C¨®mo ser picador o banderillero y no morir en el intento de convencer a Trabajo

-?Presentar¨¢ la Uni¨®n Nacional de Picadores y Banderilleros de Espa?a (UNPBE) una querella judicial por presunta prevaricaci¨®n contra la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz?

- ¡°De momento, solo se ha presentado una contra el director provincial del Servicio P¨²blico de Empleo Estatal (SEPE) de Sevilla, que es la provincia en la que se ha denegado un mayor n¨²mero de solicitudes; pero nuestra intenci¨®n es continuar este procedimiento con otras direcciones provinciales. Las resoluciones no las firma la ministra, pero en fase probatoria se les preguntar¨¢ a los querellados si han recibido instrucciones de sus superiores, y, si se demuestra que ha habido una determinaci¨®n pol¨ªtica para transgredir la ley, nos querellaremos contra la ministra¡±.

Responden David Prados y Antonio Jos¨¦ Mart¨ªnez, presidente y asesor jur¨ªdico, respectivamente, de la UNPBE. Ambos cuentan una historia inveros¨ªmil, asombrosa, dif¨ªcilmente cre¨ªble, salpicada de tintes c¨®micos, pero dram¨¢ticamente real, de las relaciones del mundo del toro con los ministerios de Cultura y, especialmente, con Trabajo.

Los dos est¨¢n convencidos de que existe una decisi¨®n pol¨ªtica de ignorar, maltratar, marginar y discriminar al mundo del toro por parte de Yolanda D¨ªaz, responsable de Trabajo. Los dos est¨¢n, adem¨¢s, agradecidos al titular de Cultura, Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Uribes, por su positiva disposici¨®n ante las demandas del sector, pero tambi¨¦n le reprochan que se ¡®lave las manos¡¯ ante la ¡°indignante¡± actitud de su compa?era ministra.

Como ya public¨® este blog el pasado 2 de agosto, el asunto es consecuencia de la pandemia que ha paralizado la temporada taurina. El Gobierno aprob¨® el 17 de marzo un Real Decreto-ley de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente al impacto econ¨®mico y social del covid-19 que no afectaba a los toreros, porque no son aut¨®nomos ni se pueden acoger a un ERTE al mantener contratos laborales con distintas empresas, seg¨²n la plaza en la que act¨²an.

Cultura invit¨® a los toreros a incluir un texto en el decreto ley y fue rechazado por el Consejo de Ministros

Posteriormente, el 5 de mayo, se aprob¨® otro decreto que conten¨ªa medidas de apoyo al sector cultural que espec¨ªficamente inclu¨ªa a ¡®los artistas en espect¨¢culos p¨²blicos¡¯.

Aquellos matadores, novilleros, rejoneadores picadores, banderilleros y mozos de espada que hab¨ªan cotizado en 2019, pero no lo suficiente para acceder a una prestaci¨®n habitual por desempleo, solicitaron al SEPE la ayuda prevista en este decreto para ¡®los artistas¡¯.

Las primeras solicitudes, no m¨¢s de diez, fueron aceptadas, hasta que el ministerio de Trabajo orden¨® lo contrario a las direcciones provinciales del SEPE, que ha denegado las casi 250 solicitudes de picadores y banderilleros presentadas porque no los reconocen como ¡®artistas en espect¨¢culos p¨²blicos¡¯.

Entiende la UNPBE que la negativa de Trabajo tiene una motivaci¨®n exclusivamente pol¨ªtica por el hecho de que la ministra, miembro de Podemos, rechaza la fiesta de los toros.

Los profesionales taurinos estiman que la legalidad vigente les atribuye la condici¨®n de ¡®artistas en espect¨¢culos p¨²blicos¡¯ porque as¨ª figura en el Real Decreto-ley 1435/1985 de 1 de agosto, que en el apartado tercero del art¨ªculo 1 se?ala que ¡°est¨¢n incluidas (¡­) todas las relaciones establecidas para la ejecuci¨®n de actividades art¨ªsticas desarrolladas directamente ante el p¨²blico o destinadas a la grabaci¨®n de cualquier tipo para su difusi¨®n entre el mismo, en medios como el teatro, cine, radiodifusi¨®n, televisi¨®n, plazas de toros, instalaciones deportivas, circo, salas de fiestas, discotecas, y, en general, cualquier local destinado habitual o accidentalmente a espect¨¢culos p¨²blicos, o a actuaciones de tipo art¨ªstico o de exhibici¨®n¡±.

A pesar de ello, Trabajo les niega la consideraci¨®n de artistas y rechaza las solicitudes de ayudas.

Pero esta extra?a relaci¨®n entre los toreros y la administraci¨®n p¨²blica no termina aqu¨ª. El siguiente cap¨ªtulo alcanza ribetes curiosos, ins¨®litos y peregrinos.

