La ¡°normalidad acelerada¡± de los festivales de m¨²sica marca un 2022 decisivo
Despu¨¦s de dos a?os bajo m¨ªnimos, las citas de varios d¨ªas con pop y rock regresan con optimismo, pero afrontando retos como la excesiva oferta, la subida de precios y el eclecticismo en el cartel
Ya lo anunciaron cuando estall¨® la pandemia, hace dos a?os: ¡°Seremos los ¨²ltimos en salir de esto¡±. El virus cambi¨® los planes de todo el sector de los festivales de m¨²sica de la noche a la ma?ana y oblig¨® a los organizadores a reinventarse con nuevos formatos. Algunos, para resistir, han tenido que posponer sus ediciones y simplemente, esperar. Muchos de sus trabajadores han tenido que buscar otro empleo y reconvertirse. Seg¨²n el ¨²ltimo Anuario de la M¨²sica en Vivo, publicado por la Asociaci¨®n de Promotores Musicales (APM), la m¨²sica en directo en Espa?a recaud¨® el a?o pasado por la venta de entradas 157 millones de euros, un 13% m¨¢s que en 2020, el a?o de la ¡°debacle ins¨®lita¡±, cuando el virus provoc¨® una ca¨ªda del 63% de la facturaci¨®n.
Desde APM, su presidente, Albert Salmer¨®n, admite que llegan con la lengua fuera y que aunque est¨¢n en la cuerda floja ve una cierta recuperaci¨®n desde el pasado verano, cuando las medidas empezaron a relajarse: ¡°El ¨²ltimo diciembre ha sido el segundo mejor de la historia desde que tenemos datos¡±. Un rayo de esperanza, pero que se queda muy lejos de las cifras r¨¦cord de 2019, cuando estas citas amasaron 382 millones. Siete comunidades, entre las que est¨¢n Andaluc¨ªa y Madrid, presentan peores balances que en 2020. Desde esta asociaci¨®n, que forma parte de la Federaci¨®n de la M¨²sica de Espa?a (Es_M¨²sica), admiten que no ha sido visible una desaparici¨®n de festivales, pero creen que esto se ver¨¢ el pr¨®ximo a?o: ¡°Al rev¨¦s, han aparecido nuevos eventos y formatos. Cuando termine la temporada veremos qui¨¦n ha podido sobrevivir¡±.
Y en este momento, tras m¨¢s de tres a?os sin pisar grandes recintos, por fin, vuelve la normalidad. Esta es la idea con la que trabajan los equipos de las principales promotoras musicales espa?olas. Despu¨¦s de todo lo vivido, dicen sentirse en una especie de ¡°calma tensa¡±. Las autoridades sanitarias ya han eliminado el uso de la mascarilla casi por completo, pero apelan a la responsabilidad individual y se fijan en experiencias recientes como el festival estadounidense Coachella. Adem¨¢s, afrontan otros retos. ?C¨®mo recuperar el tiempo y el dinero perdidos despu¨¦s de dos ediciones frustradas? ?Existir¨¢ p¨²blico para el super¨¢vit de festivales de este a?o? ?O ser¨¢ necesario sopesar la posibilidad del eclecticismo en la programaci¨®n (o sea, juntar en una misma cita a una estrella del reguet¨®n con una banda de rock), tendencia que ya se impone en carteles nacionales como el Bilbao BBK Live, que contar¨¢ con Placebo y J Balvin, y a nivel internacional. Con este contexto, el periodo de grandes festivales en Espa?a se inicia este fin de semana (28, 29 y 30 de abril) en Villarrobledo (Albacete), donde se espera que m¨¢s de 200.000 personas acudan al 25 aniversario del Vi?a Rock.
¡°Nos reinventamos con ciclos, pero ten¨ªamos muchas limitaciones. En 2021 nos dejaron trabajar y desde octubre hay menos restricciones. Ahora, por fin, estamos de vuelta y tenemos muchas ganas¡±, se?ala plet¨®rica F¨¢tima Rodr¨ªguez, que lleva 30 a?os en el mundo de la m¨²sica y dise?a la programaci¨®n de importantes citas como el Weekend Beach (Torre del Mar, M¨¢laga). Javier Arn¨¢iz, director de Mad Cool (Madrid), que este a?o durar¨¢ cinco d¨ªas y que programar¨¢ a Florence + The Machine, Metallica o Muse, califica la situaci¨®n como una ¡°normalidad acelerada¡±.
