D¨ªa del Libro: cinco buenas novelas negras actuales escritas por mujeres

Hace tiempo que la novela negra ha dejado de ser progresivamente un coto m¨¢s o menos privado del hombre blanco de clase media o similar, pero nunca est¨¢ de m¨¢s celebrar la diversidad centrando el tiro en un conjunto de novedades de distinto calado literario pero que en todo caso merecen la pena. Thrillers bien construidos y enfoques originales, un producto inclasificable y por momentos genial de Ottessa Moshfegh y dos estrenos m¨¢s que sorprendentes forman esta lista.

?No hay m¨¢s? Por supuesto. Si les apetece un buen thriller, por ejemplo, pueden visitar la obra de Ruth Ware (Salamandra tiene tres de sus libros) o, si lo suyo es el policial, en lo que esperamos lo nuevo de Tana French en mayo, pueden deleitarse con las aventuras de Jackson Brodi relatadas por la original voz de Kate Atkinson (AdN ha recuperado los dos primeros de la serie y sac¨® tambi¨¦n el ¨²ltimo hasta ahora, Cielo interminable).

Entonces ?por qu¨¦ estos? Porque est¨¢n en las librer¨ªas desde hace poco, porque, menos una, son autoras no tan conocidas en Espa?a y, sobre todo, porque me los he le¨ªdo y creo que merecen la pena. Pasen, lean, elijan y vayan a comprar.

M¨¢s informaci¨®n

Cinco ¡®thrillers¡¯ y un ¡®true crime¡¯ para leer sin parar

Cinco apuestas negras de editoriales peque?as

La muerte en sus manos, Ottessa Moshfegh (Alfaguara, traducci¨®n de Inmaculada C. P¨¦rez). Desde Mi nombre era Eileen (Alfaguara), Moshfegh se ha tomado la molestia de estirar los bordes del g¨¦nero y entrar y salir de ¨¦l con comodidad. En esta ocasi¨®n juega con habilidad con algunos t¨®picos de la novela cl¨¢sica de misterio en una historia que habla tambi¨¦n de los efectos de la soledad y el aislamiento. Vesta Gul se encuentra en su paseo por el bosque de su finca con una nota que habla de la muerte de una mujer llamada Magda. ?Qui¨¦n la ha escrito? ?Qui¨¦n es la v¨ªctima? ?Por qu¨¦ la han matado? ?Y d¨®nde est¨¢ el cad¨¢ver? Son algunas de las preguntas que se hace la se?ora Gul, que trata de reconstruir el crimen en su cabeza sin saber siquiera si ha ocurrido. Pero nada es convencional en su desarrollo, hay una escena casi t¨¦trica de ritmo magistral, se siente la angustia de la protagonista, su progresiva obsesi¨®n, sus crisis. Es una novela original de la que es mejor no decir mucho m¨¢s.

Est¨¢s muerta, nada puede da?arte, Nicola Maye Goldberg (RBA, traducci¨®n de Juan Pascual Mart¨ªnez). Volvemos a los enfoques sorprendentes en esta novela que parte de una premisa clara: sabemos lo que ha pasado desde la primera p¨¢gina, sabemos que Sara ha sido degollada por su novio. Lo que hace Goldberg es acercarnos a la figura de la v¨ªctima a trav¨¦s del efecto que su muerte ha producido en otras vidas (su hermana, su padre, una periodista que se obsesiona con el caso, un amigo del asesino, etc). La construcci¨®n del libro, en forma de peque?os relatos que terminan como al mitad ¡ªpuro estilo Carver, al que le emparenta tambi¨¦n su retrato de la insatisfacci¨®n contempor¨¢nea¡ª ayuda a tener una perspectiva completa del crimen desde varios puntos de vista. Me encanta el acercamiento que hay al miedo de las mujeres asediadas por el monstruo machista. Y todo ello apoyado en una estructura de policial construida con eficacia.

