La derrota de las generaciones
Daniel Serrano aborda en su primera novela el conflicto generacional entre padres e hijos mediante un esbozo de la historia reciente de Espa?a
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¡°Somos una generaci¨®n que siempre pierde¡±.
Esta reflexi¨®n del protagonista principal de la novela Cal viva bien podr¨ªa ser el resumen del relato que Daniel Serrano present¨® en p¨²blico la semana pasada. Se trata de una primera novela, con m¨¢s virtudes que defectos de aquellos en los que habitualmente incurren las ¨®peras primas. El acto de presentaci¨®n, en el que participamos Pablo Iglesias y quien esto escribe, sirvi¨® como era de esperar para que los fabuladores de turno buscaran conspiraciones e intrigas all¨ª donde no exist¨ªa sino una convocatoria en torno a la literatura. Y precisamente en lo referente a una cuesti¨®n que el propio autor evocaba en la nota que me envi¨® solicitando mi presencia: ¡°La luz generacional que tienen las narraciones verdaderamente emocionantes¡±.
El protagonista aspira a recuperar la fe revolucionaria traicionada por su progenitor
No estoy seguro de que esto sea siempre as¨ª, pues hay inmortales obras de ficci¨®n que son exclusivo fruto de la imaginaci¨®n de quienes las escriben, sin que reflejen para nada sus experiencias o sentimientos personales. Pero es frecuente que los primeros pasos de un narrador novel busquen a un tiempo, incluso involuntariamente, la introspecci¨®n sobre s¨ª mismo y la descripci¨®n de su entorno m¨¢s cercano. A este g¨¦nero literario es a lo que algunos llaman novela generacional, que en el caso que nos ocupa pretende, en palabras del propio Serrano, contar ¡°una historia de padre e hijos, pero tambi¨¦n un esbozo de la historia reciente de Espa?a realizado con fragmentos de una memoria sentimental¡±.
El relato exhibe una fortaleza narrativa considerable, capaz de atraer la atenci¨®n del lector desde sus primeras l¨ªneas. Utiliza un lenguaje directo a base de recrear diferentes voces de distintas edades, en las que sobresale una reflexi¨®n colectiva sobre el devenir de la izquierda durante la transici¨®n pol¨ªtica espa?ola. Tambi¨¦n, y sobre todo, acerca de lo que en mi opini¨®n el protagonista considerable indudable: su fracaso. El conflicto generacional tiene lugar entre un antiguo militante del FRAP, grup¨²sculo marxista leninista partidario del uso de la violencia, que acaba convirti¨¦ndose a la socialdemocracia, y su hijo. Este aspira a recuperar la fe revolucionaria traicionada por su progenitor a cambio de un puesto en el Gobierno, y con quien rompe toda comunicaci¨®n durante a?os. El devenir de ambos, mezclado con una abarrotada sucesi¨®n de acontecimientos en la vida pol¨ªtica espa?ola, compone la partitura de una composici¨®n coral en la que se utilizan reflexiones, notas extraviadas, extractos de diarios, cartas y recuerdos. Supongo que el t¨ªtulo de la novela, que hace referencia a una conocida frase del l¨ªder de Podemos pronunciada en sede parlamentaria, servir¨¢ para animar las ventas o al menos la curiosidad del mercado. Pero la obra no versa sobre el terrorismo de Estado; tampoco sobre los asesinatos por parte de la polic¨ªa de los terroristas etarras Lasa y Zabala, suceso que caus¨® gran conmoci¨®n en su d¨ªa, ni son estos hechos los que constituyen la principal denuncia de las muchas que recorren sus p¨¢ginas. El n¨²cleo fundamental reside en el conflicto interno entre dos concepciones del devenir reciente y el papel de la izquierda en nuestro pa¨ªs, que en absoluto oculta una cr¨ªtica feroz, aunque de brocha gorda, del PSOE y su rol en la construcci¨®n del nuevo r¨¦gimen. O sea, de lo que el joven protagonista considera una traici¨®n de su padre a los ideales que un d¨ªa le animaron.
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Desde el punto de vista generacional, el libro tiene inter¨¦s para comprender algunos aspectos del ?15-M y sus secuelas; tambi¨¦n la frustraci¨®n de las formaciones marxistas, a menudo representada hoy por las ingenuas declaraciones del l¨ªder de Izquierda Unida. No se contempla, empero, el formidable impacto que tuvo en las conciencias de izquierda la demolici¨®n del muro de Berl¨ªn y la hecatombe del llamado imperio sovi¨¦tico. La vida de los personajes est¨¢ pre?ada de un sorprendente esp¨ªritu provinciano, aunque sea Madrid el lugar donde suceden los hechos. Y en la reflexi¨®n que los protagonistas hacen sobre su propio deterioro moral y pol¨ªtico no emerge en ning¨²n momento una idea de la transici¨®n espa?ola como reconciliaci¨®n entre vencedores y vencidos de la Guerra Civil.
Pero una novela no es un tratado de historia ni un documental de la realidad. Precisamente por ello, las ausencias y vac¨ªos de sus personajes nos permiten entender mejor algunos aspectos de la crisis pol¨ªtica que hoy mismo padecemos. Luce la vocaci¨®n del autor por exponer sentimientos, sin necesidad de justificar por eso renuncias y fracasos morales. Sobresalen los episodios de traici¨®n entre militantes de los diferentes partidos comunistas; las debacles amorosas a veces explicadas por convicciones o acciones pol¨ªticas; el culto a la ideolog¨ªa frente a la plasmaci¨®n de la realidad, y la denuncia del pragmatismo como una corrupci¨®n en vez de un homenaje al compromiso pol¨ªtico. No se puede decir que el lector vaya a disfrutar de sus p¨¢ginas porque es un relato duro, desesperanzado y amargo, aunque merodee la b¨²squeda imposible de un final feliz. Pero no perder¨¢ el tiempo embebi¨¦ndose en su lectura, y le resultar¨¢ imposible perder el hilo del relato o seguirlo a plazos, habida cuenta de la habilidad y el poder narrativo de la prosa de Daniel Serrano. Que acaba por echar una paletada de cal viva a los sue?os de toda una generaci¨®n.
Cal viva. Daniel Serrano. Suma, 2019. 384 p¨¢ginas. 17,90 euros.
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