Ast¨¦rix, seis d¨¦cadas de resistencia
El personaje de Goscinny y Uderzo celebra 60 a?os con un nuevo ¨¢lbum y un libro homenaje, mientras afronta rese?as irregulares y dudas sobre su futuro
Debi¨® de haber fiesta, anoche, en la aldea gala. Se asaron jabal¨ªes y corrieron r¨ªos de cervezas. El bardo Asurancet¨²rix fue el ¨²nico que no pudo disfrutarlo: se pas¨® la velada amordazado y atado, por si se le ocurr¨ªa arrancarse a cantar. La ocasi¨®n bien merec¨ªa tanto entusiasmo, incluso m¨¢s que una victoria sobre los romanos: era el cumplea?os del vecino m¨¢s conocido del pueblo. Aunque, en realidad, festejaban casi todos: Ast¨¦rix naci¨® el 29 de octubre de 1959, en la revista Pilote, de la mente de Ren¨¦ Goscinny y los l¨¢pices de Albert Uderzo; pero en aquellas primeras vi?etas ya aparec¨ªan Ob¨¦lix y muchos de sus amigos.
Para tener seis d¨¦cadas, el galo bigotudo se mantiene en plena forma. Y eso que se le ha multiplicado el trabajo: sale en pel¨ªculas, videojuegos, exposiciones, todo tipo de merchandising y hasta le han dedicado un parque tem¨¢tico. Y luego, claro, est¨¢n los c¨®mics: su tebeo es el m¨¢s traducido de la historia ¡ªa 111 idiomas¡ª, ha vendido m¨¢s de 365 millones de copias y justo acaba de sumar a su saga el ¨¢lbum n¨²mero 38: La hija de Vercing¨¦torix, donde Ast¨¦rix lidia tambi¨¦n con los problemas de la adolescencia.
Aunque el libro ha recibido algunas cr¨ªticas muy duras. Hay incluso quien insin¨²a que tal vez a los galos les haya llegado la hora de la jubilaci¨®n. Tras ganar un oro ol¨ªmpico y superar las 12 pruebas de C¨¦sar, puede que su ¨¦xito arrollador haya fatigado a Ast¨¦rix. Los galos que resistieron a los romanos afrontan otra amenaza invasora: la sobreproducci¨®n. Sin la ayuda de Panoramix, ni de los creadores originales ¡ªGoscinny falleci¨® y Uderzo, con 93 a?os, se ha apartado¡ª al guionista Jean-Yves Ferri y el dibujante Didier Conrad les toca buscar la poci¨®n m¨¢gica que garantice un futuro pr¨®spero a la aldea.
En sus manos, eso s¨ª, tienen a un mito. Estos d¨ªas tambi¨¦n se publica Generaciones Ast¨¦rix (Salvat), donde grandes autores del c¨®mic, de Guy Delisle a Milo Manara, de Julie Maroh a Val¨¦rie Vernay, homenajean con sus palabras y su arte al icono galo. ¡°Sus primeros n¨²meros ten¨ªan todo lo que podr¨ªa incluir un buen tebeo: humor, documentaci¨®n, un gran dibujo y un guion con distintas lecturas y gui?os para todas las edades. No pretend¨ªa ser una obra de autor, sino llegar a todo tipo de p¨²blico. Y se ha convertido en un icono¡±, se suma a las celebraciones Paco Roca, Premio Nacional de C¨®mic en 2008 por Arrugas.
¡°Creo que la clave del ¨¦xito de Asterix (y su resistencia al paso del tiempo, sus historias de rabiosa actualidad a pesar de estar ambientadas en la ¨¦poca del Imperio romano...) es el genio narrativo de Goscinny. Y su base, sobre todas las cosas, era la iron¨ªa¡±, agrega Alfonso Zapico, que obtuvo el Nacional de C¨®mic en 2012, por Dublin¨¦s. Aunque, en sus arranques, el guionista de origen jud¨ªo y el dibujante italo-franc¨¦s no ten¨ªan mucho de que re¨ªrse. Se conocieron, se gustaron y decidieron crear un c¨®mic nuevo, distinto. Durante a?os, sin embargo, solo lograron apuros econ¨®micos. Sobrevivieron gracias a las ¡°croquetas enormes¡± de la madre italiana de Uderzo, como cont¨® el propio autor.
