Caminar por el aire: las grandes citas espa?olas del arte
Con un ojo puesto en un posible rebrote, la temporada art¨ªstica se mantiene cauta, pero ultima dos platos fuertes: ¡®Invitadas¡¯ y una monogr¨¢fica sobre Mondrian y De Stijl
Hubo un tiempo en que cualquiera sab¨ªa qu¨¦ era el arte, cu¨¢l era su lugar y para qu¨¦ serv¨ªa. Entonces narraba la historia sagrada, representaba los personajes, los episodios y las verdades con may¨²sculas de una cosmovisi¨®n religiosa conocida por todos. Nada pod¨ªa salir mal en esa ruta fija de lo imaginario, donde apenas hab¨ªa insatisfacci¨®n ni posibilidad de perder el rumbo. En el momento en que empezaron a agotarse las certezas, todo cambi¨®. Desde que dej¨® de ser una obviedad, la creaci¨®n empez¨® a huir de los imperativos de la utilidad cotidiana y de la comunicaci¨®n habitual, y elev¨® a la quintaesencia su car¨¢cter anarquista: ese que est¨¢ en permanente disenso y el que crea desde la incertidumbre. Seguramente ese sea su mayor poder hoy, cuando nadie entiende nada, tampoco el arte. Poner en orden el desorden. Alzar la voz. La mejor banda sonora para los tiempos que corren.
Sin duda corren tiempos dif¨ªciles. Lo saben artistas, galer¨ªas y museos, que estos d¨ªas se miran de reojo con gesto de sorpresa, como quien ve a alguien andar por el aire. Toda la programaci¨®n de exposiciones est¨¢ as¨ª: flotando en el calendario. Muestras como la de Magritte en el Thyssen-Bornemisza de Madrid se posponen un a?o entero, hasta septiembre de 2021. Otras se han cancelado por los bajos ingresos que han dejado este a?o, como la de Meret Oppenheim en el Museo Picasso de M¨¢laga. Un problema de sostenibilidad econ¨®mica que ser¨¢ el gran tema del nuevo curso art¨ªstico, con museos sin medios, sin personal y con agotamiento. Tambi¨¦n c¨®mo se adaptar¨¢n los programas educativos a un entorno online, c¨®mo va a vivir el artista con una situaci¨®n de por s¨ª precaria, y c¨®mo el espectador acostumbrado a la experiencia f¨ªsica (y humana) del arte har¨¢ de Internet su nueva diatriba. Por no hablar de la escasa tensi¨®n cultural que se ha comido la emoci¨®n del encuentro.
Con ese dilema y el nuevo rebrote encima, los galeristas se preparan ya para la apertura de la temporada, escalonada seg¨²n la ciudad: en Madrid, el 10 de septiembre; en Barcelona, el 17, y en Valencia, el 25. Todo con cautela, esquivando el vernissage masivo, y con un buen elenco de artistas espa?oles: Elena Asins (galer¨ªa Elvira Gonz¨¢lez), Cristina Lucas (Albarr¨¢n Bourdais), Pere Llobera (F2), Aur¨¨lia Mu?oz (Jos¨¦ de la Mano), Miguel Marina (Ana Mas Projects), Miguel ?ngel Campano (Carles Tach¨¦)¡ Algo que se extiende, tambi¨¦n, a los centros de arte y museos: Jos¨¦ Luis Alexanco (Sala Alcal¨¢ 31, 10 de septiembre), Xisco Mensua (IVAM, 15 de septiembre), Carmen Laff¨®n (CAAC, 18 de septiembre), La Ribot (GCAC, 18 de septiembre), Regina Gim¨¦nez (Patio Herreriano, 19 de septiembre), Carles Congost (La Casa Encendida, 8 de octubre), Mabi Revuelta (Azkuna Zentroa, 14 de octubre), Fina Miralles (MACBA, 5 de noviembre), Azucena Vieites (Alcal¨¢ 31, 26 de noviembre), June Crespo (Artium, 4 de diciembre)¡ Aunque tampoco defraudar¨¢n Isaac Julien (Helga de Alvear, 10 de septiembre), Walid Raad (TBA21, 5 de octubre) y John Akomfrah (CAAC, 13 de noviembre).
Aunque si hay dos muestras sobre las que se acumula la expectativa son Invitadas en el Museo del Prado (14 de octubre) y Mondrian y De Stijl en el Museo Reina Sof¨ªa (11 de noviembre). La primera aborda el papel de la mujer en el sistema espa?ol del arte en el siglo XIX y los primeros a?os del siglo XX a trav¨¦s, principalmente, de fondos del museo. El mayor reto que ha tenido la pinacoteca entre manos hasta la fecha. La de Mondrian se remonta un siglo atr¨¢s, a octubre de 1917, cuando, en plena Primera Guerra Mundial, un grupo de j¨®venes artistas holandeses buscaron un estilo art¨ªstico capaz de derribar las fronteras entre disciplinas, donde la pintura pod¨ªa ser arquitectura, las artes aplicadas se convert¨ªan en escultura y el dise?o adquir¨ªa rango de arte. Ya entonces, lo m¨¢s cercano a cualquier idea de futuro.
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