¡°El regreso se est¨¢ produciendo de golpe porque en este 2022 hay una gran oferta de festivales, giras y conciertos¡±, asegura Arn¨¢iz, que confirma que en su pr¨®xima edici¨®n recibir¨¢n a 300.000 personas en el recinto ubicado en Valdebebas. Germ¨¢n Quimas¨®, director de Sonde3, la empresa que est¨¢ detr¨¢s de festivales como Pirineos Sur (Lanuza, Huesca), R¨ªo Babel (Madrid) o SanSan (Benic¨¤ssim), tambi¨¦n se muestra optimista: ¡°An¨ªmicamente hemos regresado a la prepandemia¡±. Con la confianza de que lo peor ya ha pasado, atr¨¢s quedan las limitaciones de aforo y estar sentados en los conciertos. Ricard Robles, fundador del S¨®nar (Barcelona), asegura que la expectativa es disfrutar como se hac¨ªa en 2019. ¡°Era necesario volver y lo vamos a hacer igual o con m¨¢s fuerza¡±. As¨ª lo asegura tambi¨¦n Eva Castillo, directora de comunicaci¨®n de Last Tour, organizadores del BBK Live, quien tampoco oculta sus ganas de sentir otra vez ¡°la energ¨ªa del directo y de trabajar para anunciar y no para cancelar¡±.
Todo este optimismo no es casualidad: es fruto de una fidelidad, la que ha demostrado el p¨²blico de los principales festivales desde marzo de 2020. En algunos casos, hasta el 90% de las personas que ten¨ªan su entrada ya comprada la conserv¨®. Iv¨¢n M¨¦ndez, de la compa?¨ªa organizadora Bring the Noise, aporta datos: ¡°El Resurrection Fest (Viveiro, Lugo) y O Son do Cami?o (Santiago de Compostela) las agotaron en su momento y ahora hay m¨¢s ganas que nunca: la demanda del p¨²blico es muy fuerte¡±. Desde Producciones Baltimore, Jos¨¦ Manuel Pi?eiro est¨¢ deseando abrir las puertas de sus festivales, marcas emblem¨¢ticas como el Low Festival de Benidorm y el Warm Up de Murcia, que programa este fin de semana a Bastille o Izal: ¡°La reactivaci¨®n de la venta va muy bien, se juntan los fieles que nunca fallan y las ganas de festival. Tenemos mejores cifras que antes de la pandemia¡±.
El responsable de Mad Cool tiene claro que esta edici¨®n servir¨¢ para tapar agujeros y seguir adelante con el proyecto: ¡°Para sobrevivir a estos dos a?os de p¨¦rdidas hemos tenido que volver a financiarnos e hipotecarnos¡±. A pesar del optimismo de la vuelta, los promotores tambi¨¦n coinciden en que este a?o, m¨¢s que nunca, la gente est¨¢ m¨¢s cautelosa y espera hasta el ¨²ltimo momento para comprar su entrada, y desde la APM advierten de un c¨®ctel explosivo que tendr¨¢ su efecto en un futuro no muy lejano: la incertidumbre y la inflaci¨®n. ¡°Nos estamos comiendo la subida de precios con patatas y estamos tratando de que el p¨²blico note lo m¨ªnimo este incremento para no darles m¨¢s inseguridad¡±, asegura Carol Rodr¨ªguez, responsable de la divisi¨®n de festivales de esta asociaci¨®n.
La sobreoferta festivalera
Normalmente, despu¨¦s de la tormenta llega la calma, pero en el circuito de los festivales la calma significa movimiento. Y lo cierto es que tanto artistas como promotores se han lanzado a los escenarios. ¡°Este a?o nos hemos vuelto locos, todo el mundo quiere girar y aunque se venden m¨¢s entradas, no hay gente para tanto evento¡±, resume Quimas¨®. Asegura que hay ansiedad por estos dos a?os perdidos y que ahora tienen que acertar y convencer: ¡°M¨¢s de uno va a salir mal parado porque en esta ocasi¨®n asumimos m¨¢s riesgos¡±. A la APM le parece que el sector est¨¢ viviendo un a?o de transici¨®n, con muchas citas aplazados y otros nuevos, una saturaci¨®n que seg¨²n Salmer¨®n ha provocado que apenas haya fechas disponibles en los recintos para celebrar actuaciones musicales.
Las promotoras saben que el p¨²blico va a tener que elegir entre muchas opciones, pero son conscientes de que algunos parten con ventaja, ya que vendieron parte de sus entradas en 2019. Aun as¨ª, los festivales siguen apostando a lo grande, buscan recintos m¨¢s amplios para intentar multiplicar sus aforos e incluso crean sedes en nuevas ciudades, como el S¨®nar de Lisboa, que ha reunido a 27.000 personas en su primera edici¨®n. ¡°La demanda es muy fuerte, m¨¢s que nunca en todos estos a?os. Para los nuevos va a ser complicado, pero los asentados tendr¨¢n p¨²blico¡±, asegura M¨¦ndez, que lleva con Resurrection Fest desde 2006.