Finalmente, idearon un hombrecillo mucho m¨¢s bajo y delgado que los superh¨¦roes tradicionales, pero igual de resistente. Le bautizaron con un nombre que empezara por A, para que fuera el primero en las estanter¨ªas. Y le colocaron al lado a una monta?a humana inspirada en Lennie Small (De hombres y ratones, de Steinbeck). Fue todo un hallazgo: Ast¨¦rix empez¨® su camino hacia el mito. Y Ob¨¦lix empez¨® a robar los corazones de los fans. Hace tiempo, hasta gan¨® una encuesta sobre ¡°el personaje m¨¢s sexy de la saga¡±, seg¨²n la web oficial. ¡°Ob¨¦lix es una creaci¨®n impresionante¡±, se rinde Pablo Auladell, Nacional de C¨®mic de 2016, por El para¨ªso perdido.
¡°Es un c¨®mic muy bien hecho. El guion va m¨¢s all¨¢ del humor y Uderzo es un dibujante y caricaturista de los grandes¡±, contin¨²a Auladell. Los tres espa?oles destacan Asterix y Cleopatra, Ast¨¦rix Legionario o La gran zanja, entre otras cumbres creativas. Y Roca rememora sus contactos primerizos con los galos: ¡°Eran c¨®mics caros, as¨ª que sol¨ªa ser el regalo de Navidad o del cumplea?os. Ten¨ªas uno o dos al a?o, daba tiempo a mirarlos una y otra vez. Deben de ser de los que m¨¢s he le¨ªdo. Tambi¨¦n los dibuj¨¦ y copi¨¦ much¨ªsimo¡±.
¡°Goscinny retrataba en Ast¨¦rix la sociedad de su ¨¦poca, en sus ¨¢lbumes vemos veladas cr¨ªticas al capitalismo salvaje, a los nacionalismos, a los imperialismo, a la corrupci¨®n, a los clich¨¦s identitarios...¡±, insiste Zapico. Prueba de su impacto es que el guerrero galo ha sido considerado tanto s¨ªmbolo de la resistencia anticapitalista como ¡°un tipo de derechas, encarnaci¨®n del individualismo¡±, seg¨²n el ensayo Le complexe d¡¯Ast¨¦rix, del analista franc¨¦s Alain Duhamel.
No es la ¨²nica controversia. Cuando Goscinny falleci¨®, en 1977, Uderzo sigui¨® adelante en solitario. ?l mismo reconoci¨®, a?os despu¨¦s, que sus guiones no eran tan buenos como los de su amigo. En principio, los padres de Ast¨¦rix hab¨ªan pactado que su criatura no les sobrevivir¨ªa. Pero Uderzo cambi¨® de idea: dijo que el personaje pertenec¨ªa ya a los lectores y ¨¦l no pod¨ªa privarlos de m¨¢s aventuras.
A la vez, Uderzo protagoniz¨® un enfrentamiento judicial con su hija y su yerno por los derechos de Ast¨¦rix, justo cuando se cumpl¨ªan 50 a?os del nacimiento del personaje. Finalmente, el dibujante se march¨® al segundo plano y Ferri y Conrad tomaron el relevo. Y tambi¨¦n la responsabilidad. ¡°Puede llegar un momento en que el personaje y las pretensiones de la editorial se imponen a los autores. Se trata ya de un fen¨®meno industrial¡±, explica Roca. Y Auladell va m¨¢s all¨¢: ¡°No he visto los ¨²ltimos ¨¢lbumes. Lo dej¨¦ despu¨¦s del segundo de Uderzo en solitario. Me pareci¨® que se hab¨ªa vuelto m¨¢s infantil, con un humor m¨¢s escatol¨®gico y un dibujo m¨¢s blando. Ast¨¦rix se parec¨ªa a un Mickey Mouse de golosina, a un juguetito. Yo veo una curva descendiente¡±. El tiempo y los a?os hacen tambalear al mito. Y le exigen reaccionar. Aunque Ast¨¦rix y los suyos est¨¢n m¨¢s que acostumbrados: llevan una vida entera acorralados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.