Los buenos hijos, Rosa Ribas (Tusquets). Vuelven los Hern¨¢ndez, la familia de detectives que debut¨® en Un asunto demasiado familiar, un grupo un tanto oscuro pero ?qu¨¦ familia no lo es si se mira con la suficiente cercan¨ªa? El control que Ribas tiene del policial cl¨¢sico se mezcla con la reflexi¨®n sobre la familia y con un desarrollo independiente de la trama de cada uno de los personajes que consigue enganchar al lector. ¡°Si conoces todos los secretos de la gente, no podr¨¢s quererla¡±, asegura uno de los hermanos en un momento de la novela. Secretos, mentiras, lealtad y traiciones se entrelazan en esta novela que no pierde de vista el procedimental. Hay varios casos que se abren y se cierran y una trama criminal central, que Ribas administra con pausa y ritmo. Aqu¨ª, los Hern¨¢ndez tienen que investigar el suicidio de una joven, un caso que los cambiar¨¢ para siempre y los llevar¨¢ por caminos oscuros. ¡°Necesitaba saberlo¡±, dos palabras que marcan la vida de Nora, Amelia, Marc, Mateo, Lola¡­ ¡°Vamos a por ellos¡±, dice la matriarca en el punto de inflexi¨®n de la novela y de las vidas de esta peculiar familia que sabe nadar por aguas oscuras pero que no sale indemne de sus aventuras. La vida, tal cual.

El s¨®tano de Oxford, Cara Hunter (Duomo, traducci¨®n de Bego?a Prat). Hay muchas cosas de esta novela que me gustan. La primera, es que es un cl¨¢sico policial. Imaginen una de Tana French o Line of Duty. Por ah¨ª va la cosa. Es decir: convencional pero muy bueno. La segunda: est¨¢ ambientada en Oxford y sale la polic¨ªa de Thames Valley. Los fans del detective Morse ya saben por d¨®nde voy. La tercera tiene que ver con el protagonista. Hunter tiene un personaje del perfil y la complejidad de Fawley y no abusa de ¨¦l, cede espacio a otros para formar un relato coral. La primera persona que usa para tratar los momentos en los que aparece Fawley me result¨® extra?a por el contraste con el resto, pero funciona. ?Ah! ?Que de qu¨¦ va? Bueno, pues del hallazgo en el sotano de un anciano con principio de demencia senil de una joven y un ni?o con signos de llevar all¨ª encerrados mucho tiempo. Les suena, ?verdad? Bueno, los agentes tiran del hilo y con esta excusa argumental se construye un policial muy s¨®lido.

El juicio de Miracle Creek, Angie Kim (Motus, traducci¨®n de Constanza Fantin). No pod¨ªa faltar un buen thriller judicial en esta selecci¨®n. La autora gan¨® con esta novela el Edgar a la mejor primera obra. ?Qu¨¦ vio el jurado del prestigioso premio en este relato de tribunales? Pues imagino que lo que salta a la vista: que el ritmo es bueno, las sorpresas est¨¢n puestas en su sitio, los grandes temas que aborda (madres colapsadas por sus obligaciones, racismo, fracasos vitales) solo aparecen en su justa medida, etc. ?De qu¨¦ va? Pues es la historia de una familia surcoreana emigrada a EE UU que se gana la vida con una c¨¢psula hiperb¨¢rica ofrecida como terapia alternativa para ni?os con graves problemas. Cuando la c¨¢psula estalla y el incendio provoca la muerte de varios pacientes, todas las miradas se dirigen hacia la madre de un ni?o con autismo, que curiosamente no estaba en ese momento all¨ª y cuyo comportamiento la convierte en la principal sospechosa. A partir de ah¨ª, las grandes preguntas. ?Qu¨¦ har¨ªas por salvar a tu familia de lo peor? ?Por qu¨¦ siempre hay alguien que miente? Una muy buena primera novela que sirve de presentaci¨®n aqu¨ª de Motus, un proyecto editorial que ha aterrizado con fuerza en Espa?a.