La sorpresa de un valioso testamento: el coleccionista Gerstenmaier lega su pintura flamenca a Valencia

Hab¨ªa mucha expectaci¨®n en el mundo del arte por conocer el testamento del coleccionista alem¨¢n Hans Rudolf Gerstenmaier, fallecido en Madrid el pasado 30 de enero a los 86 a?os. El mecenas atesor¨® una importante colecci¨®n de pintura flamenca y de otras escuelas desde que se instal¨® en Espa?a en los a?os sesenta. Hace dos a?os, ya don¨® al Museo del Prado 11 cuadros de artistas como Joaqu¨ªn Sorolla o Ignacio Zuloaga. A finales del pasado diciembre, Rodolfo, como lo conoc¨ªan sus amigos en Espa?a, modific¨® su testamento y, para sorpresa de los propios beneficiarios, leg¨® las 41 pinturas y grabados de su preciada colecci¨®n de arte flamenco al Museo de Bellas Artes de Valencia. Entre ellas se incluye el valioso lienzo Virgen de Cumberland, de Rubens.

El director de la pinacoteca valenciana, Pablo Gonz¨¢lez Tornel, estaba exultante este viernes por la ma?ana: ¡°Estoy muy feliz. No sab¨ªa nada. Ha sido una gran sorpresa. Cuando se procedi¨® esta semana a la apertura del testamento, me comunicaron que un mes antes hab¨ªa sido modificado para legar al museo la mayor parte de su colecci¨®n, una de las mejores que hay en Espa?a de pintura flamenca¡±. ¡°La virgen de Rubens es maravillosa, los bodegones y las naturalezas muertas son impresionantes, igual que la Adoraci¨®n de los pastores, de Martin de Vos. En fin, no me lo pod¨ªa creer. El Museo de Bellas Artes jam¨¢s podr¨ªa haber pensado en comprar ese rubens, porque no tiene suficiente presupuesto¡±, agrega.

?Y por qu¨¦ se ha elegido el museo de Valencia? ¡°Quiero pensar que es un reconocimiento al trabajo que estamos haciendo y a la apuesta de futuro del museo. Los responsables son Rodolfo, por supuesto, y su pareja, Leoncio. Hab¨ªa coincidido con ellos, pero tampoco somos amigos¡±, se?ala el responsable del museo desde el pasado verano. El historiador del arte de 43 a?os sugiere tambi¨¦n que la colecci¨®n de esta pinacoteca ten¨ªa una laguna importante en la pintura flamenca del barroco que ahora queda cubierta. Adem¨¢s, apunta que los fondos del Museo del Prado, por ejemplo, son muy ricos en obras de Rubens y de pintura del siglo XVII, procedentes de las colecciones reales, por lo que, l¨®gicamente, el Museo de Bellas Artes de Valencia, antes llamado de San Pio V, les prestar¨¢ mayor atenci¨®n.

De hecho, Gonz¨¢lez Tornel tiene previsto abrir una sala en el museo bautizada como Hans Rudolf Gerstenmaier & Leoncio Fern¨¢ndez Vallejo, con la idea de mostrar el legado barroco flamenco donado y rendir homenaje a los mecenas. Tambi¨¦n tiene intenci¨®n de enriquecer el espacio con el ¡°maravilloso¡± Autorretrato de Vel¨¢zquez (la pieza m¨¢s cotizada de la pinacoteca), una obra ¡°estupenda¡± de Ribera y ¡°el retrato reci¨¦n restaurado de Francisco de Moncada de Van Dyck¡±, disc¨ªpulo de Rubens. La previsi¨®n inicial es tenerla lista el pr¨®ximo verano.

¡°Reorganizaremos la planta primera de la colecci¨®n permanente para contar con una sala que ser¨¢ muy interesante¡±, afirma el director del museo, de titularidad estatal y gesti¨®n auton¨®mica de la Generalitat. El origen del museo se remonta a la colecci¨®n de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos. Sus tablas g¨®ticas valencianas de los siglos XIV y XV, el retablo completo de Gherardo Starnina y una Virgen con el ni?o y donante de Pinturicchio, encargada por los Borja (Borgia, en su graf¨ªa italiana), son algunas de sus joyas de relevancia internacional. Los fondos del museo dieron un salto cualitativo y cuantitativo con la donaci¨®n de 300 obras en 2004 realizada por Pere Maria Orts, historiador procedente de una familia de terratenientes de Benidorm, fallecido hace seis a?os.

Tasaci¨®n

El museo ha de tasar todav¨ªa las 41 piezas legadas ahora, que incluyen pinturas y grabados de artistas como Hendrick Goltzius o Jan Brueghel el Viejo, pero el director no duda de su gran valor tanto art¨ªstico como econ¨®mico. El resto de las m¨¢s de un centenar de obras de la colecci¨®n han sido heredadas por Leoncio Fern¨¢ndez.

La colecci¨®n de Gerstenmaier se ha podido ver en m¨¢s de 75 exposiciones en Espa?a y fuera del pa¨ªs. La publicaci¨®n de un cat¨¢logo era la ¨²nica condici¨®n que impon¨ªa el mecenas para su exhibici¨®n en cada muestra. ¡°El descubrimiento de la escuela flamenca fue casual, apoyado a trav¨¦s de la belleza. Me dejo llevar a trav¨¦s del ojo y me gustaba por el color, pero no puedo decir por qu¨¦ me decanto por el estilo flamenco¡±, explic¨® el empresario alem¨¢n en Zaragoza hace dos a?os

A su llegada a Espa?a, el mecenas consigui¨® contactos con las grandes firmas automovil¨ªsticas de su pa¨ªs de origen (Mercedes, Volkswagen, BMW) y mont¨® en 1964 su propia empresa de suministros de recambios (Gerstenmaier SA) en la que lleg¨® a tener 150 empleados y 30 sucursales en Espa?a. Vendi¨® la compa?¨ªa en 2000 y desde entonces se entreg¨® a las dos grandes pasiones de su vida: la jardiner¨ªa y el coleccionismo de arte.

En una entrevista con este peri¨®dico en 2019, el alem¨¢n aseguraba que nunca hab¨ªa comprado para especular y que solo se hab¨ªa guiado por su gusto, intuici¨®n y cari?o por las pinturas. Declin¨® valorar econ¨®micamente su colecci¨®n y revel¨® entonces, tras la donaci¨®n al Prado, que no hab¨ªa decidido el destino de su legado.