L¨ªdia Jorge, una mirada po¨¦tica y cr¨ªtica de la historia reciente de Portugal
La escritora, muy marcada por la literatura hispanoamericana en sus primeras obras, recibe el premio FIL de Literatura 2020
La escritora portuguesa L¨ªdia Jorge (Boliqueime, 74 a?os) traz¨® con su primera obra uno de esos ¡°puentes plateados¡± que Milan Kundera vio ¡°alzarse como un arcoiris por encima del siglo¡± entre la literatura de Am¨¦rica Latina y la de ciertas regiones de Europa. Jorge inici¨® su carrera literaria con O dia dos prod¨ªgios (1980), una de sus novelas sobre la Revoluci¨®n de los Claveles, tras haber le¨ªdo a autores como Juan Rulfo, Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez y Julio Cort¨¢zar. ¡°Ellos me dijeron que era totalmente libre de inventar. Leerlos fue un acto de libertad¡±, cuenta en una llamada telef¨®nica tras conocerse el fallo por el que le ha sido otorgado el premio FIL Guadalajara 2020. ¡°Para m¨ª es una pena que el galard¨®n ya no se llame ¡®Juan Rulfo¡¯. Recuerdo v¨ªvidamente cuando le¨ª por primera vez Pedro P¨¢ramo a los 20 a?os. Fue una lectura que me marc¨® mucho¡±, agrega.
Jorge naci¨® en un peque?o pueblo del Algarve, estudi¨® Filolog¨ªa Rom¨¢nica en la Universidad de Lisboa y trabaj¨® como profesora de secundaria en Angola y Mozambique durante la ¨²ltima parte de las guerras coloniales en ?frica, uno de los momentos m¨¢s traum¨¢ticos en la historia reciente del pa¨ªs. Portugal moviliz¨® entre 850.000 y un mill¨®n de soldados de 1961 a 1975. De estos, m¨¢s de 8.000 murieron y alrededor de 100.000 resultaron heridos. La guerra termin¨® despu¨¦s de que los portugueses concedieran la soberan¨ªa total a las antiguas colonias tras la Revoluci¨®n de los Claveles del 25 de abril de 1974, que depuso la dictadura salazarista que hab¨ªa gobernado el pa¨ªs durante casi medio siglo.
¡°Representa una alegr¨ªa inmensa contribuir para ligar las dos orillas del Atl¨¢ntico a trav¨¦s de las lenguas romances¡±, dice la escritora sobre el premio
En la fase inicial de la obra de Jorge la presencia de lo fant¨¢stico es clave ¡ªen su segunda novela, O cais das merendas (1982), es ya menos marcado y despu¨¦s se hace todav¨ªa m¨¢s borrosa¡ª, y algunos cr¨ªticos han establecido paralelos entre sus primeras obras y el realismo m¨¢gico. Paulo Serra, estudioso de la obra de la escritora, profundiza en ello en la tesis doctoral que defendi¨® en 2013 en la Universidad del Algarve. Tambi¨¦n lo plantea el cr¨ªtico Urbano Tavares Rodrigues en un sentido m¨¢s general que abarca a otros autores: ¡°?Por qu¨¦ lo fant¨¢stico?¡±, se pregunta en un fragmento que cita Serra. ¡°En parte, posiblemente, por la irradiaci¨®n mundial del realismo m¨¢gico hispanoamericano. Pero no solo por eso. Una cierta decepci¨®n por la Revoluci¨®n (de los Claveles] perdida, o por la modorra general, el regreso a viejos h¨¢bitos y ego¨ªsmos, el desvanecerse de las voluntades en el microcosmos intelectual (aunque las luchas sociales y pol¨ªticas se mantuviesen vivas) habr¨¢ determinado en algunos escritores una transmigraci¨®n a terrenos ba?ados por la magia, terrenos de la leyenda y de los prodigios, sin huir en ese proceso de la realidad¡±.
