Construir en la emergencia: la arquitectura frente al coronavirus
La crisis provocada por la pandemia recuerda que el ingenio para trabajar r¨¢pido y con pocos medios es lo que permite lidiar con las urgencias humanitarias
"En una emergencia lo tienes que hacer todo: conseguir el dinero y el material, idear el sistema y ense?ar a construirlo. Para m¨ª, esos tabiques de tela son arquitectura porque transforman la vida de la gente¡±. El arquitecto Shigeru Ban habla de las separaciones que construy¨® con s¨¢banas y tubos de cart¨®n tras el terremoto de Fukushima en marzo de 2011. Perdieron la vida 1.200 personas. Tuvieron que ser desalojadas 140.000. Compart¨ªan pabellones deportivos y ¨¦l decidi¨® que necesitaban intimidad.
El sue?o de la versatilidad arquitect¨®nica se est¨¢ imponiendo por la crisis del coronavirus. Las mayores infraestructuras de las ciudades ¡ª?los recintos feriales, los estadios y hasta los parques¡ª se est¨¢n transformando en hospitales de campa?a. En Madrid, el edificio del Instituto de Medicina Legal que Zaera y Moussavi abandonaron en 2008 en una fantasmag¨®rica Ciudad de la Justicia ha terminado por inaugurarse para mitigar el colapso de las morgues de la comunidad. En Nueva York, las tiendas de campa?a de Samaritan¡¯s Purse han levantado una sucursal del hospital Mount Sinai en Central Park, y en Las Vegas el mundo ha sido testigo de c¨®mo a los sin hogar se les confina en un aparcamiento con frontera pero sin techo. ?El l¨ªmite del parking protege a los pobres de la ?Covid-19 o al resto de ciudadanos de esos pobres?
Dos referentes como Renzo Piano y Shigeru Ban comenzaron sus carreras en situaciones de urgencia
El japon¨¦s Shigeru Ban asegura que recuperar la intimidad es fundamental para dejar atr¨¢s la cat¨¢strofe. Ban y el italiano Renzo Piano tienen algo en com¨²n: se iniciaron tratando de salvar el mundo. No fue idealismo juvenil, ambos firmaron sus primeros trabajos para la ONU. Esa decisi¨®n ha marcado sus trayectorias y ha transformado la arquitectura.
Shigeru Ban tiene una receta para las cat¨¢strofes: ¡°En las emergencias sobra lo que no es necesario¡±. Esa misma obsesi¨®n por restar fue la que puso a trabajar a Piano: ¡°Mi ¨²nica idea es aligerar la arquitectura. Soy genov¨¦s. Y el lema de mi ciudad es que nada se tira¡±. Hijo de un constructor, el autor del aeropuerto de Osaka, el Centro Bot¨ªn de Santander o el nuevo Whitney en Nueva York se inici¨® experimentando con materiales.
En 1966, cuando Italia sufri¨® la peor inundaci¨®n de su historia, Piano utiliz¨® poli¨¦ster reforzado para producir viviendas econ¨®micas en poco tiempo. Termin¨® empleando esas estructuras en una muestra para la Trienal de Mil¨¢n y en el pabell¨®n de la industria italiana de la Exposici¨®n Universal de Osaka en 1970. El experimento le permiti¨® trabajar para la Unesco en talleres vecinales y le dej¨® otra idea, ¡°la arquitectura debe adaptarse¡±, que abri¨® el camino hacia el Centro Pompidou. ¡°Cuando lo construimos, sab¨ªamos mucho de revueltas estudiantiles, pero no hab¨ªamos levantado ning¨²n edificio que hubiera durado m¨¢s de seis meses¡±, recordaba el arquitecto italiano. Fueron los c¨¢lculos del ingeniero Peter Rice los que a?adieron solvencia a la inventiva de Piano y Rogers.
