Cuando una adolescente descubre que su padre es mafioso

Chiara tiene 16 a?os, y una vida pl¨¢cida de adolescente ¡ªtodo lo pl¨¢cida que puede ser en esa etapa juvenil¡ª en Gioia Tauro, una peque?a ciudad con un importante puerto comercial en la costa calabresa. Durante el 18? cumplea?os de su hermana mayor, su padre se muestra taciturno, alica¨ªdo. Al d¨ªa siguiente desaparece y deja a Chiara sumida en dudas... hasta que descubre que su progenitor es un mando medio de la ¡®Ndrangheta, la mafia de Reggio Calabria. As¨ª arranca Para Chiara, una de las pel¨ªculas que sorprendieron en el pasado festival de Cannes, donde recibi¨® el reconocimiento a mejor filme de Label Europa Cinemas (la asociaci¨®n de las salas de cine de autor), y que se estrena en Espa?a el domingo 8 de noviembre como parte de la secci¨®n oficial del Festival de Cine Europeo de Sevilla, que se inicia este viernes.

Con Para Chiara, su director, Jonas Carpignano (Nueva York, 37 a?os), cierra su trilog¨ªa calabresa, un tr¨ªo de fascinantes trabajos que inici¨® con su visi¨®n de la inmigraci¨®n en Mediterranea (2015) y continu¨® con A Ciambra (2017), retrato de la comunidad gitana de la zona, y con la que gan¨® el David di Donatello (los Oscar italianos) a la mejor direcci¨®n.

Carpignano no viajar¨¢ a Sevilla, por su reciente paternidad. Aparece feliz y relajado en una videoconferencia a la que se asomar¨¢ su madre, de visita en Italia. El cineasta se crio en Nueva York. Su padre, un profesor, pertenece a una familia romana de realizadores publicitarios y cinematogr¨¢ficos. Su madre, procedente de Barbados, aporta a su ADN un linaje de m¨²sicos de jazz. Carpignano se educ¨® a ambos lados del Atl¨¢ntico y ha residido durante la ¨²ltima d¨¦cada en Gioia Tauro. ¡°Cerrada la trilog¨ªa, espero que mi siguiente trabajo no me obligue a vivir otros diez a?os en el lugar en que se desarrolle¡±, bromea. ¡°Dicho lo cual, es cierto que mi estilo semidocumental se beneficia de mi conocimiento¡±, a?ade.

Tanto, que conoci¨® a su actriz protagonista, Swamy Rotolo, a los nueve a?os. ¡°Y el guion lo escrib¨ª para ella, y su familia es la suya real¡±, cuenta Carpignano. ¡°Por supuesto, no pertenecen a la ¡®Ndrangheta. Y por ello el rodaje fue bastante pl¨¢cido, un trabajo entre amigos basado en la mutua confianza. Me he beneficiado de esta d¨¦cada en Gioia Tauro [al ser puerto comercial la mafia lo usa como epicentro de sus actividades en la zona], y de ver a familias con miembros detenidos, de asistir a la terrible influencia de esa delincuencia en los vecinos¡±.

Chiara ha llegado a su adolescencia en un estado tal de inocencia sobre lo que le rodea, que descubre noqueada que efectivamente las pistas sobre las actividades de su padre le han acompa?ado durante a?os. ¡°A Ciambra y Para Chiara se benefician de un peque?o truco. Pio, el chaval protagonista de la primera, era analfabeto. A Swamy solo le di una sinopsis. Cada ma?ana le contaba lo que iba a pasar y le daba sus p¨¢ginas, y como rodamos en orden cronol¨®gico, su sorpresa era genuina. En ambos filmes, sus protagonistas tienen la misma informaci¨®n que el p¨²blico, y su asombro es real¡±.

¡®Los Soprano¡¯, contada por Meadow

En feliz definici¨®n de un cr¨ªtico brit¨¢nico, Para Chiara es como si Los Soprano fuera contada por Meadow, la hija mayor de Tony. A Carpignano se le escapa una carcajada al escuchar la frase. ¡°?Es muy chula, no la conoc¨ªa! En realidad, Meadow s¨ª sab¨ªa a qu¨¦ se dedicaba su progenitor. Chiara no, y su padre adem¨¢s no es un capo. Aunque es cierto que he usado a una adolescente porque es el momento vital en el que se construye el car¨¢cter individual, en el que el ser humano aprende a desenvolverse en el mundo. Chiara se maneja en un mundo global de redes sociales, y a la vez su destino est¨¢ marcado por su comunidad, por cosas que no conoc¨ªa. Sabe mucho y a la vez conoce poco¡±, reflexiona. ¡°En este caso he usado un estilo mucho m¨¢s narrativo, menos experimental, para que la historia avanzara¡±. Con ello ha logrado que la pel¨ªcula, que tiene distribuci¨®n para su estreno comercial en Espa?a, sea m¨¢s accesible al p¨²blico general.

En los ¨²ltimos a?os, Calabria ha estado presente en el cine italiano (y en las salas europeas del cine de autor) gracias a los filmes de Carpignano y de Michelangelo Frammartino, el director de Le quattro volte (2010), de quien tambi¨¦n habr¨¢ pel¨ªcula en Sevilla: Il buco (2021), un autor que est¨¢ explorando m¨¢s el mundo rural de ese sur de Italia, la punta de la bota que golpea Sicilia. ¡°Es una regi¨®n repleta de contradicciones. Lo bonito es que Frammartino y yo conformamos las dos caras de una misma moneda¡±, explica Carpignano, al que le atrae mucho el concepto de los binomios contradictorios. ¡°En Calabria hay adolescentes con redes sociales y se?oras de negro, hay gente joven luchando por crear arte y mafiosos de vieja estampa. Nunca he visto tiroteos en la calle ni sangre, ni me han llegado ecos de la omert¨¢ [la ley del silencio], y sin embargo la mafia est¨¢ ah¨ª, movi¨¦ndose en las sombras de una manera tecnol¨®gicamente m¨¢s actual¡±.

?Lograr¨¢ alg¨²n d¨ªa Italia derrotar a la mafia y a la ¡®Ndragheta? ¡°No creo que debamos hablar de derrota o de soluci¨®n, y s¨ª m¨¢s de entender qu¨¦ es y por qu¨¦ a¨²n hoy sigue activa¡±, apunta el cineasta. ¡°Empec¨¦ a rodar antes del confinamiento y acab¨¦ cuando pudimos volver a la calle. Y durante esa cuarentena, el Gobierno entendi¨® que ten¨ªa que repartir ayudas econ¨®micas en los pueblos m¨¢s peque?os y las comunidades m¨¢s necesitadas porque si ¨¦l no lo hac¨ªa, lo har¨ªa la mafia. Es importante alejarnos de un an¨¢lisis simplista que la considere un movimiento diab¨®lico compuesto por matones, y que solo la omert¨¢ impide a la gente delatarles. Hay un componente econ¨®mico fundamental, y esa es la clave para combatirla¡±.