Denuncias de acoso sexual frustran el gran fen¨®meno editorial de la temporada en EE UU
La editorial de la biograf¨ªa autorizada de Philip Roth suspende la distribuci¨®n y promoci¨®n de la obra tras airearse las acusaciones de varias mujeres contra su autor, Blake Bailey

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El gran fen¨®meno editorial de la temporada en Estados Unidos, la biograf¨ªa definitiva y autorizada de Philip Roth, se ha truncado por las denuncias de acoso sexual y violaci¨®n contra su autor, Blake Bailey. La editorial W. W. Norton ha decidido este mi¨¦rcoles suspender la distribuci¨®n de Philip Roth. The Biography por ¡°la seriedad de las acusaciones¡± y cancelar la promoci¨®n del libro, que iba camino de una segunda edici¨®n de 10.000 ejemplares. La primera, de 50.000, se hab¨ªa colado esta semana en la lista de superventas del diario The New York Times tras su publicaci¨®n el pasado 6 de abril. Tambi¨¦n la agencia literaria de Bailey puso fin a su contrato de representaci¨®n el pasado domingo. El libro, seg¨²n confirman fuentes de W. W. Norton, estaba iniciando su andadura internacional, con la venta de los derechos a un buen n¨²mero de pa¨ªses e idiomas, incluido el espa?ol.
No es solo un rev¨¦s editorial, ni la deshonra p¨²blica del bi¨®grafo, que ha negado categ¨®ricamente unas acusaciones en la onda del movimiento MeToo. A la luz de las denuncias contra Bailey, su manera de relatar las escabrosas aventuras sexuales y la conocida misoginia de Roth ¡ªaspectos que vertebran el libro¡ª cobran otro sentido, entreverado de sospechas de connivencia o al menos complacencia ante las vivencias del novelista. ¡°Era una persona hacia la cual resultaba dif¨ªcil no sentir ternura¡±, confiesa Bailey en los agradecimientos.
Los testimonios contra el bi¨®grafo, de 57 a?os, se han multiplicado desde el domingo, cuando se conocieron las denuncias de exalumnas suyas en una universidad de Nueva Orleans en los noventa. Tres mujeres le acusaron de propasarse con ellas despu¨¦s de haberse ganado su confianza, gracias a un ambiente ¡°de bromas subidas de tono y permisividad¡± destinado a preparar el terreno para el sexo. Otra mujer le ha acusado de violaci¨®n. Esta ¨²ltima afirma que denunci¨® el hecho de forma an¨®nima a la editorial en 2018, en plena efervescencia del MeToo, y que no recibi¨® respuesta.
La agresi¨®n sexual se habr¨ªa producido en 2015, en el domicilio de Dwight Garner, un cr¨ªtico literario de The New York Times, el diario en el que la novelista Cynthia Ozick ha calificado la biograf¨ªa de ¡°obra literaria total¡±. The Washington Post la consider¨® ¡°un triunfo biogr¨¢fico¡±, mientras otros cr¨ªticos atribu¨ªan a Bailey el m¨¦rito de haber perge?ado un g¨¦nero total, a la manera de la ¨®pera, en literatura.
Bailey parec¨ªa haber alcanzado la cima de su carrera con la biograf¨ªa de Roth. Pero la expectaci¨®n generada por una promoci¨®n exhaustiva ¡ªincluido un jugoso adelanto¡ª se ha vuelto en su contra. Semejante ostracismo resulta in¨¦dito en el mundo editorial, que hasta la fecha se ha limitado a retirar obras por acusaciones de plagio o por inexactitudes o falsedades del contenido.