Cuentan David Prados y Antonio Jos¨¦ Mart¨ªnez que ¡°Cultura acept¨® desde el principio que las ayudas concedidas a otras disciplinas culturales tambi¨¦n correspond¨ªan a los toreros, y tanto el ministro como el secretario general del ministerio reconocen la actividad taurina como un trabajo cultural¡±.

¡°Tanto es as¨ª¡±, prosiguen, ¡°que son ellos quienes nos invitan a incluir en el borrador del decreto-ley de ayudas del 5 de mayo un texto a la medida del sector taurino para su aprobaci¨®n en el Consejo de Ministros¡±.

Y as¨ª lo hacen. La sorpresa les llega cuando el Gobierno aprueba un texto definitivo y comprueban que ha desaparecido la alusi¨®n a los profesionales taurinos.

¡°Es evidente que Yolanda D¨ªaz pretende acabar con el sector¡± (UNPBE)

Pero hay m¨¢s. D¨ªas despu¨¦s de que se conocieran las ayudas, el Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica (INAEM), dependiente de Cultura, public¨® una circular informativa sobre el contenido del real decreto-ley en el que, entre otras cuestiones, explicaba cu¨¢l es la definici¨®n de ¡®artistas en espect¨¢culos p¨²blicos¡¯. Para ello, repet¨ªa el p¨¢rrafo citado unas l¨ªneas m¨¢s arriba del decreto de 1985, pero las palabras ¡®plazas de toros¡¯ aparec¨ªan sustituidas por puntos suspensivos.

A?ade David Prados, presidente de la UNPBE, que ¡°el ministro de Cultura intent¨® consolarnos con la promesa de que el texto del decreto se modificar¨ªa en su convalidaci¨®n parlamentaria¡±, prevista para el pasado 11 de julio, y aplazada, despu¨¦s, hasta septiembre. ¡°Esperamos que para entonces se ofrezca una redacci¨®n nueva; parece que as¨ª est¨¢ pactado entre los distintos grupos pol¨ªticos¡±.

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¡°Mientras tanto, el se?or Rodr¨ªguez Uribe, ministro de Cultura, nos anima a recurrir las solicitudes denegadas por el ministerio de Trabajo¡±, prosigue Prados, ¡°lo que carece de sentido; ser¨ªa m¨¢s l¨®gico que ¨¦l negociara con la ministra, que es miembro del mismo gobierno, en lugar de alentarnos a iniciar un proceso judicial¡±.

¡°Es evidente que la ministra de Trabajo pretende acabar con el sector¡±, tercia el asesor jur¨ªdico.

Las negociaciones con el ministerio est¨¢n paralizadas; mejor dicho, no han existido nunca. Un encuentro previsto con el director general del SEPE fue suspendido un d¨ªa antes de su celebraci¨®n.

Sostiene Antonio Jos¨¦ Mart¨ªnez que, a su juicio, no se trata de una cuesti¨®n de dinero. Y ofrece dos razonamientos: el primero, que el montante econ¨®mico de las ayudas que solicitan los toreros ¡°es una mota de polvo en comparaci¨®n con los ERTES concedidos¡±; y por otro lado, ¡°el profesional al que se le deniega la prestaci¨®n -785 euros- tiene derecho a una ayuda familiar -430 euros- como parado de larga duraci¨®n; como se comprueba, la diferencia es m¨ªnima, de ah¨ª que lo m¨¢s grave es que Trabajo no quiere reconocer que ayuda a los toreros, y se les se?ala, al igual que en los reg¨ªmenes totalitarios, como distintos con el fin de apartarlos de la sociedad¡±.

Hasta aqu¨ª el desarrollo de los acontecimientos. Extra?os, pero dram¨¢ticos, seg¨²n el testimonio de los dos representantes del sindicato taurino.

En el momento actual, los solicitantes que han visto denegado la petici¨®n han presentado una reclamaci¨®n previa por v¨ªa administrativa. En total, unas 250 correspondientes a picadores y banderilleros, aunque podr¨ªan llegar a las 400 si se incluyen matadores, novilleros, rejoneadores y mozos de espada.

La respuesta oficial a la reclamaci¨®n agota la v¨ªa administrativa. El siguiente paso es una demanda judicial ante los juzgados de lo social. Ya se han presentado seis: dos en Logro?o, y una en Badajoz, C¨¢ceres, Valencia y Segovia. ¡°Nuestra intenci¨®n¡±, concluye Mart¨ªnez, ¡°es presentar una demanda por cada una de las reclamaciones rechazadas¡±.

¡°Y si se demuestra que ha habido intencionalidad pol¨ªtica, presentaremos una querella por prevaricaci¨®n contra la ministra, como ya hemos hecho con el director del SEPE en Sevilla. Vamos a agotar todas las v¨ªas a nuestro alcance, porque los toreros tienen los mismos derechos que el resto de los trabajadores de otras disciplinas culturales¡±.