Adi¨®s, mam¨¢

Pocos clich¨¦s femeninos han sido tan exprimidos como el de la madre castradora y claustrof¨®bica. Sin embargo, la visi¨®n de la maternidad como una oscura sombra de poder casi siempre se ha tratado desde el punto de vista masculino. La profesora de piano, dirigida por el alem¨¢n Jan Ole Gerster, ofrece una variante que llena de originales matices el punto de vista de la madre. Ella es Lara, una expianista frustrada por el fracaso de una carrera que, suponemos, estuvo sujeta a un enorme grado de autoexigencia. Una mujer que ha sido incapaz de reprimir ese mismo rigor y cr¨ªtica en la educaci¨®n musical de su hijo. La pel¨ªcula ocurre en una sola jornada, la del debut del heredero de su talento, un emergente pianista y compositor al que le ha llegado la puesta de largo el mismo d¨ªa que su madre cumple 60 a?os.

Con una rigidez f¨ªsica a lo Isabelle Huppert y un soterrado humor, la actriz Corinna Harfouch logra sostener cada plano

Con una rigidez f¨ªsica a lo Isabelle Huppert y un soterrado humor que le da una fragilidad y un movimiento muy especial a su personaje, la actriz Corinna Harfouch logra sostener cada plano con un trabajo que lidia con enorme ternura con instintos muy poco encomiables. Un personaje antip¨¢tico y torpe en sus decisiones pero ba?ado del ¨ªntimo misterio que vamos descubriendo poco a poco. Una mujer condenada a la soledad, a deambular sola por las calles sin que el espectador se adentre demasiado en su biograf¨ªa. En su ansiedad y malhumor, incluso en su rictus y peinado, intuimos errores como los de tantas otras que fueron sepultadas por esa necesidad de perfecci¨®n que mina cualquier autoestima. Porque La profesora de piano es la historia de una madre feroz incapaz de soportar el miedo al fracaso de un hijo en el que se ve fatalmente reflejada, pero a la vez es el retrato de una mujer cuyo exceso de celo y protecci¨®n ocultan una herida que sigue supurando, tan letal como com¨²n. Un dolor sublimado con una f¨¦rrea disciplina musical hacia ese hijo que se enfrenta al descubrimiento de una triste paradoja: para ser el pianista que quiere su madre no lo queda m¨¢s remedio que huir de ella.