El genov¨¦s lo reconoce, igual que Ban rinde homenaje a las estructuras tensadas de Frei Otto para el Estadio Ol¨ªmpico de M¨²nich. Conocer al alem¨¢n le hizo concluir que un arquitecto de su tiempo deb¨ªa saber construir, inventar y mirar m¨¢s all¨¢ de los grandes edificios. Con ese ideario, en 1994 Ban decidi¨® escribir a la ONU. Sab¨ªa que el genocidio de Ruanda hab¨ªa dejado sin casa a dos millones de tutsis y advirti¨® que la construcci¨®n de tiendas de campa?a con estructuras de madera deforestar¨ªa el pa¨ªs. Les propuso utilizar tubos de cart¨®n. Estableci¨® una red de arquitectos voluntarios (VAN) y mont¨® 50 refugios. Ese sistema estructural terminar¨ªa por sustentar su obra como arquitecto.
Un a?o m¨¢s tarde, el terremoto de Kobe demostr¨® que los tubos pod¨ªan convertirse en vivienda. All¨ª construy¨® 24 casas de cuatro metros por cuatro con cajas de cerveza como cimientos. Hab¨ªa desarrollado un sistema constructivo r¨¢pido, econ¨®mico, m¨¢s s¨®lido que las tiendas de tela y reciclable. Muchos de esos tubos han ido reapareciendo en los sucesivos terremotos de Turqu¨ªa (2000) o la India (2001). Tambi¨¦n en el pabell¨®n de Jap¨®n para la Expo de Hannover, que encaminar¨ªa la trayectoria de Ban hacia la construcci¨®n del Pompidou de Metz en 2010. M¨¢s rasgos en com¨²n con Piano.
Al contrario que sus predecesores, como el herrero-inventor Jean Prouv¨¦ ¡ªque con planchas de aluminio plegadas ide¨® la Casa M¨¦tropole (1949) para reconstruir Par¨ªs¡ª, Piano y Ban no llegaron a la emergencia, se iniciaron con ella. Y esa actitud resolutiva y desprejuiciada ha quedado reflejada en una obra en continua reinvenci¨®n. Ban dedica la mitad de su tiempo a la emergencia. Cede los dise?os y no cobra por ense?ar a construirlos. Piano, que es el mayor proyectista de museos del mundo, ultima en Uganda un Centro de Cirug¨ªa Infantil de Emergencia que, lejos de trabajar con materiales pl¨¢sticos, recurre a la tierra apisonada para levantar un hospital autosuficiente coronado por paneles fotovoltaicos.
La emergencia tambi¨¦n puede llegar al paisaje. Sucedi¨® en 2010, poco despu¨¦s de que uno de los peores terremotos de la historia asolara Constituci¨®n. El chileno Alejandro Aravena tuvo claro que hab¨ªa que establecer prioridades. Cuando le encargaron un plan para reconstruir la ciudad, ofreci¨® una respuesta inmediata y otra a largo plazo. Para empezar, urg¨ªa llevar agua. Rellen¨® neum¨¢ticos con botellas de pl¨¢stico y puso a los ni?os a rodarlos hasta las casas. Para prevenir futuros tsunamis, propuso sembrar un bosque en el l¨ªmite costero. Los ¨¢rboles mitigar¨ªan la ola; el sustrato absorber¨ªa y rebajar¨ªa la inundaci¨®n. En el tiempo de espera, la ciudad tendr¨ªa una zona verde.
La lecci¨®n de que protege m¨¢s un bosque abierto que un muro de hormig¨®n se aprende en la emergencia: cuando la energ¨ªa de la ola rompe el muro y lo convierte en un problema mayor. ¡°Tratar de resistir las olas no es posible. Hay que estar preparado para recibirlas y luego dejarlas pasar¡±, explica Aravena. Se refiere tambi¨¦n al paso que sigue a una emergencia: utilizar la experiencia para que la siguiente cat¨¢strofe encuentre a la arquitectura, la sanidad p¨²blica, la ciudad y la ciudadan¨ªa organizados.
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