Javier Cansado: ¡°Soy freudiano y anal: retengo cosas¡±

Como detr¨¢s de m¨ª, en la videollamada, se ve un cuadro con el rostro de Marilyn, empieza cont¨¢ndome que ve caras. ¡°S¨ª, t¨ªa, en la pared, en el suelo, en una toalla arrugada. Veo caras todo el rato, me miran y me acojono¡±, suelta. Lo miro en Wikipedia y resulta que tal s¨ªndrome existe y se llama pareidolia. O sea, que hablo con un ?pareid¨®lico? Bien empezamos. Su fondo, por su parte, son las vitrinas donde guarda los ¡°m¨¢s de 100.000¡± soldaditos de plomo que ha pintado y envuelto uno a uno en las dos grandes mudanzas de su vida y que protagonizan parte de su ocio los d¨ªas de encierro. No hace falta que le pregunte. ¡°Pensaba que estar confinado iba a ser tedioso, pero con las rutinas, se pasa el tiempo a toda leche¡±, confiesa ¨¦l solo.

?Se le est¨¢ haciendo corto el confinamiento?

No, a ver, estoy harto. La gente dice que echa de menos los abrazos, pero no creo que despu¨¦s nos vayamos a abrazar tanto. Lo de los bares, lo entiendo, aunque yo lo que m¨¢s echo de menos es andar. Andaba cuatro o cinco horas al d¨ªa. Ahora voy andando a comprar y, como soy una persona adinerada, compro cada cosa en un sitio y as¨ª redistribuyo la riqueza.

?Y qu¨¦ echa m¨¢s de m¨¢s?

F¨ªjate¡­ La familia. Es que estar todo el d¨ªa con mi mujer y mi hijo... Nos llevamos muy bien, pero claro, yo estoy siempre de gira y ahora llevamos siete semanas juntos para todo y, uf, un poquito de m¨¢s s¨ª que nos llegamos a echar.

?El roce no hac¨ªa el cari?o?

Al rev¨¦s, el roce hace el agobio. Y rozaduras que escuecen.

?Es tan friqui para todo?

S¨ª. Tengo muchas aficiones y mi problema es que las acumulo. Acumulo pasiones. Aunque cambie una, no deja de interesarme la otra. El humor es una tapadera, lo que me gusta son cosas que no dan dinero. Si pudiera dedicar¨ªa todo el d¨ªa a las aficiones.

?Di¨®genes ¡®aficional¡¯?

Me vale. F¨ªjate: me dio por coleccionar tapones de pl¨¢stico porque se puso de moda, pero es que ahora los colecciono solo azules, preciosos, que no me los toquen.

Como psic¨®logo titulado que es, ?podr¨ªa autodiagnosticarse?

Yo es que soy freudiano, y ya no se lleva. Pero Freud dir¨ªa que lo m¨ªo es un comportamiento anal. De retener. De poseer cosas. Es una cosa escatol¨®gica, pero es as¨ª. Si te fijas, el coleccionismo es m¨¢s normal en el var¨®n que en la mujer. La mujer tambi¨¦n colecciona, pero no se preocupa tanto. El hombre es como m¨¢s tonto. Entonces yo creo que tengo ese caracter anal, s¨ª.

?C¨®mo de ¡®normal¡¯ cree que va a ser este verano con la nueva normalidad?

Profesionalmente estoy jodido porque voy a estar todo el a?o sin trabajar, con lo cual no voy a ingresar nada. Si a eso le sumas la sensaci¨®n de peligro dices: esto no es mi vida, parecemos p¨¢jaros. ?Te has fijado en los p¨¢jaros? Est¨¢n todo el rato como agobiados. Yo odio a los p¨¢jaros, porque los animales, cuando hay un peligro, huyen y ya est¨¢, pero los p¨¢jaros est¨¢n todo el tiempo as¨ª como nerviosos. Todo el tiempo, t¨ªa. Entonces, creo que el ser humano este verano va a ser p¨¢jaro.