Azkena Rock (Vitoria), que este verano cumple 20 a?os con Patti Smith, sumar¨¢ una jornada m¨¢s de conciertos. Y la apuesta de Last Tour, su promotora, por la m¨²sica en directo viene cargada de nuevos proyectos, como Cala Mijas, un festival internacional pensado para atraer a 40.000 personas diarias y que est¨¢ ubicado en esta localidad de la costa de M¨¢laga. Se estrenar¨¢ en septiembre y acoger¨¢ la ¨²nica fecha de Arctic Monkeys en Espa?a. En este caso, Castillo admite la importancia del apoyo institucional: ¡°Por fin vuelven las ciudades que promueven agendas culturales y que buscan festivales para promocionarse¡±. Precisamente en esta provincia se vivir¨¢ otro debut importante en el circuito nacional, el del Andaluc¨ªa Big Festival, impulsado por la Junta de Andaluc¨ªa y Mad Cool Festival en colaboraci¨®n con el Ayuntamiento de M¨¢laga.
El apoyo de la Administraci¨®n
F¨¢tima Rodr¨ªguez es directa cuando se habla de la Administraci¨®n: ¡°El promotor se lo juega todo, falta apostar por la m¨²sica en directo con partidas econ¨®micas que vayan incluidas en los Presupuestos¡±. Los pr¨¦stamos ICO y los ERTE les han permitido sobrevivir durante la pandemia, e incluso transformarse, pero recuerdan que la industria sufre un problema de fondo. ¡°No ha sido f¨¢cil para nadie, pero nosotros arrastramos un problema grave: la cultura no se considera un valor y las Administraciones no dedican esfuerzos suficientes¡±, concluye Robles desde el S¨®nar de Barcelona, que este a?o cuenta con uno de los carteles m¨¢s ambiciosos de los ¨²ltimos a?os, liderado por The Blaze o Moderat.
Salmer¨®n, desde APM, admite que las ayudas son escasas y se queja de que el Gobierno no las haya extendido en el tiempo: ¡°Nos hemos sentido desnudos y poco apoyados. Se nos puso dentro de un paquete general donde los apoyos eran limitados¡±. Desde la asociaci¨®n quieren dejar claras sus reivindicaciones: ¡°Seguimos sin ser comprendidos, no se entiende el impacto que provocan los festivales, falta preocupaci¨®n¡±. Cada uno tiene sus apoyos y estos var¨ªan mucho seg¨²n la Administraci¨®n local y auton¨®mica.
M¨¢s ecl¨¦cticos y m¨¢s reguet¨®n
En Espa?a hay festivales para todos los gustos, un millar de propuestas que se adaptan a cualquier deseo musical y tama?o y que deben luchar contra dos a?os de ausencia. Desde el sector saben que lo ecl¨¦ctico triunfa fuera y entre los m¨¢s j¨®venes. Por eso, cada vez m¨¢s, los programadores apuestan por la mezcla de estilos musicales. Un ejemplo de que el ¨¦xito puede convivir con ambas visiones es Resurrection, un festival ultraespecializado (en rock duro), y O Son do Cami?o, que combina a grandes artistas de distintos g¨¦neros como Liam Gallagher, Sebasti¨¢n Yatra o Justice. Quimas¨® asegura que en SanSan siempre han intentado mezclar para romper con lo mismo de siempre (programaciones pr¨¢cticamente similares) y cree necesario marcar la diferencia para que el p¨²blico pueda identificarse con la marca. Un ejemplo de diversidad son los datos publicados por la APM, donde se observa que en 2021 las giras que m¨¢s p¨²blico reunieron en Espa?a fueron las de Dani Mart¨ªn, Jos¨¦ Luis Perales, Aitana, Camilo o Robe. Y el festival de ciclo m¨¢s exitoso fue el Starlite de Marbella, que reuni¨® a casi 100.000 personas a lo largo de todo el verano para disfrutar de artistas totalmente dispares como Raphael y Maluma.
F¨¢tima Rodr¨ªguez, programadora del Puro Latino, uno de los festivales de reguet¨®n de referencia en Espa?a, con sede en varias ciudades, asegura que este es el g¨¦nero de moda: ¡°Se consume mucho, sobre todo entre los m¨¢s j¨®venes¡±. Considera que todo evoluciona y que las modas siempre han existido, por eso no cree que el indie haya desaparecido del circuito, sino que convive con otros g¨¦neros. ¡°Cuando se estren¨® el Weekend se lanz¨® como un festival ecl¨¦ctico donde hab¨ªa rock y mestizaje. La mezcla es lo que gusta¡±. Piensa que Spotify tiene mucho que ver con esta variedad, por eso apuesta por festivales con diferentes escenarios para cada g¨¦nero. A¨²n as¨ª, Pi?eiro considera que sigue habiendo puristas entre los organizadores y los usuarios: ¡°Es un mal end¨¦mico de Espa?a. En otros pa¨ªses hay carteles m¨¢s ecl¨¦cticos donde el p¨²blico se encuentra de todo. Aqu¨ª tenemos cierto cors¨¦ todav¨ªa, pero los j¨®venes son m¨¢s abiertos y es nuestra responsabilidad como programadores adaptarnos a esas necesidades¡±.
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