La obra sobre el paisaje y la memoria de Montserrat Soto, premio Nacional de Fotograf¨ªa
El jurado destaca del trabajo de la artista barcelonesa, de 58 a?os, su "peso de orden pol¨ªtico, antropol¨®gico y social"
La artista barcelonesa Montserrat Soto, de 58 a?os, ha sido distinguida este viernes con el Premio Nacional de Fotograf¨ªa, que concede el Ministerio de Cultura y Deporte y est¨¢ dotado con 30.000 euros. Soto, que no solo trabaja la fotograf¨ªa, sino tambi¨¦n el v¨ªdeo, las instalaciones y la escultura, ha recibido el galard¨®n por su "preocupaci¨®n por la ecolog¨ªa y la memoria, que otorga a su trabajo un peso de orden pol¨ªtico antropol¨®gico y social", ha destacado el jurado en su comunicado. "Ha sido una sorpresa cuando me han llamado", ha dicho Soto por tel¨¦fono a EL PA?S, muy contenta.
En esa frase del jurado est¨¢n sus ¡°dos l¨ªneas de trabajo¡±, como ha reconocido Soto, que normalmente muestra su obra en series. Por un lado, su fotograf¨ªa aborda "los espacios del arte, los lugares del acto creativo; as¨ª como la censura y la autocensura del artista, hasta llegar a Internet". Un ampl¨ªsimo ¨¢mbito que ella define como "la memoria relacionada con la historia".
La otra l¨ªnea creativa es "el paisaje a trav¨¦s del viaje". "He recorrido espacios habitados y no habitados, abruptos, urbanos y periferias... De hecho, estoy terminando una serie que parte de esto y en la que llevo trabajando 10 a?os. He estado en Siria, Namibia, Sao Paulo, La Habana, T¨²nez, Madrid... del hombre n¨®mada al hombre sin lugar". Es lo que el jurado ha descrito como el "compromiso con los espacios habitados y con las presiones que ejercen sobre las personas que los ocupan". El Nacional de Fotograf¨ªa, que podr¨¢ celebrar en Albarrac¨ªn (Teruel), donde ha acudido como ponente en el Seminario de Fotograf¨ªa y Periodismo que organiza cada a?o el reportero Gervasio S¨¢nchez, le ayudar¨¢ a acabar este trabajo monumental, que ha bautizado como Doomcity, del que espera que atraiga la atenci¨®n de un centro adecuado, con amplio espacio para exponerlo porque ya tiene "nueve libros de im¨¢genes m¨¢s esculturas, banderas, fotos, videoinstalaciones¡¡±.
Para Soto, ¡°la fotograf¨ªa es un medio¡±. ¡°Claro que tiene un lenguaje particular, que permite a partir de la imagen repensar lo que ves e ir a otros lugares. Son como lienzos que permiten introducirte en ellos¡¡±. Pero su forma de trabajar se basa en crear archivos. ¡°Ello me permite guardar y analizar, y cuando tengo el archivo hecho, pienso en c¨®mo mostrarlo, normalmente con fotograf¨ªas, pero pueden ser miles de im¨¢genes, documentos¡ luego selecciono y hago mi serie". "No soy una fot¨®grafa tradicional".
La vida en un pueblo
Tambi¨¦n le ayuda a esta laboriosa forma de crear el poder vivir desde hace a?os en una peque?a localidad de Burgos (Gumiel de Iz¨¢n), que no llega a los 600 habitantes. Soto necesita ¡°espacio para pensar y desarrollar una idea hasta el final. Las interrupciones constantes de la gran ciudad no lo permiten. Estar en este lugar, con una vida social tranquila, ha sido una consecuencia de mi trabajo". Precisamente, la forma de vida de los artistas ha cambiado desde la gran crisis econ¨®mica, afirma. "Son muy pocos los que pueden vivir de su trabajo. Somos precarios", dice entre risas. ¡°Si te dedicas a esto, te absorbe tanto que es dif¨ªcil tener otras actividades para poder vivir mejor¡±.
El a?o pasado, Soto sali¨® de su retiro burgal¨¦s para mostrar en PHotoEspa?a su serie Imprimatur, en la Sala Alcal¨¢ 31 de Madrid. Se trataba de un gran collage con fotos de pinturas y textos, una investigaci¨®n sobre la iconograf¨ªa del libro en la pintura.
Soto es la sexta mujer -la tercera en los ¨²ltimos cuatro a?os- que recibe el Nacional de Fotograf¨ªa desde que se instaur¨® en 1994. Nacida en Barcelona, en 1961, estudi¨® pintura en la Escola Massana y en la ?cole Sup¨¦rieure d¡¯Art de Grenoble (Francia). A principios de los noventa inici¨® su trayectoria, tanto en la fotograf¨ªa y v¨ªdeo. En 1993 tuvo su primera exposici¨®n individual, en el Espai 13 de la Fundaci¨®n Joan Mir¨® (Barcelona). Desde entonces, su obra se ha podido ver, entre otros centros, en La Caixa (Barcelona), Koldo Mitxelena (San Sebasti¨¢n), Fundaci¨®n Telef¨®nica (Madrid), Museo Reina Sof¨ªa (Madrid), Centre d?Art la Panera (Lleida), Museo Patio Herreriano (Valladolid), Centre d¡¯Art Santa M¨°nica (Barcelona), Fundaci¨®n L¨¢zaro Galdiano (Madrid) o el Museo de Zaragoza.
Adem¨¢s, en los ¨²ltimos a?os ha colaborado en proyectos relacionados con la poes¨ªa, el teatro y el cine, como el Festival de Poes¨ªa en el Palau de la M¨²sica con una instalaci¨®n multimedia; asimismo cre¨® la escenograf¨ªa de la obra teatral Las tierras de Alvargonz¨¢lez, en el Mar¨ªa Guerrero de Madrid, y junto a la directora de cine Chus Guti¨¦rrez realiz¨® el cortometraje Las que viven en la niebla, en el que fue la autora de un guion que cuenta la historia de superaci¨®n de varias mujeres africanas.
El jurado de la 25? edici¨®n del Premio Nacional de Fotograf¨ªa estuvo presidido por Rom¨¢n Fern¨¢ndez-Baca Casares, director general de Bellas Artes, actu¨® como vicepresidenta Bego?a Torres Gonz¨¢lez, subdirectora general de Promoci¨®n de las Bellas Artes, y ha estado formado por Carlos Gollonet Carnicero, conservador jefe de Fotograf¨ªa del ?rea de Cultura de Mapfre; Javier Vallhonrat Ghezzi, fot¨®grafo; Laura Terr¨¦ Alonso, comisaria de exposiciones; Sem¨ªramis Gonz¨¢lez Fern¨¢ndez, historiadora y comisaria independiente, y Gloria Oyarzabal Lodge, fot¨®grafa.
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