A lo largo de 900 p¨¢ginas, Bailey recrea el universo creativo de Roth (1933-2018). Lo hizo gracias al estrecho contacto establecido durante casi seis a?os con el escritor, seg¨²n explicaba la semana pasada Bailey a este diario por correo electr¨®nico, antes de conocerse las acusaciones. Habl¨® de ¡°una semana entera en Connecticut, en el verano de 2012, a raz¨®n de seis horas al d¨ªa de entrevistas; m¨¢s al menos dos o tres reuniones al a?o con ¨¦l hasta su muerte, por no hablar de las much¨ªsimas cartas y llamadas de tel¨¦fono intercambiadas¡±. As¨ª perge?¨® una obra monumental que muchos enra¨ªzan en la estirpe de la novela del siglo XIX, pues no aborda solo el retrato de una persona, sino la visi¨®n con gran angular de una ¨¦poca: la gran ¨¦pica estadounidense del siglo XX. La forja de la clase media, y las vivencias de la infinidad de h¨¦roes tr¨¢gicos que se alzaron de puntillas sobre la desolaci¨®n de la posguerra.
En un intercambio de correos con EL PA?S previo al esc¨¢ndalo, el bi¨®grafo explicaba c¨®mo hab¨ªa sido su relaci¨®n con el autor: ¡°Mantuve una adecuada distancia profesional con mi sujeto de estudio, aunque yo le ten¨ªa cari?o y viceversa¡±. Bailey no ha respondido este jueves a los mensajes de este diario sobre las acusaciones en su contra.
Conocido por retratar a los escritores John Cheever y Richard Yates, Bailey tuvo un acceso casi ilimitado a los archivos de Roth. Fue ¨¦l quien se acerc¨® al novelista en 2012, tras saber que le dejaba el campo libre su anterior bi¨®grafo, un viejo amigo de Roth. El escritor lo contrat¨® tras someterle a un exhaustivo examen ¡°sobre la tradici¨®n literaria judeoamericana¡± y pretendi¨® dirigir la investigaci¨®n reclutando a amigos para entrevistas con las preguntas que ¨¦l dictaba, mientras ped¨ªa a Bailey: ¡°No quiero que me rehabilites; solo haz que parezca interesante¡±.
En una reciente comparecencia en p¨²blico, Bailey cont¨® que convenci¨® al novelista asegur¨¢ndole que no adoptar¨ªa ¡°una visi¨®n demasiado remilgada o cr¨ªtica de un hombre con esa florida vida amorosa¡±, recuerda The New York Times. Una frase a la que hoy sacan punta las contadas voces que han visto en su narraci¨®n de las vivencias de Roth, si no simpat¨ªa, s¨ª al menos empat¨ªa.
La promoci¨®n del libro abund¨® en pormenores sobre la faceta m¨¢s lujuriosa y mis¨®gina de Roth. Su pulsi¨®n sexual era bien conocida desde la publicaci¨®n de El lamento de Portnoy (1969), protagonizada por un adolescente obseso de la masturbaci¨®n, que escandaliz¨® a los rabinos de Newark. La dimensi¨®n sexual del personaje (¡°las erecciones de 1950 eran exactamente las mismas que las de 2012, solo que en 1950 no ten¨ªan a d¨®nde ir¡±), la pr¨¢ctica cosificaci¨®n de sus conquistas o las tormentosas relaciones con sus dos esposas, basadas tanto en el enga?o como en la debida veneraci¨®n al escritor, recibieron amplia cobertura. Con una de sus amigas universitarias, Roth recordaba una felaci¨®n, ¡°algo que hac¨ªan las putas¡±, forzada. Al trasladarse a Chicago para estudiar se propuso un ideal de vida byroniano: ¡°Libros de d¨ªa, mujeres de noche¡±. Todas las citas pertenecen a la biograf¨ªa.
Hasta que el efecto bumer¨¢n de la promoci¨®n y el ¨¦xito de su libro acab¨® golpe¨¢ndole, Bailey preparaba un nuevo proyecto. ¡°Puede que est¨¦ trabajando en una biograf¨ªa, en realidad solo estoy recolectando datos en este momento, as¨ª que prefiero no especificar un tema¡±, explicaba la semana pasada. Sobre el m¨¦todo utilizado para evitar la caracterizaci¨®n de la persona en personaje, dec¨ªa: ¡°No tengo ideas preconcebidas sobre mis temas. Sigo la a menudo vasta evidencia y dejo que las fichas caigan donde puedan¡±. Las fichas de la escalera de la fama se han derrumbado, al menos temporalmente, sobre Bailey.

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