Yo he sido un ni?o muy feliz, pero ibas a casa de un amigo que ten¨ªa calefacci¨®n y te molaba. Dec¨ªas: ostras hay gente que vive bien. Entonces el dinero me gusta mucho

?C¨®mo lleva ser el m¨¢s a?oso de sus colegas humoristas?

Hombre, creo que estoy vigente. Mi cabeza todav¨ªa no vive del pasado, sino del aqu¨ª y el ahora. Pero hay algo generacional que hace que no acaben de sentirte suyo ni que ellos se sientan tuyos. Puede que hagamos el mismo planteamiento c¨®mico, el absurdo, lo que quieras. Pero yo hablo de mis hijos y ellos hablan de sus padres. Y eso es as¨ª.

?Se est¨¢ llamando viejo?

Hombre, yo me doy cuenta de que esto se est¨¢ acabando. Estoy en forma, me cuido, pero ahora mismo, en mi momento vital, estoy vi¨¦ndole las orejas al lobo y todo lo hago por salud. Hago autofagia, por ejemplo. Ceno a las seis y no tomo nada hasta el d¨ªa siguiente, y, como me funciona, lo hago. Antes pensaba que el mundo me necesitaba. Bueno, el mundo¡­ la Comunidad de Madrid, tampoco quiero ser tan ambicioso. Pero empiezo a pensar que esto no es lo que era y tengo que cuidarme.

?Se hace gracia a s¨ª mismo?

Cuado improviso s¨ª, lo reconozco. No me puedo ver ni o¨ªr. Pero hay momentos en los que la idea me viene antes de contarla y soy tan est¨²pido que me r¨ªo, no puedo evitarlo. Seg¨²n voy hablando, eso se va realimentando, y me vienen ideas que me r¨ªo, t¨ªa, me descojono, balbuceo. Y digo, joder, que tengo 63 a?os seg¨²n Wikipedia. ?C¨®mo puedo balbucear por un chiste m¨ªo? Soy tonto. Pero no puedo evitarlo, me hace gracia.

?Y qu¨¦ no le hace ni pizca?

La pol¨ªtica. No me hace ni puta gracia. Me distrae de la vida. Intento no encabronarme, pero me altera, es el tema que m¨¢s me agobia siempre. No puedo superarlo. Cuando escucho a uno me parece bien y cuando escucho al que dice lo contrario tambi¨¦n me parece bien. Es que para m¨ª la palabra es un contrato, y que la usen en vano no puedo soportarlo.

?No se aburre de s¨ª mismo?

Bueno, lo que creo es que hablo demasiado. Y a veces meto mucho la pata porque hablo mucho y el caso es que no me gusta hablar. Hablo sin parar, cualquier cosa me sugiere algo, la charla contigo, la radio, la comida con mi mujer y mis hijos¡­ Y luego digo, ?qu¨¦ me est¨¢ pasando? ?Por qu¨¦ hablo todo el rato, si no me gusta hablar? Mira otra patolog¨ªa, ya me has sacado dos. Qu¨¦ desastre.

Tambi¨¦n podr¨ªamos hablar de su querencia a hablar de dinero.

S¨ª, claro, es que los ni?os pobres¡­Yo he sido un ni?o muy feliz, pero ibas a casa de un amigo que ten¨ªa calefacci¨®n y te molaba. Dec¨ªas: ostras hay gente que vive bien. Entonces el dinero me gusta mucho. Y me gusta hablar de dinero porque hay algo como escatol¨®gico, volviendo a Freud. Es como si tuviera alg¨²n pecado original. El problema no es la desigualdad, sino la pobreza. Entonces, que haya gente rica, pues ole. Yo he ganado mucha pasta, lo he hecho en buena lid y no lo oculto. Adem¨¢s, si tengo un mill¨®n, he pagado otro a Hacienda, y algo de eso te toca.