuestos a luchar para cambiar la situaci¨®n. Y, a diferencia de Batra, desesperanzado respecto de una posible revoluci¨®n, Gera a?ade un toque de abierto optimismo.