La obra de Jorge va evolucionando despu¨¦s en distintas direcciones y se convierte en una amplia mirada po¨¦tica y cr¨ªtica de la historia reciente portuguesa. En La costa de los murmullos (Alfaguara, 1989), su cuarta novela, deconstruye una especie de relato oficial sobre la guerra colonial en Mozambique a partir de una voz femenina que articula relatos personales, ¨ªntimos, que cuentan una historia muy diferente.
Una estrategia vagamente similar sigue en otro de los hitos de su narrativa, Os Memor¨¢veis (2014), en la que una joven periodista portuguesa residente en Estados Unidos regresa a su pa¨ªs a filmar un documental sobre la revoluci¨®n. La propia escritora entrevist¨® para la novela a personajes como el teniente coronel Otelo Saraiva de Carvalho, uno de los principales estrategas del 25 de abril, y el capit¨¢n Vasco Louren?o, ambos miembros del Movimiento de las Fuerzas Armadas, conformado por un grupo de oficiales j¨®venes que lider¨® el levantamiento.
La historia que surge est¨¢ lejos de la imagen universal de la que habl¨® Garc¨ªa M¨¢rquez en una columna de 1983: ¡°La foto de una muchacha poniendo una flor en el ca?¨®n del fusil de un soldado amigo no solo dio la vuelta al mundo por su belleza, sino que se impuso de inmediato como un s¨ªmbolo de una vida nueva¡±. Lo que trasluce en Os Memor¨¢veis es sobre todo una sensaci¨®n de decepci¨®n de los protagonistas y del pa¨ªs, es un balance de las promesas incumplidas cuatro d¨¦cadas despu¨¦s de la c¨¦lebre foto.
¡°En el exterior se aprecia con m¨¢s frecuencia como algo positivo. Tal vez porque all¨ª no saben lo que vino despu¨¦s¡±, se?al¨® sobre la Revoluci¨®n de los Claveles
La autora explica la diferencia entre las perspectivas sobre esa ¨¦poca dentro y fuera de Portugal en una entrevista que concedi¨® al diario P¨²blico tras el lanzamiento del libro: ¡°En el caso concreto de la importancia de nuestra revoluci¨®n, en el exterior se aprecia con m¨¢s frecuencia como algo positivo. Tal vez porque all¨ª no saben lo que vino despu¨¦s. No conocen la historia de nuestra democracia, que es una democracia muy imperfecta¡±.
De un solo vistazo, Jorge da la impresi¨®n de tener casi tantos galardones como libros publicados. Entre los m¨¢s importantes se destacan el Premio Luso-Espa?ol de Arte y Cultura que le concedi¨® el Ministerio de Educaci¨®n de Espa?a en 2014, as¨ª como el Premio de Ficci¨®n del PEN Club de Portugal de 2000 y el Premio Internacional de Literatura de la Fundaci¨®n G¨¹nter Grass de 2006, entre otros. Este a?o la autora public¨® su obra m¨¢s reciente, Em todos os sentidos, una recopilaci¨®n de cr¨®nicas que escribi¨® el a?o pasado para un programa de la radio p¨²blica portuguesa. En una de ellas, en la que habla sobre la FIL de Guadalajara de 2018, dice lo siguiente: ¡°Es notable que se haya desarrollado all¨ª, delante del oc¨¦ano Pac¨ªfico, una especie de meca del libro. No dudo de que lo que m¨¢s impresiona es percibir que en Guadalajara, como en otros lugares del mundo, el libro contin¨²a teniendo un valor simb¨®lico tan elevado. Transmite a las sociedades el sentimiento de que si se perdiera el valor de los libros se perder¨ªa el rostro de nuestra humanidad tal como la conocemos¡±.
Este viernes ha vuelto a recibir noticias de all¨ª. ¡°Para m¨ª es una gran felicidad subir a ese barco del premio de la FIL en el que hay un conjunto de escritores tan importante¡±, confiesa. ¡°Representa una alegr¨ªa inmensa contribuir para ligar las dos orillas del Atl¨¢ntico a trav¨¦s de las lenguas romances¡±.
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