Una ronda de segundas oportunidades

El gran cuento de la infancia de Alfredo Sanzol giraba en torno a una historia de rancheros en Texas. Era una historia m¨ªtica familiar que le contaba su padre por las noches. Nunca se pregunt¨® el porqu¨¦. Solo cuando tuvo 12 a?os entendi¨® aquel cuento. Gracias a una foto que alguien sac¨® de no se sabe d¨®nde, supo del pasado de su padre, que hab¨ªa ingresado en un seminario con 12 a?os, que hab¨ªa sido ordenado sacerdote y que, en 1963, tras una crisis personal, viaj¨® por Estados Unidos y pidi¨® la dispensa papal para abandonar el sacerdocio. El dramaturgo nunca habl¨® de ello con su padre, que falleci¨® en 2013 ¡ª¡±era un tema tab¨², hab¨ªa un enorme silencio en torno a ello¡±¡ª. Ahora, Sanzol ha decidido, en su primera creaci¨®n como director del Centro Dram¨¢tico Nacional, arrancar del silencio la historia de su padre cura y la de tantos otros con la obra El bar que se trag¨® a todos los espa?oles. Es una manera de dar luz y devolver la dignidad a todos aquellos hombres y mujeres que no reconocen su vida pasada como propia y quieren reconstruir una vida nueva, y que se arriesgan a hacerlo.

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¡°Donald Trump es el ejemplo perfecto hoy de la autodestrucci¨®n por el poder de Macbeth¡±

La funci¨®n es todo un alarde dramat¨²rgico, con nueve actores que dan vida a 50 personajes (solo Francesco Carril y Natalia Huarte interpretan un ¨²nico papel), que se mueven en el universo de un bar que cambia y se transforma para realizar un viaje ¨¦pico por el tiempo y por el mundo, con curas, monjas, polic¨ªas americanos, exiliados espa?oles, mujeres solitarias, propietarios de bares, rancheros tejanos y hasta el propio Martin Luther King Jr. Elena Gonz¨¢lez, David Lorente, Nuria Menc¨ªa, Jes¨²s Noguero, Albert Ribalta, Jimmy Roca y Camila Viyuela completan el reparto de este espect¨¢culo que se estrena este viernes en el Teatro Valle Incl¨¢n, de Madrid, hasta el pr¨®ximo 4 de abril. ¡°Es una especie de odisea, del viaje de ese h¨¦roe que cruza Estados Unidos, desde Texas a San Francisco, que vuelve a Espa?a y que pasa por Dinamarca e Italia, siempre con el objetivo de volver a casa. Tiene mucho de Ulises¡±, asegura su autor y director.

El bar como met¨¢fora del mundo. Desde hace muchos a?os, Sanzol (Madrid, 48 a?os) ten¨ªa en mente escribir una historia en torno a un bar, por esa fuerza tan grande en la sociedad espa?ola donde todo se desarrolla dentro de ¨¦l. ¡°Negocios, historias de amor, celebraciones, cualquier asunto social tiene lugar en un bar¡±, explica el dramaturgo tras un ensayo en el Valle Incl¨¢n. Y es en torno a bares esparcidos por el mundo donde se va mostrando el viaje vital de Jorge Arizmendi, un cura navarro de 33 a?os decidido a abandonar el sacerdocio. ¡°Mi sorpresa ha sido que a trav¨¦s de este personaje ha surgido la radiograf¨ªa de la sociedad espa?ola de los a?os setenta del siglo pasado, en el que la transformaci¨®n fue brutal¡±, explica el director, que ha realizado una mezcla de realidad, ficci¨®n y recuerdos. No todo lo que se cuenta es verdad. ¡°La realidad est¨¢ en los impulsos vitales, en las preguntas sobre el sentido de la vida, sobre los conflictos sociales, la posibilidad de tener dos vidas en una. La ficci¨®n surge de transformar historias que me han contado y que he escuchado y que yo les he dado forma de aventura, porque una manera de entender la realidad es a trav¨¦s de la ficci¨®n¡±, a?ade Sanzol, Premio Nacional de Literatura Dram¨¢tica en 2017 por La respiraci¨®n, que naci¨® de un duelo personal sentimental.

Dispensas papales, las corruptelas en el seno de la Iglesia, o los obst¨¢culos con los que se topaban estos curas durante la dictadura franquista se suced¨ªan en un contexto en la que se mezclaban los temas pol¨ªticos con los sociales y religiosos y no era f¨¢cil tomar la decisi¨®n. Todo va surgiendo a lo largo de las tres horas de funci¨®n. ¡°Todav¨ªa son un misterio para m¨ª los secretos de mi padre. Creo que fue un intento de protegernos de cara a la sociedad, para que no nos sinti¨¦ramos mal por ser hijos de un cura. Con esta obra quiero dar respuestas a todo aquello que no me cont¨®. Es una manera de viajar con ¨¦l en la construcci¨®n de su nueva vida. A mis 48 a?os, siento una enorme empat¨ªa con la grandeza, la dificultad y la valent¨ªa de todos aquellos que quieren construir una nueva vida¡±. Tambi¨¦n sabe Sanzol ahora que aquellos rancheros del cuento fueron reales.