Cuatro apuestas negras de tres editoriales peque?as

Ya hemos comentado muchas veces que es dif¨ªcil manejarse por las caudalosas aguas de la actualidad editorial, especialmente en el g¨¦nero que nos ocupa. Por eso, y antes de las recomendaciones veraniegas, quer¨ªa hacer un peque?o alto en el camino para destacar cuatro apuestas de tres editoriales peque?as solo en tama?o que vienen a refrescar la oferta negro criminal. Son muy distintas, las editoriales y las propuestas, pero creo que pueden llevar algo de inter¨¦s a la vida de los lectores en un verano tan at¨ªpico. Pasen y lean.

D¨¹rrenmatt y Allan Poe en Perif¨¦rica

Esta editorial es que la que participa en la propuesta por v¨ªa doble con dos libros muy interesantes. Empezamos por La aver¨ªa, de Friedrich D¨¹rrenmatt (traducci¨®n de Jorge Seca), una nouvelle del autor de la inolvidable La promesa, fascinante desde el moderno alegato contra el ombliguismo de la literatura con el que se inicia. Alfredo Traps (tramposo), un comercial agresivo, mujeriego y triunfador, sin un resto de integridad moral en todo su ser, tiene un accidente con un deportivo en un lugar de provincias y se ve atrapado en casa de un anciano juez que, acompa?ado de sus amigos fiscales y abogados retirados invitan al protagonista a una cena en la que se desarrolla una farsa judicial que poco a poco va perdiendo su car¨¢cter de farsa. Con este planteamiento sencillo Durr?nmatt se dedica a hacer lo que mejor sabe: desmontar los cimientos de la moral peque?oburguesa. Y, de paso, nos regala un buen rato.

Aqu¨ª pueden leer el homenaje de Enrique Vila Matas a Durr?nmatt

El caso de Poe es distinto. Bajo el t¨ªtulo Los misterios de Auguste Dupin, el primer detective, la editorial nos trae, con traducci¨®n de ?ngeles de los santos, las tres historias m¨¢s publicadas y le¨ªdas del creador del g¨¦nero de detectives. A saber: Los asesinatos de la rue Morgue, con aparici¨®n triunfal de Dupin y el c¨¦lebre misterio tipo habitaci¨®n cerrada, mono incluido; la genial La carta robada y la seminal El misterio de Marie R?get, una novela que cada vez que leo me gusta m¨¢s por lo actual que es, por la influencia que ha dejado en todo el g¨¦nero, por inventar el falso true crime, por mezclar con esa fuerza realidad y ficci¨®n.

Lee Child, ahora desde Argentina

No deja de ser admirable el empe?o de algunos enamorados de la edici¨®n por las misiones imposibles. Desde Argentina desembarca en Espa?a la editorial Blatt y R¨ªos con Noche caliente. Dos historias de Jack Reacher (traducci¨®n de Aldo Giacometti). Jack Reacher es uno de mis antih¨¦roes predilectos. Me gusta porque es adicto a la cafe¨ªna; porque tiene 10 leyes de lo m¨¢s macarra, 10 malas noticias para sus enemigos; porque tiene su propio c¨®digo; me gusta su vagabundeo por el mundo, su nulo apego a lo material, su respeto a las consecuencias de todo lo que hace y ha hecho. Porque en las novelas de Lee Child el pasado de nuestro ex polic¨ªa militar de dos metros y ojos azules vuelve para pasar factura. Y Reacher sabe afrontarlo hasta sus ¨²ltimas consecuencias.

Aqu¨ª, en uno de los dos relatos, vemos a un jovenc¨ªsimo Reacher paseando por la Nueva York de 1977. Arqueolog¨ªa para fans del samur¨¢i y una buena manera de empezar para los que nunca lo han le¨ªdo. Guerras peque?as es la otra historia que trae este peque?o volumen lleno de acci¨®n. En este caso es un procedimental m¨¢s cl¨¢sico, siempre dentro del canon Child, en el que vemos a Reacher en su ¨¦poca de polic¨ªa militar. ?No han le¨ªdo nunca a Lee Child? ?No saben de qu¨¦ les estoy hablando? Est¨¢n de suerte, bienvenidos, empiecen por aqu¨ª. ?Lo han le¨ªdo? Bien, estas dos historias estaban in¨¦ditas en Espa?a (donde RBA ha publicado muchos de sus libros) as¨ª que ya tienen m¨¢s munici¨®n.

Les dejo la entrevista que le hice en 2014, cuando gan¨® el RBA de novela negra.

Graham Greene, un regalo

Siempre es dif¨ªcil hablar de Greene en un blog de novela negra porque, como tantos otros grandes, el autor de El poder y la gloria es inclasificable. Es cierto que tiene sus novelas de esp¨ªas, de lo mejor del g¨¦nero pero, ?y el resto? El final del affaire, que Libros del Asteroide public¨® con tanto acierto y ¨¦xito, no podr¨ªa entrar aqu¨ª pero s¨ª en cambio El rev¨¦s de la trama que tambi¨¦n nos trae esta editorial con traducci¨®n de Jaime Zulaika.

?Y por qu¨¦? Pues no porque haya un polic¨ªa -el protagonista, el comandante Henri Scobie lo es- o una trama con intrigas, que la hay, sino porque pocos tratan as¨ª los rincones oscuros del alma humana, pocos llevan al lector con tanta habilidad a entornos asfixiantes -Sierra Leona en 1948, seg¨²n experiencia del propio autor- porque hay fracaso, traici¨®n, sacrificio y crisis de fe. No me digan que no es negro. Yo le emparento, siempre, con Patricia Highsmith. Nunca me siento tan cuestionado en mis principios ¨¦ticos como con estos dos, no hay descripci¨®n m¨¢s certera del malestar contempor¨¢neo. Si, de paso, hay alg¨²n crimen, bienvenido sea.