El protagonista de ¡®El juego del calamar¡¯ arrasa en Cannes con un ¡®thriller¡¯ de esp¨ªas en su debut como director

No hab¨ªa nada que le hiciera sospechar al actor Lee Jung-jae el bombazo que ten¨ªan entre manos cuando grabaron El juego del calamar, el ¨²ltimo gran ¨¦xito de la plataforma Netflix. ¡°En realidad, hay un mont¨®n de contenido audiovisual coreano similar a El juego del calamar¡±, cont¨® Lee en una entrevista previa a Cannes en la revista Deadline. ¡°As¨ª que estoy seguro de que veremos m¨¢s ¨¦xitos como el de esta serie¡±. ?l mismo tiene uno entre manos, Hunt, a tenor de lo vivido la madrugada del jueves al viernes en el festival, cuando el thriller de esp¨ªas que ha coprotagonizado, escrito, producido y dirigido ¡ªdebuta en la realizaci¨®n¡ª volvi¨® loco al p¨²blico en su estreno mundial en el auditorio Lumi¨¨re, con capacidad para 2.300 personas, que rugieron y aplaudieron en sus secuencias ¨¢lgidas.

Con Hunt, Lee Jung-jae (Se¨²l, 49 a?os) culmina un proceso creativo de a?os, desde que ley¨® por primera vez el guion, que le presentaron para que lo protagonizara. De ¨¦l fue la idea, hacia 2016, de que en vez de un jefe esp¨ªa hubiera dos. ¡°Fue duro crear el equilibrio entre ambas figuras. Pero como se desarrolla en los a?os ochenta, con lo que eso incrementaba los costes, supe que ten¨ªa que escribir un libreto muy bueno que atrajera a buenos actores, y con ellos a otros productores¡±, explica en Screen International. La trama enfrenta al jefe del servicio secreto del interior de Corea del Sur con su hom¨®logo del servicio secreto de asuntos exteriores, y arranca en un hecho cierto: el asesinato del dictador Park Chung-hee a manos del director de los esp¨ªas en 1979. Corea sigui¨® viviendo bajo una dictadura despiadada durante los a?os ochenta, con sus dirigentes aterrorizados tanto por la posibilidad de que hubiera esp¨ªas de Corea del Norte infiltrados en el Gobierno y en las agencias de seguridad como por las revueltas estudiantiles y de opositores que se multiplicaban por las calles.

Lee crea los dos bandos antagonistas ¡ªcuyos l¨ªderes tienen cuentas pendientes por resolver¡ª al estilo Heat (incluso un tiroteo en Tokio, durante la entrega en Jap¨®n de un desertor del Norte, rememora al robo de la pel¨ªcula de Michael Mann), los viste como en Mad Men y le imprime ritmo de Bond. Eso lo salva de lo intrincada que deviene en algunos momentos la trama. ¡°El tema de fondo es muy serio, por lo que yo intent¨¦ a?adirle mucho entretenimiento lo mejor que pude. Y eso lo han sabido apreciar los seleccionadores del festival de Cannes¡±, aseguraba el cineasta en Deadline.

Lee ya hab¨ªa estado en Cannes, como uno de los actores de La criada, de Im Sang-soo, a concurso en 2010, y entre su medio centenar de trabajos est¨¢ otro thriller de antagonistas masculinos elegantes sin coraz¨®n: Lib¨¦ranos del mal (2020). De joven trabaj¨® como camarero en un caf¨¦ (para sacarse un sueldo para sus gastos, aunque procede de familia adinerada) y all¨ª un dise?ador le descubri¨® y lo reclut¨® como modelo. No dur¨® mucho en esa profesi¨®n, porque en 1993 ya estaba trabajando en televisi¨®n. A finales de esa d¨¦cada ya era una estrella en el cine y pose¨ªa una cadena de restaurantes italianos y una productora.

Por eso le lleg¨® Hunt: para que la produjera. Tras reunirse desde 2005 con directores y guionistas, que rechazaban el proyecto por su complejidad, en 2016 empez¨® a compaginar sus rodajes con la reescritura del libreto. Lee ya se hab¨ªa guardado uno de los personajes, y para el de jefe del servicio secreto interno llam¨® a su amigo Jung Woo-sung, con el que fund¨® hace seis a?os una agencia de representaci¨®n. Fue otro productor, Han Jae-duk, al que hab¨ªan tanteado con el guion original, quien empuj¨® a Lee a que lo dirigiera: nadie m¨¢s conoc¨ªa tan bien la historia. Y de mayo a noviembre de 2021 finalmente rodaron Hunt. Por la covid se film¨® casi por completo en Corea (aunque se desarrolla tambi¨¦n en el sudeste asi¨¢tico, Jap¨®n y Washington) y una segunda unidad, supervisada por Lee por Zoom, viaj¨® a Tailandia.

El futuro de Lee pasa por Corea. Ya est¨¢ trabajando en su segundo largometraje como director, ha filmado m¨¢s cine como actor y en 2023 le espera la segunda parte de El juego del calamar. La explosi¨®n de la serie lo pill¨® sin representante en Estados Unidos. Ya lo tiene. ¡°No hablo ingl¨¦s de manera fluida, aunque no creo que eso me impida comunicar la emoci¨®n de mis personajes¡±, declara en Deadline sobre posibles rodajes en Hollywood. ¡°Mi vida privada no ha cambiado mucho¡±, confiesa en The Hollywood Reporter. ¡°La profesional, s¨ª, espero que se abra la posibilidad de nuevos proyectos por todo el mundo. Y ahora soy mucho m¨¢s precavido con los trabajos que acepto¡±. En el Mercado de Cannes, que se celebra a la vez que el festival y que se expande por los tres s¨®tanos del Palacio de Festivales y por los hoteles de la Croisette, no hay empresas rusas, por el veto, ni chinas, por la covid. Su lugar se lo ha comido la industria audiovisual coreana, reforzada por el triunfo del K-pop y de cineastas como Bong Joon-ho (Par¨¢sitos), y hay un rostro que se repite de caseta en caseta, como gancho de promoci¨®n: el de Lee Jung-jae, el cineasta del momento.